Capítulo 22
Diez años después.
— ¡Justin, baja de una buena vez! — Gritó Brock desde los pies de la escalera — Tengo que ir a trabajar.
— Bien podías irte, papá — un niño de quince años bajó las escaleras con Adrian en su espalda — Y dejarme conducir al fin mi auto.
— ¿Y dejar que lo vuelvas a chocar? — el alfa mayor se burló — No gracias.
— Eso es ser cruel — tomó la mochila de Adrian — Ya nos podemos ir.
— Era hora — dijo Brock, rodando los ojos — ¿Cómo estás, pequeño beta? ¿Has tomado las pastillas?
— Justin me las dio, papá —sonrió — Las estaba buscando y él me ayudó... es mi culpa el que hayamos tardado tanto en bajar.
— El día anterior podías caminar, Adrian — dijo Brock, tomándolo por la espalda y lo bajó a regañadientes — Buen chico, ¿Hicieron las tareas?
— Sí...
— Niños, por el amor de Dios — cerró la puerta de golpe — ¿Y de esa manera es que pretenden que les dé todo el permiso que desean
Capítulo 23Brock dejó a Adrian en la casa de sus padres, sólo les dijo que debía de hacer unas cosas con Justin. Lo primero que hizo fue que buscar una botella de whiskey y sentarse en el sofá de la sala, frente al televisor apagado, viendo a la nada, mientras le daba un sorbo. Era una broma del destino la que estaba pasándole factura por las malas decisiones que tomó en toda su vida. Axel estaba vivo, lo vio. Uno de carne y hueso, tan cambiado.Se sentía la peor forma, iba a tener otro episodio. Justin estaba llamando a su psicólogo personal, la misma persona que lo ayudó en sus crisis pasadas. Cada vez que tenía una cita, tenía un episodio que terminaba bebiendo y terminando por acabar con su vida una y otra vez sin éxito. Lo peor de eso, era que su hijo menor lo había visto en ese estado más de dos veces.Casper entró a la sala, y le quitó la botella a Brock cuando ya iba por más de la mitad. Justin los dejó solos y entró a su habitación, cerrando la
Epílogo— Vaya, creí que estabas muerto — Axel sonrió, de manera rígida — ¿Qué te trae al mundo de los vivos?— Deseo hablar con Brock, a solas — se cruzó de brazos.— No tenemos nada de qué hablar — respondió Brock —Dejaste las cosas en claro hace diez años, no hay razón por la cual debamos de estar juntos.— La marca no desapareció, antes del episodio de hace dos años... quise quitarla, pero aún estaba ahí — murmuró — Por favor, hablemos... después de que me escuches me iré de tu vida y trataré de recuperar a Justin.— No.— Por favor, es todo lo que te pido — suplicó — Me iré otra vez, si es lo que deseas. Pero debemos de aclarar las cosas antes. Firmaré el divorcio para que te cases con quien desees — señaló al omega que estaba a su lado — Y quitaré la marca con alguien cuando vaya a la mandada de Damon y así podrás marcar a la persona que desee ser tu alma gemela, pero por favor...— Vete. Por favor, vete.Ax
Hipnosis: Refiere al estado o la condición que genera el hipnotismo. Éste, a su vez, es un procedimiento que consiste en inducir a una persona a la somnolencia.Eres lo que eres. Siempre le decían eso, desde que tenía uso de la razón. Un omega que fue vendido al mejor postor cuando tenía trece años, y que ahora trabajaba en un prostíbulo tratando de seguir adelante. Ahora con veintitrés años, buscaba la manera de poder describir que le había pasado en su vida pasada, como para acabar en ese lugar.Carter no tiene la más remota idea de que hará con su vida, o como recuperará sus recuerdos. Lo único que sabe, es que la persona que puede romper la hipnosis era su alma gemela.Y bueno, Justin se convirtió en lo que más odiaba en la vida.
.Capítulo 1— Serás un buen gamma y serás complaciente con los alfas. Harás lo que ellos te ordenen.Carter fue violado cuando apenas tenía dieciocho años, fue marcado por un alfa que lo dejó en el cuarto de un hotel. Él, ni siquiera recuerda nada de lo que pasó ese día. Ahora, tenía un hijo de cinco años, por el cual hacía lo que fuera para que nunca le falte nada y que siempre le decía lo bueno y lo malo de la vida.Era su mayor tesoro, la persona por la cual siempre tenía una sonrisa en el rostro, sin importar que siempre estaba ausente la mayor parte de su vida. Había ocultado bien las marcas de su cuerpo, del mismo alfa con el que siempre estaba en las noches, era para prevenir las preguntas que su hijo le haría.— ¿Irás a trabajar hoy? — preguntó Anwen, llamando su atención.— Mañana es mi día libre — dijo Carter, entrando a la casa — Y hoy me toca ir a la cafetería y tú debes de ir a la escuela en media hora.— No quie
Capítulo 2No vas a mirar a otro alfa, más que a tu dueño y ese soy yo.Justin miró a Carter de pies a cabeza, el chico se veía muy diferente a como se veía en la mañana, pero eso no le quitaba nada en su físico. Sólo en su mirada; esa si había cambiado por completo. Esta era una seductora. Sin embargo, sus uñas estaban pintadas, algo que también le llamó la atención. Ese jodido omega con rostro de inocente era toda una bomba de tiempo.— Así que me deseas a mí — Carter piso puso sus manos sobre la mesa — ¿Y si no quiero?— ¿Entonces por qué te acercaste a mí?— Es de mala educación responder una pregunta con otra — se pasó la lengua por los labios — ¿Qué estás haciendo aquí?— Sólo vine a explorar — se encogió de hombros — ¿Qué haces tú aquí?— Trabajo — Carter señaló el asiento vacío que estaba junto a Justin, y éste asintió — Dime la verdad, ¿Te acercaste esta mañana simplemente para algo en especial?— Siemp
Capítulo 3Nadie sabrá lo que eres, es un secreto y si se lo dices a alguien, serás castigado.Semanas más tarde, Justin no había pasado más tiempo del que deseaba en la comisaria. Era un pésimo detective encubierto, ahora mismo si iba a la casa de sus padres estos lo mirarían con el mismo rostro de siempre, te lo dije.Debes de cambiar de trabajo, Justin, es más peligroso el que estés en ese lugar a que estés lejos.En ese momento estaba estacionándose en la casa de ellos, después de pensarlo un par de veces llegó a la conclusión de que no le diría nada a ellos, mejor mentir que morir diciendo la verdad a medias. Su hermano ya hasta estaba estable con alguien más, y eso que apenas era un beta haciéndose pasar por un omega como su padre, al menos hasta que todo estuviese con calma...— Justin — Axel lo abrazó con fuerza cuando lo vio bajar de su auto — Me alegró tanto tu llamada, ¿En dónde está tu novia?— Creo que me dijo que estaba
Capítulo 4Las manos de Carter estaban presionadas contra el marco de la puerta, mientras eran sujetadas por Justin, cada uno de los movimientos que éste hacía con sus caderas hacían que las embestidas fueran mejor de lo que pensaba.En la radio seguía sonando una vieja canción de una película que se sabía de memoria y que ayudaban a que sus gemidos no salieran de sus labios. Estaba cien por ciento seguros de que las personas que tal vez pasaban por ese pasillo estarían excitadas al escucharlos chocar una y otra vez contra la puerta.Los pantalones de ambos estaban en sus tobillos, y lo único que podía salvarse que estaba en su lugar, era la franela que Carter no se había quitado, aun.Las caderas de Justin chocaban cada vez más fuerte contra el cuerpo del menor, dejándole las nalgas rojas por todo el impulso que ejercía. Por más que el omega deseaba quitarse las manos de Justin de sobre las suyas, parecía imposible hacerlo y más cuando lo agarró
Capítulo 5— ¿Estás, amor? — Preguntó Carter, tomando a su hijo en brazos, omitiendo el que esos dos estuvieran ahí — ¿Te duele algo?— No, papá — el menor lo abrazó — Pero esta vez te juro que no hice nada…— Lo sé — besó frente — Gracias por cuidar de mi hijo, señor Hilton…— Dime Axel, Carter — el beta pasó saliva en seco — Es bueno verte nuevamente.— Lo mismo digo — abrazó a su hijo por los hombros — ¿Me pasa la mochila, por favor?— Sí, lo siento — se la pasó, rápidamente — Nunca supe de ti luego de que terminaste la preparatoria…. Hasta que…— Tuve un hijo — se encogió de hombros — No me avergüenzo de eso… usted no puede estar cuidando a niños huérfanos, como yo.— Lamento…— Descuide, soy un omega que busca ser alguien importante…— suspiró — Gracias por cuidarlo, pero debo de irme. Es mi día libre y deseo pasarlo con mi hijo.— ¿En cuál de los dos trabajos es tu día libre? — Carter apretó la mandíb