«Sonreí con cada gesto de tu parte, y sin darme cuenta fui el causante de ese brillo en tus ojos»
Estaba complacida con el resultado que mostraba frente al espejo, habíamos aterrizado hace poco y cada uno de nosotros se dirigo a su respectiva habitación.
Me di una ducha caliente y vestí con las prendas que Melissa puso en mi maleta, ¿Qué si estaba todo en orden?, pues la verdad no, todo lo que estaba frente a mi era ropa sumamente hermosa, el problema es el estilo que tenía esta, apenas cubría lo necesario.
Un toque en mi puerta me exaltó, miré el reloj electrónico y éste marcaba las 11:00 pm, era realmente tarde. Caminé con fastidio y abrí la puerta.
—Hola, Ángel—. Resople y abrí más la puerta para que entrará.
—¿Sé puede saber qué haces aquí a etsa hora Eidrian?—. Esté sólo sonrió y levantó algo de sus manos, mostrándome algunas películas.
—¿Es en serio?— El asintió y yo solo sonreí, no supe la razón, ambos nos
Ella se preguntaba ¿por qué no era feliz?, diariamente pensaba que su vida estaba bien, tenía una familia que la quería, tenía amigos y salía con ellos, sin embargo ella buscaba otro calor, otro tipo de amor.A la lejanía a él solo le importaba sí mismo, le daba igual si otros sufrían por él, nunca fue él hombre más guapo, él más fuerte o sexy, él simplemente era todo aquello que para ella valía la pena mirar.Cuando hablaban se podía sentir una conexión entre ambos muy difícil de romper, pero aunque pocos lo crean hubo un momento en que está se separó trayendo con sigo dolor, no solo emocional si no también físico, esa clase de dolor que golpea una y otra vez tu corazón recientemente herido.La noche se convirtió en día y ella sonrió para todos como era costumbre, cuando esté terminó y volvió a su habitación, se hundió de nuevo entre su propio abismo, su rostro delicado y que pareciese tallado por los mismo dioses fue ofendido con las lágrimas saladas que caía
“Lo haré, pero no por mí ni por los demás , si no por todos aquellos sentimientos que perduraron”Nadie en mi vida fue merecedor de mostrarme diferente, era tan abrumador y cálido a la vez. En poco tiempo logré reaccionar, logré darme cuenta de la verdad detrás de cada mentira hecha por mi mismo. Todo esto era tan diferente a lo que alguna vez creí, una parte de mi sigue sin entenderlo, sin atar aquellos cabos sueltos que amenazan con derrumbarme.Verla dormir cómodamente a un lado de mí, fue y siempre será la mejor vista que en algun momento pude llegar a tener.Le había dedicado una canción, aquella que ella alguna vez compuso para un recital en el instituto, Dela creyó que nadie puso atención en su letra, en su voz, creyó que todo lo que decía solo iba dirigido a una calificación por medio de nuestro profesor, pero no fue así, yo sentí sus palabras, cada nota que emanaba de sus labios, cada frase. Guardé esa canción en mis memorias, tiempo desp
“Viajemos una vez más, solamemte una y te demostraré quién soy en realidad”¿Por qué?, ¿Por qué todo tenía que ser tan difícil?Estoy realmente confundida, lo quiero pero no puedo quererlo, yo renuncié a tener cualquier sentimiento posible, sea bueno o malo. Algo me dice que esto no terminará bien, si no en catástrofe.¿Era necesario esto?, ¿De verdad tenía que afrontarlo a pesar de haberme quitado la vida tiempo atrás?Cerré mis ojos y mis manos se volvieron puños, sentía la energía angelical llenar cada fragmento de mi ser.Llena tenía razón cuando habló conmigo hace momentos.Horas antes—No sabes cuánto te agradezco esto, hace poco me enteré que tengo dos hermanos y lo que hace más difícil esto, es que uno de ellos está muerto y fue ex pareja del hombre que amo, ahora sé la verdad y también como enfrentarla—. Sonreí y puse una mano en su hombro.'No tienes nada que agradecer, Melissa a sido una gran amiga y compañera, t
sálvame El tiempo puede ser tú peor enemigo en los peores momentos”Demasiadas cosas eran las que pasaban a mi alrededor, pero ninguna de ellas era digna de mi atención. No me arrepentía en lo absoluto de las palabras que usé con Dela, ella sentía lo mismo que yo, y era aquí cuando intentaba razonar, ¿de verdad estaba haciendo esto?, Me había doblegado ante lo que por mucho fue una mentira para mí, el amor, no sabía con exactitud si realmente podría llegar a querer a alguien, y si ese alguien no estuviera vivo lo complicaba aún más.¿Cómo podremos sobrellevar esto? ¿De qué manera?—¿Estás bien Eidrian?— Aiter se acercó hasta donde me encontraba por lo que podía ver las chicas habían entrado a un centro comercial. —Lo estoy Aiter— suspiré y me encaminé hacía donde ellas habían idom—¿De verdad la quieres ?— Dela Macrow por mucho fue invisible para mí, pero ahora la miraba como la joya más hermosa y valiosa de toda
“Derrumbaré toda pared para poder llegar a ti, incluso me convertiré en un ser diferente”En ocasiones solemos criticarnos a nosotros mismos por no ser más de lo que otros esperan, pero en realidad ellos no son más de lo que nosotros creemos que aparentan. Cómo un tren escogí bajar en una estación, escogí huir de mi complicada realidad, protegiendome en el lugar más recóndito de mi mente. Al menos allí me sentía segura, sentía que todo lo que había hecho o creado valía la pena. ¿Pero realmente lo valía?, esa era mi mayor pregunta, a pesar de la tormenta en donde me encontraba había encontrado mi propio arcoirís, ese que por colores tenía el nombre de Eidrian. Frío.Arrogante.Abrumador.Oscuro.Peligroso.Era cómo a un principio lo recordaba, tal cual nuestros momentos juntos o los cuales interactuamos de la manera no tan mejor, precisamente me dió esa visualización de él. Sin embargo ahora después de todo lo que ha pasad
" Y para derrotar a un demonio tuve que convertirme en uno " .Llegaron a mí los recuerdos de la noche anterior. Cómo la traje hasta está casa en medio de este mundo fantasioso. Cómo le enseñé con caricias y besos cuánto la amaba. Ella había entregado más que su cuerpo. Y yo no estaba de acuerdo en que entregará su alma o existencia por mí.La falta de confianza en uno mismo puede deliberar varios desacuerdos entre nosotros, pero la verdadera valentía y fuerza viene de enfrentarlos.Ella se había convertido en mi fuerza, tenerla entre mis brazos me hacía sentir vivo, diferente.Miraba mi reflejo en el espejo y no quedaba mucho de ese chico que siempre presumi, ella me había cambiado y una parte de mí lo odiaba, odiaba verme débil a su lado, el no tener la misma fuerza para protegerla me ardía la sangre de tan solo pensar en perderl
" Renuncié a mi amor para que esté tuviese otra oportunidad de amar"Sus palabras habían calado en lo más profundo de mi ser, todo era verdad, sinceramente dejé de ver al Eidrian que conocía hace tiempo.Tomé un gran respiro y limpié un par de lágrimas que sin mi permiso, habían trazado una ruta de mis ojos hasta mis labios.Me di la vuelta con la esperanza de que todo esto fuese solo un sueño, solo una pizca de infinita fantasía resultado de mi imaginación. Pero no era así, en ningún momento desperté, en ningún momento vi la realidad de lo que había causado. De lo que mi destino formuló para este inicio y sobre todo mi final y el de todos aquellos que una vez cruzaron miradas conmigo.Caminé, lo hice sabiendo que podía usar mis alas y volar hasta el centro de Ángeles. Sin embrago quería sentirme útil, quería volver a sentir esa parte de mi humanidad, de lo que había sido mi vida, y sentir el suelo con mis pies era lo que necesitaba. Me sentía sola a pesa
"Fuimos todo, y terminamos siendo nada"Destrucción, una palabra implementada para diferentes ocasiones y sobre todo sentimientos, muy diferente a confianza, ocho letras, y un solo camino, ¿ella tendría la confianza necesaria para estar con alguien como yo?—¡Vaya! Si que eres un Demonio sexy—. Deira me sacó de mis pensamientos con ese fallido elogio, sin embargo no pude evitar sonreír.—Te daré algo para que puedas verte—. Frente a mí apareció un espejo trasparente y entonces logré detallarme con mayor profundidad.Mis alas eran inmensas, negras pero con un brillo alrededor, no pesaban en lo absoluto aunque así lo parecieran, me sentía más fuerte y sobre todo poderoso. Mi cabello había crecido un poco y mis ojos eran una mezcla de blanco con gris, brillaban como dos fragmentos de pequeñas estrellas .—Vaya que soy guapo—. Un par de carcajadas sonaron, reí a la vez que Deira, pero no era momento de eso, tenía que buscar