JaimeDespués de poco más de una semana, Tally y el bebé finalmente estaban en casa. El niño demostró una fortaleza inesperada al salir adelante a pesar de haber llegado unas semanas antes. Aunque temíamos que pasara mucho tiempo antes de que volviera a casa, nos sorprendió a todos. El médico califi
—Pensé que había aclarado que no quería volver a verte en mi oficina —suspiré mientras mostraba el disgusto en mi tono de verla.—No es como si realmente tuvieras otra opción ahora, ¿verdad? —ella sonrió en su respuesta. —Papá quería venir a matarte, pero lo convencí para que me dejara ir a verte.M
BeccaEl momento en que finalicé mi último examen marcó el instante en que sentí que me liberaba de una pesada carga. No podía creer que, tras todo el esfuerzo invertido en obtener mi título, estuviera un paso más cerca de concluir todo esto. Una sonrisa iluminó mi rostro mientras salía por esas pue
—Quizás —dijo encogiéndose de hombros con indiferencia. Caminamos hacia el edificio. No estaba segura de qué esperar, pero conociéndolos a ambos, tenían algo en mente.Tan pronto como entramos, fui envuelta en un abrazo de Allegra, con su rostro sonriente mirándome mientras yo inspeccionaba el apart
BeccaCuando acepté la invitación de Neal para la noche, no tenía idea de qué esperar. Lo que definitivamente no me imaginaba era que viajaríamos en su avión privado desde Nueva York hasta la ciudad, solo para ser recogidos por una lujosa limusina al aterrizar. Tampoco anticipaba que acabaríamos en
—Eso no será necesario. Haremos una excepción —dijo la recepcionista, aparentemente nerviosa.Neal no estaba satisfecho con su respuesta y repitió su demanda con más firmeza.—Lamento decir que no me entendiste correctamente. Quiero que traigas a Lola —dijo Neal, con un tono más amenazante en su voz
JamesNo sabía qué pensar acerca de mi encuentro con Katrine. Había tenido relaciones sexuales con ella, haciéndola gemir de placer en varias ocasiones, pero todo era parte de una farsa. Sin embargo, era necesario para mantener la fachada y asegurarme de que Katrine y su padre creyeran que estaba de
Becca.—¿Qué harás hoy? —Neal preguntó desde la cama. Después de pasar otra noche maravillosa entre sus brazos, era difícil separarme de él, pero tenía asuntos pendientes.—Te lo mencioné ayer... —Sonreí mientras asomaba la cabeza por la esquina del baño para mirarlo. Sus ojos somnolientos se encont