Déjame explicarte un poco de lo que somos tú y yo, o lo que es más, déjame mostrartelo dijo Osiris a Daniela

Entonces el dios de la resurrección la transportó a miles de años atrás a su primera vida, ellos contemplaban el bello Egipto abrazados, Daniela veía a través de los ojos de la persona que abrazaba a Osiris, podía sentir claramente el inmenso amor que le profesaba a ese dios tan endemoniadamente atractivo, en la visión Daniela se separó de él buscando donde poder ver si reflejo hasta que encontró una fuente, Daniela quedó impresionada con lo que veía

La fuente reflejaba la imagen de ella, realmente era ella pero con el cabello totalmente negro, su vestimenta era totalmente egipcia, los brazaletes en sus muñecas, brazos y pies la hacían ver elegante y hermosa, su maquillaje era estar cubierta de dorado en todo su cuerpo y sus ojos estaban alargados en color negro y unas sombras azules que resaltaban más su ojos, sus carnosos labios llevaban un tenue rosa <