Andrew se quedó dormido junto a mi hace un rato, debe estar cansado, por fin ha podido dormir más horas, eso me alegra. No hemos tocado el tema del aniversario de sus padres, me he sentido incomoda al respecto porque actúa como si nada estuviera pasando, en ese momento me llega un sms al móvil

Sophi:

¿hola nena, como estas? ¿cómo está mi primo? ¿el homenaje del personal acaba de terminar, estuvo bastante bien, mi papa está terminando de hacer los últimos arreglos aquí para irnos, como vas tú?

Yo:

 hola Sophi, estoy bien, nerviosa, pero bien, estamos en su casa, justo ahora está dormido, que bueno que todo salió bien. Creo que llegaremos un poco tarde, no quiero despertarlo aún, no ha mencionado nada en todo el día.