El sonido de un móvil sonando me despierta de mi tranquilo sueño, maldigo por lo bajo y coloco una de mis mullidas almohadas sobre mi cabeza y vuelvo a dormirme. Pronto el móvil vuelve a sonar por lo que esta vez aviento una almohada hacia donde proviene el sonido al pie de mi cama, una vez más el aparato vibra y suena, por lo que finalmente me levanto lo cojo y vuelvo a dejarme caer sobre las almohadas, deslizo mi dedo sobre la pantalla sin detenerme a ver quién me llama y contesto de mal humor.
—Diga —del otro lado escucho la voz encolerizada de Andrew responderme.
—¡Con un demonio Asier tengo 10 minutos frente a la puerta de tu casa tocando el timbre y golpeándola, ¿que acaso saliste o qué coño? —su voz me despierta al instante, me siento de golpe y balbuceo algo ininteligible— joder, ¿Asier sigues dormida?
Comienzo a reírme por su tono y lo exaspe
Comienza a bajar las escaleras corriendo como si yo no pesara absolutamente nada, cuando estamos saliendo del edificio saca sus llaves del bolsillo y camina con paso decidido hasta su coche, lo abre y me pone en el suelo finalmente con una sonrisa de suficiencia y arrogancia.—Ahora cállate un rato y súbete si —lo miro mal por unos instantes y el me guiña el ojo, susurra en tono falsamente dulce— por favor.Suspiro y abro la puerta y me meto dentro del coche y cierro la puerta con fuerza, lo veo rodearlo y entrar por su lado, enciende el coche y sale del aparcamiento. Al cabo de unos minutos andado, mete su mano en el bolsillo de su pantalón y me tiende el móvil, lo tomo con disgusto y reviso, solo tengo un WhatsApp de Matt.Matt:Hola nena buenos días, en serio lamento todo lo que paso ayer, fui un imbécil tenías razón en que debí
El resto del camino, no digo nada, permanezco en silencio que finalmente es interrumpido nuevamente por el sonido de mi estómago, a mi lado Andrew se relaja un poco, porque desde que se subió ha estado muy tenso.—Vayamos a comer algo primero.Su voz es ronca pero dulce, yo abro mi boca para decirle algo, pero la cierro y vuelvo abrirla pero no digo nada aun, luego vuelvo a cerrarla y suspiro.—Lo siento, no volveré a llamarte de esa manera.El asiente y continúa conduciendo, después de doblar dos esquinas nos tenemos en la misma cafetería donde paro el día que íbamos a su casa, se estaciona.—Ven vayamos a comer.Me quito el cinturón y bajamos del coche al entrar reconozco a la cajera, es la misma que estaba que estaba ese día, al acercarnos a la barra esta lo saluda amablemente.—Hola Andrew buenos días, ¿cómo est&aacut
Antes de volver a levantar su rostro y ponerse en pie, yo solo inclino mi cabeza un poco hacia el frente y le sonrío con timidez el me devuelve el gesto, me pongo en pie siguiendo a Andrew fuera de la habitación. Donde ya está colocándose los zapatos, me tiende los míos y lo imito, al cabo de un segundo me mira y sonríe, toma mi mano y hecha andar por el pasillo.Pasamos unas cuantas puertas como las que tenía la habitación donde estaba Ryu y doblamos luego a la derecha allí nos encontramos en una especia de balcón descendemos las escaleras y nos encontramos en un hermoso jardín japonés, que solo me hace soltar un gritito de admiración.Hay una cascada al fondo y un pequeño arrollo lo atraviesa, hay árboles frondosos y muchísimos arbustos cubiertos del flores. Cerca de la cascada esta un enorme árbol de largas ramas medio desnudo, lo miro admirando su
Dentro del edificio Andrew me condujo por unos pasillos, hasta una habitación parecida a donde se encontraba el sensei, pero estaba no daba hacia el jardín estaba completamente cerrada y tenía colchonetas en el piso, había un saco de boxeo en una esquina y una pared estaba completamente cubierta de espejos.Andrew se quitó los zapatos y entro dentro de la habitación y corrió otra puerta para entrar a otra pequeña estancia dentro de la misma, luego se giró hacia mí y me susurro—Ven quítate los zapatos para entrar.Hago lo que me ordena y lo sigo, cuando entro a la estancia está sentado en una silla, registrando un bolso deportivo, saca unas prendas de color negro y las coloca a su lado, luego me mira y me dice sonriendo.—Vamos a divertirnos un rato.Luego se levanta y se saca la franela que tiene puesta por sobre la cabeza y pasa justamente lo que
Él me sonríe ampliamente y se para derecho con sus manos tras de su espalda y cierra sus ojos, me quedo en donde estoy pensando cómo hacer para acercarme sin que lo note, el suelo no cruje cuando camino por las colchonetas, por lo que el suelo no me denunciara pero algo me dice que notara de todas formas cuando me acerque.Medito en mis opciones y todas llevan a un solo lugar, sabrá que estoy cerca y no me dejara tocarlo. Luego una idea maravillosamente genial se me ocurre, la idea es que lo toque, él dijo en el abdomen, pero lo esencial en esto es que lo toque ¿no?Una sonrisa de triunfo se escapa de mis labios y me paro frente a el a unos cuantos pasos tomo impulso y salto sobre él, al chocar contra su cuerpo este se tambalea un poco, mis piernas se enrollan en su cintura y sus manos salen disparadas hacia mi espalda para sujetarme y que no me caiga en el proceso el pierde el equilibro y ambos caemos sobre las colchone
—Maldición, que rayos es esto, ¿es que acaso esta demente para hacer una estupidez como esta? Suelto de repente en voz alta, tras haber leído los chats en el grupo de Blue, Andrew inmediatamente voltea a verme con el entrecejo fruncido y me cuestiona. —¿Qué pasa? Giro el móvil para mostrarle una foto en la que aparecemos Matt y yo besándonos la noche anterior y al pie de la foto pone. "Nueva conquista de Matt Williams" Los ojos de Andrew se abren como platos, los músculos de su cuerpo se tensan, veo como sus dientes se aprietan y frena de golpe, me arranca el móvil de las manos y mira la foto, luego le da atrás y comienza a leer el chat, en él pone Chris quese filtró la fotografíay alguien la subióa una red social, Matt responde queél se encargarade todoy Sophi y contesto queno habíade que hacerse cargo de nada ya que no era ninguna mentira, que yo era su nueva conquista
—Eres malísima fingiendo que no causo ningún efecto en ti. Vuelve a acercar su rostro al mío y vuelve hablarme en mismo tono bajo y ronco —Estoy muriéndome por besarte Asier, pero sé que no debo hacerlo aunque —hace una pausa y acerca labios a los míos pero sin tocarlos y continua— quizás también quieras besarme. Al hablar sus labios rosan los míos quemándolos y un deseo oscuro se apodera de mi cuerpo, necesito besarlo, necesito sentir sus labios sobre los míos, sus manos sobre mi cuerpo, pero de alguna forma controlo las ganas que ha despertado en mí y me aparto de él, en cuanto sus manos y su cuerpo está lejos de mí, vuelvo a respirar y es en ese instante en el que noto que estaba aguantando la respiración, lo escucho suspirar a mi lado y continua. —O quizás no. Su voz suena decepcionada pero no le respondo, porque sé que si abro la boca solo le diré que también estoy muriendo por besarlo por lo que me quedo callada y en ese preciso momento
El comentario me deja fuera de base totalmente, el continua comiendo, como si nada aunque veo como una sombra de pesar y tristeza se instala en sus ojos, al cabo de unos segundos continua.—Asier hay algo que está rondándome en la cabeza desde hace rato —hace una pausa y lo miro con curiosidad y le pregunto inmediatamente—¿El qué?El suspira y me ve un momento y suelta el trozo de pizza, sacude sus manos y se recuesta del espalda de la silla, que se esté poniendo cómodo quiere decir que la pregunta es algo incomoda o intensa—¿Qué te hizo enredarte tan pronto con Matt?Su pregunta hace que me atragante con un trozo de pizza y comience a toser él se inclina sobre mí y me pasa la lata de cola, tomo un sorbo y con la voz entrecortada le pregunto—¿Cómo dices? —él sonríe con pesar y repite.—¿