Derrame solamente esa lágrima, no permití llorar más , pero esa simple lagrima se encontraba cargada de una gran parte de mi dolor, ¿que ganaba derramando llanto de manera desconsolada? con eso James no regresaría conmigo, pero esto no se quedaría así de eso estaba segura, me acerco al closet donde están guardadas mis cosas, me coloco un pantalón de mezclilla oscura una blusa de tirantes negra junto a unas hermosas zapatillas planas en tono nude con tiras doradas, sin alhaja alguna, me hice una coleta alta, me coloque un poco de rímel, brillo labial y listo, comencé a guardar cada una de mis pertenencias en las maletas.
Después de veinte minutos había logrado guardado todo con extrema rapidez, me coloque una pequeña mochila y allí guarde mi dinero, me alegraba de no haber venido a este lugar sin un peso, estoy tomando un respiro que me llene de valor y frialdad, es lo que
Una siesta después….Unos suaves golpeteos me hacen salir de mi ensoñación, comienzo a removerme con intención de levantarme, apenas mis ojos se abren siento un ardor, y al momento de sentarme al borde de la cama, siento que mi mundo se viene a bajo me doy cuenta de que todo es real y no un mal sueño, unas lagrimas ruedan por mis mejillas, la presión en mi pecho duele demasiado, el vacío, el dolor, es como si me hubiesen arrancado un trozo de mi interior, la voz de Elliot pidiendo permiso para entrar me hacen salir de mis pensamientos, pero el dolor sigue allí, acrecentándose en mi interior.-Adelante, pasa por favor.Ingresa con un gesto tierno y una sonrisa plasma en su rostro, viste de pantalón negro, calzado formal, y camisa de manga larga en tono celeste, lleva sus manos dentro de los bolsillos, su cabello se encuentra levemente despeinado
James aún no se percata de mi presencia, se encuentra inmerso en sus pensamientos, su vista clavada en un punto ciego, parece detestar a su acompañante y su toque, intenta sacársela de encima pero esta se aferra con más firmeza a él, por lo que james resignado solo tiene la vista fija en su copa de vino, luce aproximadamente de treinta años, melena negra unos cuantos dedos bajo los hombros, estatura media, labios ligeramente carnosos, ella me observa ligeramente de reojo, la mirada que me dedica es completamente despectiva, ojos azules, cuerpo delgado sin atributos que realcen su silueta, para colmo de mis males está usando un vestido negro al igual que yo, pero a diferencia del mío el de ella es un escote strapless ceñido a la cintura después de su vientre es completamente suelto, sus labios rojos siendo una imitación de mi actual atuendo, levanto una ceja para obsequiarle una mirada de burla al tiempo que
- ¿Y bien james?, cuéntame ¿cómo te va en tu nueva vida? – era evidente que el único que aminoraba la tensión o eso intentaba era Elliot, por que si fuera por james o esa tal carolina y yo ya nos habríamos sacado los ojos desde un inicio.-Me va muy bien en la empresa Elliot ¿y a ti? ¿No creo que tan bien verdad? Recuerda que mi empresa es el número uno, por otro lado, tu acompañante es muy bella. – nunca había visto a James actuar con tal hostilidad, me sentí demasiado sorprendida por su actitud, el jamás actuaba de ese modo, pero algo existía entre James y Elliot, la rivalidad entre ese par se respiraba en el aire.- No me refería a lo laboral, si no a lo personal y sabes que no es mi única empresa en esa rama, así que por eso no me preocupó y esta hermosa chica que ves aquí es sumamente es
-Veras por ciertas cuestiones personales perdí un año de instituto, es decir ingrese con un año más de edad que mis compañeros, y él es mi profesor de literatura, larga historia, pero creo que de este modo se resume mejor. – menciono restándole importancia al asunto al tiempo que doy un pequeño sorbo a mi copa para evitar el contacto visual.Omití la parte en que comenzamos a enredarnos logrando enamorarme de él como una boda ilusa, y sobre todo que mantenía una relación amorosa con mi amado profesor, hasta la mañana del día de hoy, lo nuestro fue prohibido desde un inicio, no debimos sobre pasar los límites, pero ¿a quién rayos le interesa?, yo conocía los riesgos y aun así decidí sucumbir a mis deseos, a pesar de todo no me arrepentía de nada aun que ahora me toqué observar y sentir en carne viva todo e
Inoportunamente nos hemos encontrado a las a fueras del tocador, cuando recién egresaba de el, me gire con total intención de cerrar la puerta tras de mi y marcharme sin siquiera obsequiarle una ultima mirada, pero toda acción fue detenida cuando repentinamente su cuerpo se cierne sobre mí, impactando mi espalda contra la fría madera de la puerta, ocasionando que esta se abra obsequiándonos el acceso, James sin detenerse a si quiera observar nos dirige contra los lavabos donde se sitúa encima un espejo en forma rectangular con un marco dorado, me toma por la cintura pegando el final de mi espalda sobre el mármol que hace que mi piel se erice ante la sensación del frio sobre mi piel, solo entonces me atrevo a posar mis ojos sobre los suyos, en su mirada no refleja absolutamente nada, cuando estoy a punto de intentar zafarme de su agarre sus labios se posan sobre los míos uniéndonos en un urgente beso, coloca
Tania abre la puerta lentamente y se asoma un poco para hablar.-Señor Black, disculpe la interrupción, pero aquí hay una joven interesada en la vacante de mesera. – puedo percibir cierto temor en la voz de la chica al referirse a ese hombre, incluso su radiante sonrisa ha desaparecido.-Muy bien Tania hazla pasar y puedes retirarte a continuar con tus actividades.Observo como asiente y se retira de la puerta, se acerca aun mas a mi y me obsequia un apretón de mano al igual que una sonrisa.-Mucha suerte Angelique cuando termines me buscas en la entrada para llevarte a tu mesa, espero y seas mi compañera de trabajo.-Gracias por todo Tania y claro que te buscare para ver si quedamos como compañeras de trabajo.Dicho esto, Tania avanza por el pasillo montada en sus zapatos de tacón alto en tono negro, su
Eso fue realmente extraño, yo solamente venia por algo de comida, en calidad de cliente y salí con empleo del lugar, el señor Black era un hombre enigmático, supongo que me observo a detalle para confirmar que encajo en el perfil que busca, al parecer tienen favoritismo por las rubias en este sitio, solo melenas rubias se visualizan al servicio, al llegar a la entrada logro ver a la rubia Tania, Ella al verme se acerca a mi sonriente, y un tanto emocionada.- ¿Y qué tal como te fue?, ¿has quedado? – inquiere ansiosa.-Muy bien mañana comienzo compañera. – respondo sonriente, sin duda creo que el empleo me vendrá genial.Ella me regala una sonrisa al tiempo que me guía hasta una mesa, para una persona, ordene lasaña y una copa de vino blanco, era extraño que a mi edad tuviera el habito de saborear una buena copa de vino,
Era sumamente extraño que el llamará, desde que nos despedimos en la playa no volví a saber nada de él y ahora aparece mágicamente de la nada para hablar conmigo, con algo de cautela atiendo la llamada, esperando alguna mala noticia o algo por el estilo.-Hola preciosa. – ese tono seductor y juguetón me hace reír de inmediato.-Hola Elliot.- ¿Como estas? ¿Y que es todo ese ruido que se escucha? – inquiere en ese tono melancólico, que me hace creer que sin duda también como actor triunfaría en algún papel protagónico.-Estoy bien gracias por preocuparte, ¿y tú qué tal?, Viene a bailar un poco y por algún trago, estaba aburrida y preferí salir de casa un poco. – explico con sencillez evitando entrar en detalles.-Te diviertes sin m&