●Eric:
El plan que Ximena sugirió estaba por ponerse en marcha. Ya han pasado varios días pero las cosas no mejoran. Las mandaremos a una de mis muchas casas a las afueras de la ciudad.
Ximena se encargó de explicarles el plan a las chicas, me dijo que muchas no lo habían tomado bien, y lo entiendo, se que muchas no quieren estar aquí...¿Pero por qué Ximena no quiere irse? ¿Por qué nos dio una idea que haría que no las encontrarán? No lo sé.
Mas tarde tengo entrenamiento con ella, espero tener la oportunidad de preguntarle y no recibir un golpe en la cara por ser muy chismoso pero no puedo sacarme esa duda de mi cabeza.
Me estoy dirigiendo al lugar de entrenamiento y me la encuentro en la entrada.
—¿Listo para que te patee el trasero? —me dijo de manera burlona al verme.
—Más bien, ¿Tu estas lista? —dije con una mirada retadora.
Entramos y empezamos a calentar un poco para después empezar con unos movimientos de defensa. Las preguntas no dejaban de darme vuelta en mi cabeza así que decidí hablar...
—Oye...¿te puedo preguntar algo? —dije sin dejar de entrenar. Tengo la necesidad de que me responda mis dudas.
—Si esta bien...¿Qué pasa? —me contesto concentrada en no recibir ningún golpe mío.
—¿Tú te quieres quedar aquí? —fui muy directo, pero necesito respuestas.
—Emm...¿a qué te refieres? —me miró confundida, creo que no me di a entender con la pregunta.
—Bueno...nos diste una gran idea para que nos las encuentren...¿Por qué? —le pregunté, ella no dejaba de pelear y de estar atenta.
—No lo sé...creo que me esta empezando a gustar estar aquí. —me contestó de una manera muy normal, como sino hubiera nada de malo en eso, ¿pero por qué le empezó a gustar?
—¿Y puedo preguntar el porqué te está gustando? —no entiendo nada, cada respuesta que me da, hacía que me preguntara otra cosa.
—Bueno...—Empezó a decir, ambos dejamos pelear y yo puse atención a todo lo que decía, cada una de las palabras.— En mi casa no me prestaban atención, solo era yo en mi cuarto. Todos los días mis padres se peleaban y después nos querían hacer creer que todo estaba bien. Mi hermana mayor desobedecia mucho a mi mamá así que ellas también peleaban. Mi hermano menor siempre buscaba hacerme sentir mal, haciendo burlas a mi apariencia y mi padre casi no estaba en la casa.
No podía creer lo que me esta diciendo, esa chica increíble y alegre no era muy feliz en su casa pero no quise interrumpirla y deje que continuará.
—Cuando me trajeron aquí toda mi vida cambio. Conocí a nuevas personas y descubrí que mi vida ahora seria hacer lo que nunca imagine, pertenecer a una mafia. No me gusta estar aqui como prisionera metida en la mafia pero no puedo creer que una persona desconocida la cual se encargó de traerme aquí, me puede hacer sentir que estoy en mi hogar...que me demostró más cariño y atención de la que he recibido en toda mi vida. Así que gracias. —terminó diciendo con miles de lágrimas en sus ojos.
●Ximena:
Nunca pensé que todo eso se lo diría a él, o que al estar aquí me llegaría a sentir así. Solo pude sentir como lágrimas caían de mis ojos al recordar como era mi vida. Después de decir todo eso, solo sentí como unos brazos me rodeaban, sí, era Eric. Sentí una gran paz y tranquilidad al estar en sus brazos. Sentía como si fuera una amor paternal, claro que no era así pero de verdad lo sentía así.
—Yo siempre quise una hija...—me empezó a decir mientras se separaba del abrazo.— Mi esposa y yo lo intentamos mucho como puedes darte cuenta.
Reí ante su comentario, era bueno que incluso intentaba hacerme sonreír en estos momentos.
—No perdía esperanza de que algún día tendría una hija...—continúo hablando, ¿a que quiere llegar con todo esto?—...Después esas esperanzas de esfumaron cuando en un día de trabajo, me arrebataron a mi esposa de mis brazos. Sentí como perdí todo...me aleje de mis hijos y los entrene mucho mejor, no podría resistir el perder a uno de ellos. Y luego llegaste tú, siendo tan parecida a mi difunta esposa...ese carácter, esa alegría, esa hermosa sonrisa. Después tú y yo empezamos a acercarnos más...y yo empecé a verte como a la hija que siempre quise. Me devolviste esa felicidad que pensé nunca recuperar, así que si uno de los dos debe de decir gracias, ese soy yo.
Esta vez, yo lo abrace, era increíble y a la vez triste todo esto que me estaba diciendo. De verdad, por primera vez senti él cariño de un padre.
Nuestro momento fue interrumpido por un guardia, el plan que sugerí estaba apunto de empezar así que me pidió que me alistara y que me encargará de las chicas. Eso hice, me fui a mi habitación, me di una rápida ducha y aliste algunas cosas en una mochila, después fui a ver a las chicas para ver si ya estaban listas y así era.
No nos iríamos mucho tiempo, así que no agarramos mucho, solo lo necesario y nos dispusimos a subir a una camioneta negra. Todas ya estaban arriba, solo faltaba yo pero tenía que despedirme de Eric, le di una abrazo y al separarme me dijo algo...
—Ten mucho cuidado. —dijo dándome un mirada llena de preocupación.
—Claro que sí. —le dije con una sonrisa y le di otro corto abrazo.
Estaba a punto de entrar a la camioneta cuando sentí como alguien me agarró del brazo, un agarre un poco agresivo y de esos que duelen, voltie y al ver quien era me quede confundida. ¿Qué quiere?
●Ximena:Estaba a punto de entrar a la camioneta cuando sentí como alguien me agarro del brazo, voltie y al ver quien era me quede confundida. ¿Qué quiere?...—Cuídate. —me dijo Luke, ¿Por qué tan preocupado?—Ok...emm ya tengo que irme. —le dije pues no soltaba mi brazo.—A sí...Emm adiós. —dijo mientras se alejaba para yo subirme.Voltie a ver a Eric y me sonrió. Es un maldito chismoso. Entre a la camioneta y el chófer empezó avanzar. Las chicas me veian confundidas, no les sirve de nada mirarme, no les diré nada...no me molestan sus miradas.—¿Supongo que no hablarás de lo que ha pasado en entos dias? —dijo una chica llamada Carolina, ella y yo nos volvimos algo cercanas después de una pijamada secreta en mi cuarto.—¿Qué es lo que ha pasado en estos días? —dije haciéndome la tonta volteando hacia la ventana de mi lado.—Vamos, ¿Qué ha pasado con
●Luke:Ayer estaba tan preocupado por Ximena que decidí hablarle por el radio, ella me respondío y eso me lleno de mucha tranquilidad y paz al escuchar su bella voz. Deje que descansará y hoy llegará. Estoy muy feliz pero no se porque. ¿¡Por qué me preocupo tanto por ella!?Ya hemos regresado las cosas a su lugar...algo que no mencione es que mi padre es dueño de una empresa muy conocida en el mundo y la usamos también para cubrirnos de los policías, nos ha servido muy bien pero no se porque les dio sospecha de que ellas estuvieran aquí.Es temprano, me levante y me aliste para ir mi entrenamiento con mis hermanos. Al llegar todos estaban hablando de algo que parecía muy interesante así que me acerque...—¿Qué hay chicos? —les pregunte acercándome a ellos.—Nada interesante. —contesto Iván uno de mis hermanos.—Solo que las chicas llegan hoy. —dijo Adrian otro de ellos.
●Ximena:Cuando quise levantarme sentí unas manos en mis caderas haciendo que no me pudiera levantar, cuando voltie mi mirada pude ver como Luke me sujetaba fuertemente y de un momento a otro las personas habían desaparecido de la sala, estábamos él y yo solos en la habitación.En un instante muy rápido Luke se sentó, yo aún sentada arriba de él. En ese momento sus manos se posaron en mi cintura haciéndo que me acercará más a él. Su respiración se combinaba con la mía, podía sentir su corazón latir muy rápido, estaba muy agitado. Una de sus manos empezó a subir a mi espalda y de un momento muy rápido ya estaba su mano en mi cuello.Pude sentir como poco a poco el espacio que nos separaba, se iba haciendo cada vez más pequeño. Estaba tan cerca que podía ver cada c
●Ximena:Estaba ahí sentada mientras nos dirigíamos a la estación de policía. Con lágrimas en mis ojos mientras recordaba todos los momentos hermosos y divertidos....—Ven sientate. —dijo el señor, yo solo obedecí— ¿Sabes que estás haciendo aquí o dónde estas?—No. —fue lo único que dije, sabía que tal vez me lo diría.—Bien, mi nombre es Eric y soy encargado de una de las mafias más importante y peligrosas del mundo. —y si, lo dijo con una tranquilidad impresionante, encargado de una de las mafias.—Si..Mmm..lo dice como si eso respondiera el porqué estoy aquí. —dije con una valentía que no se de donde diablos la saque.—Mmm con que muy valiente —rió— Bien
●Luke:Ximena lo hizo. Pestañeo dos veces indicándome que tenía que irme y salvar a mi familia. Mis ojos se cristalizaron y luego, sin mi permiso salieron unas lágrimas que me traicionaron. La policía se escuchaba cada vez más cerca; mi familia ya había sido sacada de ahí, solo faltaba yo.Poco a poco me voy alejando para dirigirme a la salida sin dejar de ver fijamente a Ximena y antes de salir por completo me arme de valor y le dije que la amaba. Al perder de vista a Ximena salí corriendo a mi camioneta junto con dos hombres que se quedaron conmigo, tan rápido como me subí, salimos de ahí por la puerta trasera de la casa que se usa en caso de emergencia.La policía nos atacó y solo hay un hombre que tiene el valor para mandar a los policías a nuestra casa...Culebra. La policía esta a sus pies, él los controla y ellos obedecen todo lo que les dice. Me quedé pensando si le debíamos algo pero no era asi...a sí que...¿Qué es lo que qu
●Ximena:Mi sufrimiento estaba a punto de iniciar. Mi cara estaba relajada y en mi mirada no había rastro de miedo pero si entraran a mi cabeza seria otra historia. Todo estaba bien hasta que me dijeron que mi familia estaba atrás del cristal así que me comportará. ¡Me lo dijeron creyendo que con eso me comportaría mejor, ha que tontos!—Bien las cosas se harán así...te haremos una pregunta y si no respondes te tocará una descarga. —me dijo mientras se sentaba enfrente de mi con una cara seria.—Bien, que el juego comience. —dije con una mirada retadora.—¿Quién te secuestro? —¡que pregunta tan más tonta!—Amm sigo esperando la descarga. —¿de verdad cree que voy a responder?No voy a traicionar a Eric ni a su familia. Ellos han hecho por mí muchas cosas. Me dieron la descarga, era el nivel uno y lo único que hice fue morderme el labio inferior muy despacio, sentí el dolor que
●Eric:Cuando Luke me dijo que lo más probable que es que Culebra estaba detrás de todo esto, sabía que había una gran probabilidad de eso porque los policías no se atrevían a tocarnos ni acercarse ¿Pero para que quieren a Ximena? ¿Qué es lo que quieren de nosotros?Ya es el día siguiente. Luke esta más nervioso de lo normal de cuando vamos a misiones o cosas del trabajo pero es normal, vamos a ir a recuperar a su novia.Tenemos a un infiltrado en la policía que nos comunica todo lo que pasa allá. Nos estamos dirigiendo para la estación de policía con tres camionetas cada una con seis hombres y otra camioneta donde vamos otros cinco junto con Luke que insistió mucho en estar aquí.El hombre que tengo de infiltrado en la policía ya se encargó de contarle una
●Ximena:...ya un poco alejada de mi familia pero ellos aun pudiéndome ver siento una presión en mi cabeza, me detengo de golpe pensando en que es lo que esta pasando pero luego me doy cuenta... alguien me esta apuntando con un arma...No me volteó ni hago un movimiento brusco. Luke al sentir que no lo sigo se voltea de golpe y su mirada se llena de enojo cuando ve lo que está pasando. Con mi mirada, de alguna manera le digo que no haga nada.Levanto mis manos y poco a poco, muy despacio me voy volteando hasta que quedo enfrente de él; con su arma apuntandome ahora en mi frente, mi mirada es seria pero de un momento a otro se forma una sonrisa en mi rostro.—¿Qué? ¿No piensas disparar? —le dije retandolo— ¿Quieres que te ayude? —volví a hablar al ver como temblaban.En un movimiento rápido que me sé gracias a Eric, logré quitarle el arma de sus manos ahora teniéndola en las mías. Su rost