Después de la visita de Leonardo en mi casa hace dos semanas no he vuelto a saber nada de él, por lo que supongo todo el asunto de los bocetos debe de estar solucionado y no creo volver a verlo. Me dirijo al hospital para ver a don Xavier, tiene mucho que no lo visito la última vez fue unos días antes de mi supuesta boda. Abro la puerta de su habitación y lo veo con su asistente, al verme entrar me regala una gran sonrisa que me reconforta el alma.
- ¡Mi pequeña Cam!, hace tiempo que no venías a ver a este viejo, sé que estabas muy ocupada en tu luna de miel, pero te has olvidado de mí -.
Me acerco mientras le doy un gran abrazo y un beso en la mejilla, lo considero como a un abuelo más, trato de contener mis lágrimas, pero no puedo y al final termino llorando sobre su hombro.
- ¿Qué te pasa pequeña? No asustes a este viejo -Pregunta preocupado.
Al fina
Le comento al abuelo todo lo que sucedió, así como el hecho de que esta mujer tuvo la osadía de cachetear a su propio nieto frente a todo su exequipo y cuando termino de contarle veo con tal satisfacción que el abuelo esta rojo de la ira, era de esperarse que me defienda después de todo yo soy su sangre.-Si serás imbécil, como pudiste decirle eso con justa razón te dio una cachetada, si yo hubiese sido ella no te hubiera dado no una sino unas cuantas más. Ahora mismo vas la buscas y le pides perdón no sé qué tengas que hacer, pero quiero que me la traigas de regreso a la empresa y si no lo logras vete olvidando de seguir en tu puesto de CEO -.Me quedo helado al escucharlo decir todas estas cosas, después de todo la sigue defendiendo y me pide que me humille al pedirle perdón, el abuelo se ha vuelto loco no haré nada de eso.-No lo haré -.- &i
Le pedí a Mateo que tratara de contactarse con esta mujer, pero ella le ha rechazado la reunión después de eso no le ha vuelto a contestar ninguna llamada y tampoco quiero presentarme en su casa porque sé que su ama de llaves mi mirará con esos ojos de pistola como la vez pasada, no es que en verdad quiera humillarme y pedirle una disculpa; aún recuerdo la cachetada que me dio frente a mis empleados y me hierve la sangre. Al final me decido a ir a su casa y tratar de convencerla de regresar.Después de tocar el timbre dos veces, me abre su ama de llaves y justo como esperaba me hace mala cara.-Buenas tardes, ¿Podría hablar con la señorita Camille? -Pregunto en un tono bastante amable en un intento de sonar muy amigable.-Lo siento señor, pero como mi niña le dijo la vez pasada no puede pasar y además es imposible que hable con ella en este momento, no está en casa
LeonardoAl siguiente día cuando bajo a desayunar, como de costumbre encuentro mi periódico en mi lugar, mientras lo hojeo llegó a la parte de espectáculos y veo unas fotografías (que por supuesto ya me esperaba) una donde nos estamos besando Camille y yo, y otra donde ella me suelta la cachetada, sonrió al recordar ese beso aun no entiendo porque lo hice, pero no me arrepiento de nada por el contrario deseo volver a besarla.Durante el viaje a la oficina me doy cuenta de que Mateo quiere preguntar sobre lo sucedido en el aeropuerto ya que por lo que pude leer es el tema principal en los medios, pero se abstiene dado que conoce mi carácter.-Quita esa cara y pregunta lo que quieras -.- No tengo nada que preguntarle jefe, usted sabe lo que hace sólo le recuerdo que si su abuelo ve esto no creo que lo tome nada bien -No le respondo nada, pero me quedo meditando lo que Mateo me acaba de decir y tiene r
CamilleNos perdemos rápidamente entre los invitados y me siento aliviada de alejarme por fin de Leonardo, no quise voltear a verlo, pero podía sentir como me seguía con la mirada y eso me incomoda hace que mi corazón retumbe de forma descontrolada, hace un rato estuve tentada de mover un poco mi cara para tener más cerca sus labios, debo de sacar esos pensamientos de mi cabeza no entiendo porque se me ocurrió algo así.-Cam hice un trabajo estupendo con ese vestido atraes todas las miradas, hasta la de Leonardo Ruíz y eso que ese hombre es frío como el hielo, estaba tan cerca de ti que por un momento pensé que te besaría, imagínate los titulares de mañana -Comenta mi amigo bastante entusiasmado ante esta idea.-No digas eso, sabes que en este momento no quiero tener ningún tipo de relación, ya sabes lo que sucedió con mi ex… -Me quedo helada y
CamilleAún estoy un poco perpleja por todo lo que acaba de suceder, si no ha sido por la intervención de Leonardo creo que en este momento estaría gritándole sus verdades a esos dos, pero al estar así tan cerca de él me siento segura.Comienza la subasta y el último artículo en aparecer es mi vestido, en cuanto las personas lo ven la sala se llena con murmullos de admiración. Para mi desagrado Iker está entre los que quieren hacerse con ese vestido, pero no quiero que él lo tenga y menos que esa mujer con la que está lo use (me entristece pensar que con ella quiera casarse). Después de un rato solo quedan 2 posibles compradores Iker y el señor Quiroz, espero que este último lo consiga y que Iker se quedé con un palmo de narices.LeonardoPuedo ver la cara de Camille cada que su ex ofrece una cantidad más alta que su contrincante, al fina
Subo a la limusina que está esperando por Leonardo, él le da la dirección al chofer no puse atención si le dio la de mi casa ya que voy sumida en mis pensamientos y mientras miro por la ventana una lágrima me traiciona y escapa de mi ojo, alzo mi mano para limpiarla cuando siento como la mano de Leonardo es más rápida y la limpia, al mismo tiempo gira mi cara y veo en su rostro un poco de tristeza, enojo y otra cosa que no puedo descifrar.LeonardoEn la limusina no puedo dejar de pensar en todo lo que ha sucedido esta noche, sigo mirando a Camille y a través de su reflejo en la ventana puedo ver que no está bien, que toda esa fortaleza que mostro durante la entrevista se ha esfumado y no puedo evitar sentir como si me estrujaran el corazón, quisiera borrar todos sus recuerdos tristes y ver una sonrisa auténtica en ese rostro que por momentos se sume en la tristeza como lo está en este
CamilleDespierto y veo un pequeño rayo de luz asomando por una gran ventana, giro a mi derecha y veo a Leonardo profundamente dormido lo que hace sentirme culpable por lo que sucedió la noche anterior yo no amo a este hombre y creo que no seré capaz de volver a amar después de lo sucedido con Iker, me levanto con mucho cuidado y tomó rápidamente mi ropa para vestirme y poder salir de este lugar.Salgo y por fortuna no encuentro a nadie, llamó un taxi y me dirijo a mi casa dónde sé que mis padres deben de estar preocupados por mí. Al llegar a casa solo encuentro a los empleados y subo rápidamente a mi habitación para darme una ducha y poder quitarme el aroma que Leonardo ha dejado en mí.Mientras miro mi reflejo en el espejo de mi baño veo unas pequeñas marcas recuerdo de todo lo que hice anoche y no puedo dejar de volver a sentir el deseo de tener a Leonardo
LeonardoEstoy frente a la casa de los padres de Camille y estoy un poco nervioso (me siento como un adolescente) su ama de llaves una mujer muy amable me permite entrar y esperarla en su sala, mientras espero por ella bajan dos hombres charlando parecen ser sus hermanos de Camille ya que se ven un poco más grandes que ella los estoy evaluando con la mirada cuando reparan en mí y veo que ambos fruncen el ceño en mi dirección.-Así que tú eres el nuevo novio de mi hermana -Dice uno de ellos en un tono nada amistoso.-De una vez te advertimos que no dejaremos que suceda lo mismo que con el imbécil de Iker, si te atreves a dañarla la pagarás muy caro -.-André, Pierre pueden dejar en paz a las visitas de su hermana -La que habla es una señora muy guapa rubia de ojos verdes iguales a los de Camille y ahora sé de dónde heredó esos bellos ojos, tiene una mirada muy