Lisandro Miller Salí de mi casa furioso ante las palabras de Valentina furioso con mi padre porque creí todo este tiempo que él estaba cuidando de ella sin embargo Valentina acaba de decirme que había pasado dos años horribles porque nadie la había estado apoyando. Mientras me montaba mi camioneta pude ver como una camioneta se detenía lo que hizo que me bajara a ver quién era si lo dejaban entrar a este lugar tan fácil quería decir que era alguien que venía constantemente. Antes de venir la primera vez me había asegurado de ver a mi alrededor y pude ver que Valentina tenía demasiada seguridad Si antes yo pensaba que era excesivo pues Valentina era el triple había un francotiradores por todos lados y te revisaban al entrar y al salir. — qué m***** estás aquí?!— me acerqué a él empujándolo apenas lo vi este retrocedió y me miró molesto — deja de molestarla mira yo no soy de pelear ni mucho menos, ella está bien sin ti de hecho todos están bien sin ti ahora, no vengas simplemente a
Valentina Saavedra de Miller El teléfono comenzó a sona.Me levanté para ver quién era pensando que quizás podría ser una emergencia, doblé los ojos al darme cuenta que era Lisandro claro que no le iba a atender la llamada solté el teléfono y fui al baño eran las 7am¿Por qué lisandro me llamaría a esta hora?¿Y si era una emergencia?No, si fuera así vendría el mismo ¿No??Si, seguro solo quiere hablar pero yo no quiero hablar con él.Me levanté y como cada mañana hice la rutina diaria, me arreglé y luego fui a arreglar a las niñas Para mi sorpresa los mellizos estaban despiertos aunque ambos en silencio uno a un lado del otro. Esto tenía que acabar ya sé que ellos no querían estar así y no debían estar así.— Feliz cumpleaños mami — Dijo una emocionada Paula apenas me miró.— Félix cumpleaños a la mami más hermosa del mundo— Se lanzó a mis brazos..Paula se alejó de mí y corrió hasta su habitación regreso con una hoja llena de dibujos sonreí — Gracias mi amor, es el mejor regalo d
Valentina Saavedra de Miller No sabía cómo sentirme, los vería luego de mucho tiempo y eso me tenía nerviosa.Respiré profundo antes de bajar de la camioneta, el lugar estaba abarrotado a Sebastián no le gustaba venir mucho porque siempre teníamos que hacer una inmensa cola y pocas veces podríamos sentarnos. Mire para todos lados esperando ver alguna señal de ellos sin embargo no veo absolutamente nada. Caminé hasta donde había Jesús junto a mis invitadas se veían nerviosas. — ¿por que estamos aquí?— la esposa de Sebastián fue la primera en preguntar. No me miraba con miedo de hecho no podía descifrar la forma en la que me miraba. — tu esposo viene por ti— le hizo saber ella negó con la cabeza.— no me entregues a él Valentina — crees que quiero hacerlo?— le pregunté— no tengo otra opción. Realmente me daba pena porque en algún momento hubiese querido ayudarlos pero en este punto no tenía de otras ella para mí eran una completas desconocidas eran ellas o mis padres. — están l
Lisandro Miller Saqué a Valentina del auto parecía estar inconsciente, la coloqué en la camilla que habían colocado para ella.Esto no podía estar pasando Puedo ver como un doctor llegaba como comenzaba a revisarla enfermeras enfermeros estaban alrededor de ella no escuchaba absolutamente nada aunque podía ver cómo una mujer me ha hablado pero solo podía ver cómo movía la boca era como si tuviese los oídos tapados. — estábamos en la cafetería hubo un tiroteo y mi amiga salió herida— Miré a mi lado era la esposa de Sebastián quien hablaba lágrimas caían por sus mejillas lo que hacía ver sus palabras mucho más creíbles.— Señor que vamos hacer?— preguntó Jesús.Tenía la mente nublada no sabía qué hacer no sabía qué pensar no sabía absolutamente nada lo único que sabía es que Valentina se las estaban llevando con una herida muy fuerte. Podría morir.Valentina podría morir ¿Que le voy a decir a Luca y a Paula?¿Cómo voy a criar yo solo a nuestros hijos?! No puedo, no puedo solo con
Valentina Saavedra de Miller "Caminaba por lo que parecía ser un parque, rápidamente reconoció un lugar en el parque donde solía ir con mis hijos.¿Que estaba haciendo aquí?¿Dónde estaban los mellizos?Me ví a mi misma sentada en el parque, mi ropa se veía desgastada, vi cómo me sentaba debajo de un árbol y luego cómo comenzaba a llorar reconocí rápidamente aquel día. ¿Acaso yo estaba muerta?¿Por qué estaba aquí? ¿Por que me estaba mirando a mí misma? Esto no parecía tener ningún sentido No te como hombres de seguridad comenzaban a llegar, creo que había sido un detalle que había pasado por alto ese día porque estaba llorando pero los vi posicionarse alrededor del parque.Así que aquel día el parque estaba lleno de guardaespaldas.Una camioneta negra llegó no me di cuenta porque seguía llorando, vi cómo bajaban los mellizos corriendo no pude evitar sonreír se veían tan pequeños. Mis bebés...Vi como Lisandro bajaba de aquella camioneta llevaba un traje negro se veía tan imponen
Valentina Saavedra de Miller — No toques a Karen, la orden es clara Jesús, no la puedes asesinar —ya había elegido— De ella me encargo yo mismo — Aquello me sorprendió ¿El? No!!— Deja que Jesús envié a alguien por ellaLisandro se acercó a mí y tomó mi mano, lo dejé hacerlo — Déjame demostrarte que por nuestra familia soy capaz de cualquier cosa, que estoy dispuesto a proteger a mi familia y a ser un sirviente tuyo y eso es lo que necesitas — Sus palabras me sorprendieron — Por ahora solo necesito que estés conmigo y con los niños— Mire a Jesús — encárgate por favor — el asintió y salió de la habitación Juro que creí que él me daría la espalda.— Nada es más importante que tú y que los niños.— Seamos ambos los líderes, tomemos juntos las decisiones de ahora en adelante — Estás segura?No, no estaba segura Había luchado tanto por tanto tiempo para ser la líder y resultar que ahora le estaba ofreciendo a lisandro compartír el liderazgo de la organización cuando ya era todo mío.
Valentina Saavedra de Miller Mi corazón latía de forma apresurada mi padre estaba delante de mí y yo estaba delante de Luca. Lo miré para tratar de tranquilizarlo pero por más que se veía nervioso no lloraba ni decía nada más.— Vamos a estar bien — Le asegure.El no dijo nada Escuché cómo golpeaban la puerta, subí mi arma lista para disparar — señora Valentina soy yo— me tranquilicé al escuchar la voz de Jesús.— es Jesús papá estamos bien— le hice saber a mi padre haciendo que bajara su arma. Él abrió la puerta y como lo dije ahí estaba Jesús— Están bien?— Preguntó asentí — qué es lo que estaba sucediendo ahí afuera?— pregunté mientras me ayudaban a regresar a mi cama, mis pasos eran lentos y me dolía bastante el pecho, respiraba profundo intentando calmar el dolor.No es momento para esto Lucas se sentó junto a mí en silencio — señor algún incidente en una de las habitaciones, en la habitación 256 Pude ver como mi padre y Jesús se van unas miradas extrañas supongo que no
Valentina Saavedra de Miller Entré a casa escuché como todos gritaban "Bienvenida" estaban mis padres mis hijos y me sorprendió ver a Rodrigo ahí. Sabía que le estaba molesto pero quizás ya no tanto al ver que Lisandro estaba un poco más incluido en todo esto. Entendía su molestia, su familia había estado con este puesto de generación en generación y de repente llegaba yo aprovechaba la oportunidad y le quitaba el puesto a Lisandro. Mis padres fueron los primeros en acercarse para abrazarme los dejé hacerlo aunque me quejé un poco todavía me dolía algo la herida por más que intentaba hacerme la fuerte y decir que no me dolía absolutamente nada la realidad era que sí me dolía.— lo siento mucho— dijo mi padre mientras ambos se separaban de mí — No pasa nada es que aún no estoy adaptando un poco a recibir abrazos con mi cicatriz— les dije mientras me alejaba de ellos y caminaba directamente hacia mis hijos estos corrieron hacia mí pero me abrazaron con mucho cuidado. — bienvenida