Hale me llevó a casa esa noche. Una vez que estuvimos seguros de que Matt estaba a salvo, sugirió que probablemente estaría más cómoda de vuelta en el apartamento, y yo estuve de acuerdo. Era abrumador estar en la casa con toda la actividad de su círculo íntimo. Había ayudado a limpiar y desinfectar
Pero si me iba, probablemente arruinaría su vida. Por lo que empezaba a entender, ser rechazado por tu pareja era algo a lo que se podía sobrevivir, pero toda una vida de atroz dolor emocional. ¿Lo estaría condenando al sufrimiento? Yo también tendría que vivir con eso, y me parecía insoportable.Er
Mi despertador sonó antes de lo que yo quería. Si nos ponemos técnicos, sonó exactamente cuando yo lo había programado, pero quería dormir hasta tarde. Sin embargo, no podía posponerla y arriesgarme a que volviera a sonar y despertara a Hale, así que salí de la cama y me metí en la ducha.Subí la te
Miré en el frigorífico y encontré dieciocho huevos en una caja de cartón. Empecé a cascarlos en un cuenco, añadiendo leche, queso y todas las especias que me parecieron adecuadas para un revuelto.Kati emplató la fruta y empezó a recoger los donuts."Tengo que darme prisa y comer antes de que llegue
"Menos mal, temía que tuviéramos que comer algo de la comida de Hale". Declan se rió, con un brazo colgando perezosamente alrededor de los hombros de Harper."Esta mañana quería donuts, le hice parar", admití. Elegí un donut con glaseado de chocolate y virutas de arco iris. Lo puse en mi plato junto
"¿Estáis seguros? Me parece un mal momento para abandonar la manada", refunfuñó Hale por tercera vez aquella mañana. Las dos primeras veces había estado de acuerdo, pero al cabo de unos minutos empezó a dudar de su decisión e intentó buscar excusas para no ir."¿No crees que sería bueno alejarse? Te
Pero ahora estaba hambriento. Me mordisqueó el labio inferior, tirando suavemente de él. Zumbaba de excitación y yo ya gemía por su nombre. Jamás dejaría de asombrarme ante su increíble fuerza mientras me sujetaba con un brazo y su otra mano recorría mi cuerpo, provocándome y burlándose de mí.Me ll
Cuando volvimos a la cabaña, intenté descansar en el sofá con Hale. Puso una película antigua y estuve a punto de dejarme llevar por la nostalgia, pero me empezó a rugir el estómago.Sabía que el marisco siempre me revolvía el estómago. Tal vez no debería haber cogido el pescado. Tenía tan buena pin