23 de diciembre de 2020.Estados Unidos: Washington D. C.Xander AdkinsSiento mis pulmones llenarse aire y me estremezco. Aprieto mis parpados con fuerza porque pesan tanto que no los puedo abrir, suelto una pequeña queja, aunque mi garganta se siente reseca y no puedo hablar. Mi pulso se acelera y mi sangre hierve... ¿Qué carajos?Logro abrir mis ojos y en seguida los vuelvo a cerrar porque la luz hace que me ardan. Mi mente se nubla, mis sentidos se enloquecen y confunden. Mi cabeza está a nada de explotar. Nada nuevo, ya debería estar acostumbrado a esta sensación. Todo mi pecho se siente en llamas, como si tuviese una gastritis. Sinceramente, no me sorprendería con todo el alcohol que tomo.Intento abrir mis ojos una vez más, pero es en vano, comienzo a parpadear intentando abrirlos por completo. Siento una mano en mi hombro y a Elena, mi secretaria, decir palabras que mi cerebro aún no procesa del todo, me remuevo intentando apartar su toque, pero solo logro mover mis manos, apr
Al llegar a la sede principal de Adkins Industries, lo primero que hago es ir al salón de reuniones y encuentro a todos encerrados y con caras largas debido a ello. Todos me reclaman por el hecho de haberlos dejados encerrados y sin poder salir, luego siguen con los reproches por lo que cada uno supone que sucedió anoche o porque quieren saber si lo que dicen las noticias es cierto, y, finalmente, están los que preguntan sin rodeo alguno si pienso renunciar para poder seguir con mi vida de mierda porque no puedo ser de esa manera y empresario al mismo tiempo, es tan contradictorio que no concuerda.—¿Seguro que no? —pregunto, desabotonando mi saco y quitándomelo para colgarlo en el perchero detrás de mí antes de caminar directo hacia la punta de la larga mesa que se encuentra en el lugar. Mientras camino me arremango las mangas de mi camisa blanca y comienzo a hablar: —, porque hace dos años tuve los mismos problemas que tuve ahora, yo jugaba en casinos, me tatué mucho —al decir eso ú
24 de diciembre de 2020.Estados Unidos: Los Ángeles, California.Sherlly HolmströmSus ojos marrones y sonrisa pícara es lo primero que me recibe al despertarme por la mañana.Erick se acerca y deja un pequeño beso en mi mejilla, antes de volver a acostarse de lado, quedando frente a mí, mientras examina mi rostro, mientras me mira como si fuese su todo. Su mitad, su vida, lo más importante que tiene. Por algo me ha pedido matrimonio ¿No?Aún no lo puedo creer.Me casaré y lo haré con una persona que corresponde mis sentimientos. Alguien que está en el mismo mundo que yo, que sabe lo que es durar meses por fuera debido a nuestro trabajo, que entiende el peligro que corremos y es por eso que cada vez que volvemos a vernos disfrutamos del uno al otro como si no hubiese un mañana.—¿Quieres que haga el desayuno o que te desayune a ti? —propone y yo me hago la que se lo piensa.—Pero devórame con ganas —le exijo.—¿Acaso te lo he hecho lento alguna vez? —enarca una ceja.—Buen punto, sab
—No me grites, niña —ordena, como siempre lo hace —. Prefiero morir haciendo lo que más me gusta y antes de lo pautado a quedarme sentada todos los días de mi vida en una silla mirando al horizonte sin hacer nada productivo.—Nos dejarás solas.—Se tienen la una a la otra.—Eso no es así —refuto —. Somos nosotras tres, siempre hemos sido las tres.—No, Sherlly, comenzó un conteo y ya no hay vuelta atrás, falta poco para que la bomba explote y se decida lo que se tenga que decidir.—¿De qué hablas? ¿Por qué nunca eres completamente honesta con nosotras? ¿Por qué siempre nos dices las cosas a medias?—Porque no puedo —es todo lo que dice y me decepciona. Cada vez me decepciona más.—Seyra tiene razón, hay algo grande detrás de nosotras, se ha detenido, no ha querido escarbar en nuestro pasado porque no sabe por dónde comenzar y porque te tenemos el suficiente respeto como para no dudar de tu palabra —o al menos, yo sí lo hago, porque la verdad es que a mi hermana le importa muy poco.—A
24 de diciembre de 2020.Estados Unidos: Washington D. C.Xander AdkinsTomo la baranda con fuerza y la aprieto con los puños sujetándome de ella, hago un gran esfuerzo por inclinarme hacia arriba y subir, la parte superior de mi cuerpo queda por sobre la baranda y contraigo mi abdomen mientras cuento hasta cinco, para luego bajar y volver a repetir la acción una vez más.Llevo así más de cuarenta minutos, haciendo diferentes ejercicios tal y como lo hago todos los días, es por ello que me mantengo en buena forma a pesar de toda la mierda dañina que le meto a mi cuerpo. Mis ojos azules me devuelven la mirada a través del gran espejo que se encuentra en mi cuarto de entrenamiento y un recuerdo se desbloquea.Yo estirando mi mano y pidiéndole que no me dejara allí solo...Mi niñez son de las pocas cosas que aún conservo en mi mente, hay otras que he bloqueado, pero nunca olvidaré a esa persona que estuvo y sigue estando para mí. Esa que desde que todo pasó juró prometerme, esa que desde
Cuando las empresas casi se van a la quiebra yo lo comprendí, entendí todo lo que debía hacer para sacarlas adelante. Emily, mi mejor amiga de toda la vida y amor de ese momento, pensaba que era un simple vicio de alcoholismo y ludópata compulsivo, pero no era así. Ella en realidad no vio lo peor de mí. Ahora, al igual que en ese momento hace tres años, yo bebía y jugaba, pero no como antes, me controlaba un poco más. Saqué la empresa adelante estando en la mierda y el orgullo fue tanto que me metí de lleno en las tareas de informática, electrónica, cuentas y nuevas creaciones. Comencé a crear cosas que dejó a muchos impresionados, cosas por las que hemos ganado billones en estos dos años que he estado en la vicepresidencia y que ninguna otra empresa de la competencia ha podido lograr. Visitaba a mi psicólogo una vez a la semana y hablábamos de cosas triviales. En un momento él me preguntó por mis vicios, ni siquiera me hizo incomodar el tema como siempre sucedía. Me di cuenta de qu
24 de diciembre de 2020.Condado de Shkodër, noroeste de Albania.Mansión Principal a las orillas del lago Shkodra situado en la frontera entre Montenegro y Albania.Ecain AkersonLes diré algo muy importante que deben grabarse a partir de ahora para poder comprender esta historia: el tener la mente abierta y aprender a interpretar lo que se lee es una gran ventaja. En el mundo existen muchos tipos de personas, pero, al final del día, la mayoría de ellas no es lo que dice ser, en realidad son muy diferentes a como siempre se han mostrado y te engañan sin piedad alguna. Hay toda una historia detrás de la historia, solo debes preguntarte si eres lo suficientemente capaz de soportar el desenlace. Aconsejo esto porque ya lo viví. Dichosas las personas a quienes nadie les planea su destino y toma las decisiones y las riendas de su vida, dichosas aquellas personas a las que le planean el futuro y están de acuerdo porque le gustan los planes, pero, ¿qué hay de aquellas que son obligadas a
—Y que quede claro que si le hago esto a alguien que tan solo intentó sabotear una entrega ¿Qué no le haría a alguien que realmente llegue a traicionarme? —me volteo y palmeo su espalda —. Cuando se muera, limpien todo —miro mi traje de color blanco manchado de sangre ajena y suspiro. No tienen vergüenza alguna de ensuciarme con ese líquido asqueroso perteneciente a otro. Si tan solo pudiera revivirlos los mataría aún peor por el solo hecho de vengar mis preciados y costosos trajes —. Tendré que cambiarme, una cita me espera en un par de horas —murmuro viendo mi reloj de muñeca.Salgo del cuarto de tortura el cual está casi en el infierno, a quinientos metros por debajo de la mansión principal de la Mafia Albanesa, y traspaso un par de pasadizos secretos, subiendo unas escaleras que parecen inacabables antes de llegar a la puerta que aparece en mi despacho y que cuando la abro para entrar en mi pequeño lugar de confort se cierra siendo uno de los estantes de madera de la biblioteca. E