Al llegar a mi departamento, encontré a mi hija dormida en el sofá junto a la niñera que Verónica había contratado “ni siquiera sé de donde la sacó”. Llevé a mi hija a la habitación continua, cuando Sali a la sala verónica ya había despachado a la niñera—Asi que ahora tu nueva aventura es una mocosa universitaria —la ignoro porque no tengo nada que hablar con ella sobre mi vida personal —¿Acaso no te das cuenta que podrías ser su padre?—No lo soy. —espeté molesto —Asi que deja meterte en mi vida.—Ya te dije que no te daré el divorcio. Y mucho menos ahora que sé que esa mocosa…. —la observo de reojo para que cuide lo que está por decir —Cometí un error y solo por eso me quieres cambiar por una… niña. Mírame, yo soy una mujer y ella apenas si puede con su vida ordinaria.—No olvides que alguna vez tú también fuiste menos que ella, si no fuera por mi, ahora estarías trabajando en un burdel. —me levanto de mi lugar y me quito la camisa manga larga blanca —Pero a diferencia de ella, tu,
La sangre se me subió a la cabeza al verlos juntos, la rabia me estaba consumiendo al ver que Lucas había regresado con ella.—¡¡Maldita sea!!..No podía con mi coraje, ni siquiera mis entrenamientos me ayudaban a quitarme esa escena de mi cabeza, lo vi todo, desde el principio cuando ella salió de los edificios. Lucas organizó una sorpresa para ella, sabia que ella tenia sentimientos por mi hijo, pero jamás pensé que fueran tan fuertes como los que decía tener por miLa rabia me carcome por dentro y lo peor es que no podía sacarla de mi cuerpo ya que me enferma la mente el saber que había regresado con lucas. “enserio que me sigue sorprendiendo lo mucho que cambio mi hijo”—¿Papi?... ¿estas enfadado?Al ver a mi hija me trago mi coraje y sonrío al verla, me coloco en una rodilla frente a ella, observo el oso que nunca suelta, desde que se lo obsequié en aquellos juegos, duerme con él, beso su frente ya que es la única que sé que jamás me daría la espalda, es mi princesa hermosa.—Solo
—¿Estas bien?—Si. —ladeo una sonrisa. Siento que mi celular comenzó a vibrar, al ver de quien era la llamada mi sonrisa desaparece y la herida se me abre tan grandemente que siento que mi corazón está muriendo —Lo estoy.De alguna forma, logré conseguir este empleo de medio tiempo y conseguir que mi jefe en industrias Clark me dejara salir mas temprano, claro, si tiene algún pendiente, debo hacerlo desde mi habitación, mi hogar, es el acuerdo que me dio y yo aceptéJamás pensé que me lo encontraría en este lugar y mucho menos que sabría en realidad lo que él realmente pensaba o sentía, escuchar sus palabras fue como peor que el impacto de una bala y no lo digo literal ya que de niña sufrí un accidente y una bala me atravesó la pierna, fue doloroso… pero creo que ahora prefiero ese dolor que el filo de sus palabras.De alguna forma me volví a involucrar con Lucas ya que después de que habláramos, mi padre me llamó y me dijo que estaba invitado a una cena familiar, es como si el destino
Mi corazón se encontraba en mi garganta, estaba apunto de salirse por mi boca cuando siento su aliento chocar contra mi respiración, el valor se me estaba escapando y no debo permitir que siempre se salga con la suya.—¿Qué pasa?¿ te comió la lengua el ratón?—Púdrete. —escupí cabreada. —Será mejor que dejes de meterte en mi vida. tú mismo lo dijiste, lo que pasó entre nosotros… fue una simple aventura. Tu lo disfrutaste y yo también. Pero eso es cosa del pasado así que deja de interferir.—Cuando se trata de mi hijo y su seguridad, siempre voy a interferir.Me burlo ya que hasta ahora veo que se preocupa por él. Lucas entra preguntando para saber si todo estaba en orden pero al ver que nada estaba bien me pidió que saliéramos de la oficina.—¿A quien crees que engañas?. Si tanto te preocupara el bienestar de tu hijo, no me seguirías buscando después de esa m*****a noche. Haces esto solo porque no querías que me quedara a solas con el —me rio amargamente —No querías que tuviéramos sexo
—Si. —dijo papa. Víctor nos guía hasta el comedor, a lenta sus pasos y de pronto sentí el roce de su mano con la mía haciendo que mi atención estuviera sobre él. Me sonríe descaradamente y por supuesto que mi piel se quemó al instante —¿Maya?Me senté al lado de papá y en poco tiempo el almuerzo fue servido, mi padre se veía demasiado serio observando a la familia de Lucas.—Espero les guste los mariscos….—No. —dijo papá interrumpiendo a la madre de Lucas —Odiamos los mariscos.—Claro. Supongo que en su rancho no están mas que acostumbrados a comer huevos…. Lo común y no saben lo bueno que son los mariscos.“¡Ayy mierda!”Mi padre observa al padrastro de lucas que como siempre no sabe medirse la lengua al hablar, idiota.—El que mi familia tenga gustos diferentes a la de su familia no significa que sepamos lo que es bueno. Y ese rancho.. al que llama como si fuera un basurero es el que les produce el trigo para que su familia pueda degustar del pan.—Papá… basta.—Señor… mi esposo no
—¡Mey!...Aun seguía esperando una respuesta de su parte, pero solo mira hacia la nada sin borra esa sonrisa tan exquisitamente perfecta, temo que sus palabras sean vacías así que me encamine hacia los llamados de mi madre—¿Y tú estarías dispuesta a abandonar todo por mi? —detengo mi andanza y volteo a verlo —Vamos, dímelo.—Sabes que no necesitas preguntármelo porque ya sabes la respuesta.Él inclina su cabeza hacia atrás mientras su sonrisa crece, camina hasta a mi y me mira como si fuera el cielo mismo, algo que nunca antes vi en alguien, “o solamente solo sabe fingir perfectamente.—Sabes que si queremos eso, debes abandonar a mi hijo, terminar con esa relación que no tiene sentido ya que ni siquiera tu padre lo acepta. —cuando menciona a Lucas, un peso enorme cae sobre mis hombros de la nada —Si. Me lo temía, —observa hacia al frente y frunce el ceño —Te daré el tiempo suficiente para que lo pienses.Mis labios no pudieron moverse y darle una respuesta inmediata ya que la culpa
Los recuerdos me atormentan, “mas de lo que imaginé”, no he vuelto a saber nada de los Santoro, “irónico que siga pensando en que me buscaría” es muy estúpido pensar que por un momento me hice la idea de que, yo era importante para élLucas… el ni siquiera tuvo el valor de volver a buscarme, “ladeo una sonrisa” incluso ahora es él quien me evade todo el tiempo ya que tenemos una que otra clases juntos, pero supongo que es algo mejor para mi ya que no quiero tener ninguna relación con ninguno de ellos—Necesito que me traigas los contratos de los nuevos clientes. —estaba tan sumergida en mis pensamientos que no me di cuenta que mi jefe me estaba observando —¿Mey?...—¿Ah? —al verlo cruzado de brazos me avergoncé —Lo siento yo…. Si enseguida se los llevo señor Clark.Me mira curiosamente, pero deja de hacerlo cuando su teléfono comenzó a sonar. Tomó la llamada y entró a su oficina. Suspiro aliviada ya que por si fuera poco, últimamente el también ha estado diferente, mandón y muy molest
Me reincorporo sobre mi lugar e intento irme y así estar lo mas lejos de él que pueda pero inclino mi cabeza hacia atrás cuando siento su agarre en mi brazo.—Necesito hablar contigo.—Señor Santoro, ¿Acaso desea una cita con el señor Clark? Si es así lamento decirle que su agenda está llena los próximos meses.—Sabes muy bien de lo que quiero hablar.—Lo siento pero no se de lo que esta hablando, ahora si me permite debo irme ya que mi jefe esta esperándome. —siento el agarre sobre mi brazo se intensifica —Puede soltarme.—No.El toma de la muñeca llevándome a la fuerza le grité que me soltara pero no lo hizo, no sé en que demonios está pensando al hacer esto frente a sus empleados ya que habían varios observándonos con demasiada atención, incluso Erika que no nos quitó los ojos de encima hasta que Victo cerró la puerta con seguro.—¿¡Pero que demonios sucede contigo?!—Vamos a hablar quieras o no.—Yo no tengo nada de que hablar contigo así que déjame en paz. —al dar varios pasos el