Permiso Para Amarte
Permiso Para Amarte
Por: MONICAGHC
EL ASCENSO

LEAH.-

Desde las 4:30 a.m. estaba despierta metida en el closet tratando de escoger mi atuendo para este día tan especial, al recibir la noticia la tarde del día anterior la emoción se apodero de todo mi ser como hacía mucho tiempo no lo hacía, inmediatamente marqué el número telefónico de mi ángel, mi mejor amiga para que me acompañara al centro comercial a renovar mi guardarropa.

- ¡Mía lo he conseguido! -Le grité euforica por la emoción-

- ¡Excelente amiga! nunca dude en que lo harías ¡felicitaciones, esto hay que celebrarlo!

- ¡Síiii! estoy tan feliz, todo mi esfuerzo por fin se ha visto recompensado, por fin siento que algo en mi vida comienza a salirme bien...bueno te llamaba para que me acompañes al centro comercial a ir de compras, necesito un guardarropa nuevo acorde a mi nombramiento como Gerente General de Negocios Internacionales

- ¡Wow! suena importante, de acuerdo nos vemos en el centro comercial a las 4:30 p.m. y luego a celebrar

- ¡Eh bueno! tal vez podríamos dejar la celebración para el fin de semana, es mi primer día no quiero llegar con resaca, ademas mañana es mi primer encuentro con el presidente de la empresa, ¿nos vemos a las 4:30 entonces?

- Sí me parece perfecto y oye al menos un drink vamos a tomarnos y no acepto un no por respuesta Leah y amiga este es uno de los tanto logros que conseguirás de eso estoy segura porque te lo mereces 

- Gracias mi ángel, tu apoyo para mi ha sido... -Hago un momento de silencio ya que mis ojos comienzan a llenarse de lagrimas y en mi garganta se hace un nudo- muy importante si ti yo no sé donde estaría ahora tal vez muerta 

- No digas eso, tú decidiste superar todo lo malo que te paso sé que nunca te recuperaras de la perdida de Ethan pero te llenaste de fuerza  y te levantaste aún con el corazon sangrando, así que amiga mia esto merece una celebración y Leah te quiero 

- Y yo a ti, nos vemos más tarde -Cuelgo la llamada y apoyo mi cabeza en el espaldar de mi silla, abro la gaveta de mi escritorio y saco mi bolsa buscando mi monedero y lo abro mis lagrimas comienzan a salir la foto de mi Ethan, mi niño hermoso paso los dedos sobre la foto- 

- No tienes idea de cuanto te extraño y las ganas que tengo de abrazarte, daría todo lo que tengo por volver a tenerte en mis brazos hijo mio, puedo volver a comenzar, tener una nueva vida pero yo nunca voy a olvidarte y nunca podré recuperarme por haberte perdido suspiro y observo mi pequeña oficina y comienzo a recordar cuando llegué a este lugar

FLASHBACK.-

-HACE TRES AÑOS-

Ingresé a Industrias Dubois como pasante de comercio internacional, al llegar me sentí un poco subestimada tenía treinta y dos años apenas me había recibido de mi licenciatura me veian algo vieja y poco capaz, me ofrecieron el puesto de recepcionista de la empresa lo acepte de mala gana sabia que estaba perfectamente preparada para trabajar en otro departamento y para ese tiempo ya hablaba dos idiomas (francés e Ingles).

Poco a poco me abrí paso dentro de la empresa mientras seguía preparándome para seguir escalando, mi ambición de superación era muy grande, esa ambición dio frutos los altos directivos se dieron cuenta de mis esfuerzos me propusieron rotar cada 6 meses por los departamentos para aprender todo el manejo de la empresa y así lo hice estuve en el departamento de finanzas, administración, gestión organizacional, gerencia y legal y finalmente llegue a trabajar en el departamento que yo quería el de Gerencia de Negocios Internacionales.

Cumplí seis meses bajo la tutela del señor Moore alguien con mucha experiencia pero con un gran defecto es un viejo verde al que le gusta conquistar jovencitas por suerte yo estaba fuera de su radar aunque a veces soltaba comentarios algo insinuantes pero siempre mostraba mi cara de pocos amigos y él desistía, debo reconocer que me ayudo mucho a prepararme más y conseguí mi primer ascenso como asistente del supervisor pude llegar hasta el Gerente del Departamento el señor Thomás.

El señor Thomás Dubois ha sido mi aliado, mi maestro y hasta mi confidente en la empresa es él unico que sabe de mi tragedia al perder a Ethan y desde entonces me ha tratado como a una hija, siempre me hizo recordar a mi padre con un corazon tan noble a pesar de ser uno de los millonarios junto con su familia mas importantes del país nunca fue arrogante me trato con mucho cariño y confianza tanto como para cederme un puesto que nunca había sido ocupado por nadie que no fuera de la familia y aquí estoy preparada para un nueva etapa en mi vida...

FIN DEL FLASHBACK.-

Centro Comercial

- Amiga por fin llegas, ¡FELICIDADES! -Abre sus brazos con una gran sonrisa y me envuelve con ellos-  me adelante y estuve viendo tiendas escogí algunas con unos vestidos encantadores para la oficina y muy sensuales debes mostrar ese cuerpo ahora que trabajaras con Arthur Dubois - me guiña un ojo-

- ¡Gracias, gracias! y disculpa por llegar tarde estaba afinando unos detalles y olvida lo de Arthur no voy a ir a conquistarlo solo voy a trabajar con él, sabes que no tengo ningún interés en hombres, he trabajado mucho como para estropearlo con relaciones sentimentales y menos con el presidente de la empresa Y el hijo del dueño., además no me siento lista para dejar entrar el amos nuevamente a mi vida.

- Bueno, bueno pero quiero que comprendas que mereces ser feliz y pues... al menos te echaras un taco de ojo todos los días, él no es muy de medios siempre está oculto pero hasta donde recuerdo es un hombre sumamente guapo ¿Cómo es que nunca te lo has topado?

- Pues no es muy raro verlo caminando por las oficinas, se la pasa metido en la suya, cuando sale es para solucionar algún inconveniente o para despedir a alguien, aunque te confieso que mi jefe me metió un poco de miedo, me dijo que era muy estricto y duro, pero bueno sé todo sobre esa compañía así que me concentrare en hacer mi trabajo.

- ¡Así se habla amiga! bueno vamos de comprar, me hace falta gastar un poco de dinero que he ganado con el sudor de mi frente.

- Jajajaja ¡vamos!

Después de haber recorrido varias tiendas y gastado algo de dinero, más de lo que había pensado Mía y yo fuimos a cenar Sushi y a conversar un rato, luego de comer partimos a casa.

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