La ventana mostraba la lluvia invadir las hermosas y pintorescas calles de Amalfi, en lo que Violeth se preguntaba cuando había llegado a ese punto, en el que debía está completamente oculta de todo lo que la rodeara, aunque el señor Luka Russo había indicado que no había ningún tipo de problema en que ella caminase por toda la mansión, ella aún se sentía completamente incomoda al estar en un lugar como aquel y estar completamente escondida de la mira de Bastian y Athan quien al parecer aun la buscaban según lo que había informado la señora Ainara Katalakis, todo era tan desastroso en la cabeza de Violeth, quien dio una leve caricia a su vientre ya notoriamente abultado y rogó porque su bebe resistiera todo lo que estaba por venir
aun recordaba lo que había hecho hacia solo unos días a escondida de su madre, mientras que el señor Russo le había indicad
"la playa de Hawái no se comparan en nada con las de Grecia, pero me encantaría que estuvieses aquí extraño nuestros juegos... te amo locamente no lo olvides grandote... con amor tu primo favorito"Bastian hizo un gesto despectivo hacia el mensaje que había enviado Athan en lo dio un gran suspiro cargado de miles de sentimientos, además de que su cansancio lo estaba deteriorando grandemente, no podía dormir, no comía adecuadamente, además de aquel sentimiento de agonía que solía acompañarlo día y noche, por lo que era todo tan cansado, tan extremo en sus ser que no soportaba el hecho de sentirse solo como un vez lo había estado ya en aquello años--señor... --Bastian levanto su mirada cansina y ojerosa hacia Morun, quien lo observo de manera maternal y le ofreció un medio sonrisa llena de tristeza—el señor Luther se venido su encuent
La cocina de la villa de Bastian Katalakis, parecía estar a punto de lograr explotar, los trastes y los miles de fogones no hacían más que dar un ruino ensordecedor, todo parecía un completo caos, no había nada que preocupara más a Morun al escuchar tal ruido que las alarmas de humo dieran inicio al sistema de apago de incendio, algo que ocurrió en lo que menos ella espero, pues una gran ráfaga de aire de extintor inicio en parte de la cocina y la sala de estar las cuales de alguna extraña manera estaban conectadas, algo que maldijo la mujer, pues no es pero que llegase a ocurrir nada parecido, no había duda que Bastian no era apto para la cocina, algo que hizo que la mujer se adentrar allí llena de enojo, mientras Bastian observaba aquel libro de recetas antiguo como si de un libro de química o matemáticas se tratara, algo que el seguramente podría arreglar sin ningún tipo de pr
--dale otro-----un golpe más se escuchó en la habitación en la que se encontraba un hermoso hombre de cabello negro y ojos verdes completamente enojado, en lo que sin previo aviso le habían dado otro golpe en su mejilla, haciendo que se encontrara terriblemente enojado, pues no imagino que de verdad lo llegasen a descubrir--carajo… ¿sabes quién soy? ¿Quién te crees en arruinar mi rostro? Soy un Katalakis, tengo el apellido del conde de Grecia, soy su primo y tú…--creía que eras el hijo bastardo de Alex Katalakis… --el rostro de Athan se había tornado pálido mientras observaba como un hombre con toda la elegancia del mundo se acerba en medio de la oscuridad como si de una sombra de la muerte se tratara, algo que logro hacer que este se tornara pálido y completamente temeroso por no saber cuál sería su futuro a partir de ese momento--se&
Cada escalón que podía bajar Violeth la acosaba miles de pensamientos, miles de ideas en la que no podía creer que Athan fuese aquel que no le importó para nada lo que dijesen los demás o incluso el enojo del señor Russo, quien ella sabía muy poco pero cada que hablaba, demostraba tal propiedad que ella estaba segura que no era alguien con quien se pudiese jugar, la verdad era que algo lleno de cariño hacia aquel la había atravesado, pues el hecho de que él no le importa nada con tal de verla la hacía sentir de alguna forma extraña y macabra querida, no podía creer que a pesar de todo el quisiese arriesgarse en ir a su encuentro, aquello había logrado conmoverla grandemente, pero tampoco hacia que sus pensamientos sobre aquel par de primos cambiara en ella, pues aun los consideraba manipuladores e incluso unos mentirosos sin ningún tipo de consideración por los demá
--vamos Violeth… solo debes pujar, no debes detenerte ya pronto saldrán…--la voz de Choe llena de miedo y ánimos se escuchó en el lugar en el que Violeth no sabía cómo reaccionar ante aquel dolor, su cuerpo dolía, su ansiedad la carcomía, no entendía cómo era posible que tanto sentimientos llegasen a albergarla, desde temor, felicidad e incluso desespero, todo era una mescolanza de sentimos que no lograban ser dados con claridad en su interiorPero entonces escucho un llanto, uno que la dejó completamente sorprendida, además de que nunca llego a sentirse agotada, todo lo contrario, pues cuando menos lo espero de nuevo habían llegado aquellas inmensa presión en su vientre bajo con sus deseos de pujar, algo que hizo de inmediato logrando que su segundo bebé saliera de su interior, todo era maravilloso ella al fin había dado a luz a sus hijos, al fin los c
la mirada incrédula de parte de Luka se mostraba fijamente hacia Violeth quien simplemente levanto sus hombros en forma desinteresada, mientras le alejo la mirada de su padre y la postro en su madre quien tapaba su boca con la mano y aprecia estar completamente aterrada por el hecho de Violeth se hubiese enterado sola--vio… yo… y puedo explicarlo…--Choe salió de inmediato hacia Violeth, quien le dio una mirada llena de expectación a su madre, mientras sus pequeños hijos parecían estar completamente tranquilos, algo que ella agradecía, pues ella deseaba saber que era lo que en realidad había ocurrido para que llegasen a ese puto de ella haber creído toda su vida que aquel hombre era su padre, cuando tenía uno tan maravilloso como Luka Russo--me encantaría saberlo madre, pero tengo una gran duda hacia Luka ¿n te molesta que te llame de esa manera cierto?—
El silencio invada cada espacio que una vez fue solo hechos de rosa y aleras, ahora ya no se demostraba la felicidad en cada esquina, no era más que la muestra que en aquel lugar haber estado ella, no era más que el cementerios de recuerdos en el que el principal protagonista se trataba de una hermosa chica de ojos azules como zafios y una cabello castaño que hacía que fuese le deleite para el tacto de aquel que consideraba cada recuerdo como si fuese el más preciadoAllí estaba Bastian conservando y martirizándose con sus recuerdos con el amor que tenía hacia ella, mostrándose cada vez más desolado y agobiad por el hecho de que ella no estuviese para él, con el hecho de que ella lo había abandonado, con el hecho de que aunque n tentara hacer todo lo posible por conservar su recuerdo como algo impecable y unió nadie le aseguraba que aquella carta que el bien sabía que era falsa d
--¿estudiar? No lo sé cariño ¿está segura? No quiero que pienses que yo creo que no eres capaz solo que me preocupa, solo hace unas semanas tuviste a los bebés y no quiero que pienses que yo deseo presionarte…--Luka Russo hablaba mientras sostenía a su pequeño nieto en brazos, en lo que Choe sostenía a Artemis en brazos, en lo que Violeth aun en cama debido a que su padre no le permitía levantarse de la cama lo observo con una sonrisa divertida en sus labios--te agradezco la preocupación, pero la verdad es que quisiera poder ser de ayuda quisiera poder como mínimo ser una digna Russo, ya que quien se notaba tan agotada a pesar de tener todos los cuidados del mundo--no quiero que pienses que te voy a obligar a nada, yo acepto tu amor al arte y también el hecho que tal vez no te gusten mis negocios, eres una Russo y eso no cambia por el hecho de que no te dediques a