__Que esperas para hablar de una vez por todas, así dejo de ver tu cara, no soporto respirar el mismo aire que una persona como tú __se quejo la mujer.

Roberto pidió una taza de café, con total tranquilidad, Nicolle ni siquiera se imaginaba lo que pasaba por la cabeza de ese hombre.

__Por qué tienes prisa por llegar a ese punto, quiero reclamar la custodia de mi hija, siento que no la estas cuidando adecuadamente, le mientes sobre su verdadero padre, no crees que eso es algo horrible, yo todavía estoy vivo, no crees que haces mal.

__Es mi hija, yo sabré que hacer con ella, yo sabré como educarla, además Aidan es un buen padre, no le veo el problema __respondió con sarcasmo.

Roberto le dio una mirada filosa a la mujer, al parecer ella no lo tomaba enserio.

__Bueno, al parecer se te olvidado quien soy, pero voy a recordártelo, tus palabras poco me importan, si estuve presente o ausente es mi problema a fin de cuentas, sabes que tengo el poder de alejarte de mi hija y que nunca vuelas a