Que comience el juego

Camille, después de uno de los típicos desplantes que le había hecho Andy estaba completamente decidida a aceptar la oferta laboral que le habían hecho en la compañía Parker, aunque él la hubiera despreciado, ella sentía que me debía lealtad. Y no iba a permitir que Mario se saliera con la suya, aunque sabía que Andy no merecía tal sacrificio. Se estaba portando con ella como si fuera la peor de las personas.

Mario sale a su encuentro, ella está lista, ni siquiera hubo una entrevista de trabajo formal, basto una sola llamada desde Parker, para qué ella fuera contratada automáticamente.

Ella estaba preciosa, se pone un hermoso sastre color perla, con un top blanco debajo, su cabello está perfectamente arreglado, y todo está complementado con un suave maquillaje, unos tacones altos oscuros y un bolso del mismo color de estos.

Ella se sube al auto de Mario quien la está esperando, él no le quita los ojos de encima.

-Estas preciosa muñeca, serás la jefe más hermosa