ARTUR
Nueve am, bajo de mí moto Harley tuneada a mí gusto, es como mí bebé la llevo a dónde voy. Me quitó los lentes de sol, luego el casco y sacudo mí chaqueta negra de cuero de la tierra que hay en este pueblo. Me encamino a la mansión blanca frente a mí y cuando estoy en la puerta presiono el intercomunicador. Mientras inspeccionó a los alrededores, como siempre lo hago en todos los lados a dónde voy. Lo primero que noto, es que es blanco fácil de cualquier ataque o atentado, está bien que sea un pueblo tranquilo que nunca sucedan cosas, pero no sé puede ser tan confiado, de no tener cercas alrededor de la casa o vallas electrificadas «yo no confío ni en mí propia sombra».
Por el intercomunicador una voz de mujer pregunta
–Si ¿quien es?.
Miro la cámara de última tecnología, arriba de mí cabeza que es pequeña y está camuflada. Aunque una persona normal no lo notaría, yo lo detecte al instante. Me acerco al intercomunicador y respondo.
–Buenos días, soy Artur donatelo, el nuevo guardaespaldas de los moreti.
La voz vuelve a decir.
–Aguarde un segundo «seguramente están escaneandome por la cámara, para comprobar la foto de mí hoja de vida, con mí apariencia actual» a los minutos la puerta principal se abre y una señora mayor y bajita, vestida de mucama, me recibe
–buenos días, pase por favor y sigame. Sigo sus pasos hasta llegar a una puerta doble de roble maciso, que ella abre y nos adentramos en una especie de oficina con un librero y un escritorio por delante con una silla giratoria de la cual se levanta. Tomas moreti. Aunque no pudimos conocernos personalmente antes, el tenía mí currículum, pero, yo también lo había investigado, soy muy meticuloso con mí trabajo. El extiende su mano exclamando.
–¡muchacho es un gusto conocerte al fin, me hablaron maravillas de ti!
Le correspondo el saludo, serio con un apretón de manos y digo
–un gusto, señor moreti.
El hombre sonríe y demanda–Oh, pero deja las formalidades y llámame, tomas.
Me señala la silla vacía frente a el y solicita
–toma asiento.
Se sienta y lo imito–justo estaba terminando de repasar tu contrato y todo está en orden, tal cual acordamos con mí abogado...pero... antes, de que firmes, quiero que conozcas a mí hija y después... me dices si aceptas o no.
Sonrio levemente, claro quieren que pase la prueba de fuego, también había investigado a la niña rica y mimada. Estaba al tanto de sus artimañas para dejar sin trabajo a los pobres y débiles idiotas, antes de que yo me presentará.
Le respondo–claro, tomas–recalcando su nombre con confianza de que me voy a quedar, sin importar, los berrinches de su hija
–Sera un placer.
🔥🔥🔥🔥
Tomas sale por la puerta y a los segundos entra por esa misma, una jovencita pelinegra con una cabellera larga y brillante. Luce una minifalda roja de cuero y un top del mismo material rojo, unas botas negras, caño alto. Debo admitir que tiene un cuerpo que raja la tierra, es de tez dorada y tiene unos ojos color ámbar. Se acerca hasta donde estoy sentado y se sienta sobre mis piernas. Acto que no me sorprende al contrario la miro y enarco una ceja. Ella pone las manos sobre mis pectorales y me susurra al oido
–¿Que te parece si nos conocemos más íntimamente, antes de empezar a trabajar juntos?
Me levanto con ella, alzandola y la depósito arriba del escritorio, ella jadea sorprendida, pero sonríe cuando la siento de la cintura, pensando que a logrado su cometido y cuando acerco mí rostro a milimetros de ella. Cierra los ojos pensando que voy a besarla, pero solo le digo a su oido.
–Lo siento.. muñeca, pero eso no pasará, no mezclo placer con trabajo.
Dicho esto alcanzó el reloj digital cuadrado de adorno, que está sobre el escritorio y le hablo al aparato.
–Señor tomas, ya pude ingresar a su oficina.
A los instantes, tomas ingresa aplaudiendo sonriente, se acerca a mí e extiende su mano
–¡Bienvenido a la familia señor donatelo! Acepto su mano
–sera un placer trabajar con ustedes, señor moreti.
La malcriada se baja del escritorio, que hasta ahora observaba todo con la boca abierta, se acerca al padre pataleando y reclamandole
–¡papi! no puedo creer que nos estabas filmando todo este tiempo.
El padre se acerca a su hija, besa su frente y luego le confiesa
–Sofi, tenía que corroborar que esta vez, si podría confiar en alguien, sabes que tu seguridad es lo más importante y el señor aquí presente, se ganó su puesto con honores.
La mocosa me mira con fastidio, sin decir más nada, se marcha echa una furia, dando un fuerte portazo. «Está muy equivocada si está hermosa, pero malcriada, piensa que voy a caer en sus jueguitos, note la cámara oculta, apenas me senté frente al escritorio del señor moreti. Como siempre, estoy alerta y atento a cada cosa o detalle en donde estoy. Duermo con un ojo cerrado y otro abierto, no más de cinco horas por día. Cuando conviví con la mafia, aprendí que nunca debes dormir literal y siempre estar preparado para cada situación.
Sofía
¡Que fastidio! salgo del baño cambiada con mí ropa normal. Un short de licra y una sudadera de algodón, me coloco mis pantuflas de corazón, que uso para entre casa. Miro el conjunto rojo de cuero, esparcido sobre el suelo «me vestí hací, solo para tratar de seducir al nuevo guardaespaldas, número veinte aunque con la mayoría funcionó y con los que no, desistieron de protegerme en menos de una semana, con las humillaciones y papelones que les hacía vivir a diario. Pero este es un poco reacio, a mí parecer, me lo demostró su rostro, sin expresión cuando me senté arriba de el y esa voz gruesa, cuando me susurro al oido, me produjo... escalofríos. Me digo a mí misma ¡tranquila, Sofía, con paciencia y perseverancia lo botaras como a los demás! No me gusta que me impongan nada y menos que me controlen la vida. Quiero ir y venir a mí antojo, libremente como el aire»
SOFIA Es lunes y estoy lista para dirigirme a la facultad a estudiar. Mientras bajo la escalera, veo parado a este ser indeseable, enfundado en un traje negro y camisa blanca ¡Wow! pero así con semejante hombre, no voy a poder pasar desapercibida, como un día de lo más normal. Llego al final de la escalera y le digo –¡buenos días! mole. Hoy iré a la fácu y vendre directo a casa, así que no hace falta que me acompañes. Intento seguir caminando hacia la salida y este me detiene del brazo, para sisear entre dientes. –Mira mocosa, yo no te agrado y tu a mí tampoco. Pero, tu padre me contrato para que te proteja y eso es lo que haré, hasta que el lo disponga. No te dejare sola ni para ir al baño, antes que yo, verifique que estás a salvo. Así que tu decides si quieres llevarnos por las malas o poner de tu voluntad. Me libero de su brazo y le respondo indignada. – ¡¿mocosa?! ¿y tu cuántos años tienes cuarenta? Seguro que en comparación a ti, si, soy una niña. El gruñe–entonces.. comp
Artur Estoy haciendo una serie de ejercicios matutinos, en mí cuarto designado, solo con mis boxer puestos, ya que duermo desnudo y solo me los puse por las dudas. Soy muy caliente en todos los sentidos que la palabra lo definen. Me levanto del suelo transpirado y agitado, terminando mí tercera sección de abdominales y me acerco a la ventana de mí cuarto, para mirar sigiliosamente por detrás de la cortina ¡Ahi está otra vez! el mismo auto negro de vidrios polarizados, rondando por la mansión. Tomo el Rolex de arriba de la mesita de luz y veo que son las ocho am justo, cada cuatro horas, como acostumbra hacer, hace una semana. También descubrí que alguien fotografía furtivamente a la mocosa. Estoy juntando las piezas del rompecabezas para descubrir, quién acecha a los moreti. Cuando tomas moreti, regrese de su viaje hablaré seriamente con el, por que no me dijo que estaba en la bancarrota, su cuenta bancaria está vacía, aunque ya me pagó un adelanto por mí trabajo aun no termino de pa
SOFIA Estacionamos mí vehículo a metros de una casa enorme de dos pisos. Bajamos con la mole encaminandonos a la fiesta y al entrar la música ensordecedora hace vibrar toda la casa. Veo a mí derecha donde hay unos sillones con personas acostadas besandose, manosendose, tríos, orgías por doquier ¡Que asco! Al frente mío hay una escalera y al costado izquierdo una especie de pista improvisada, con luces parpadeando, fluorescentes que cambian las tonalidades, al ritmo del atractivo DJ que muestra en una pantalla mediana las letras de las canciones sonando. El lugar está albarrotado de gente, entre la multitud visualizo a Jack, sentado En un sillón individual, con una morena arriba de sus piernas, cerca de una barra donde una sexi rubia en corpiño con pechos de silicona, prepara bebidas a la orden. Me acerco a mí amigo que le está haciendo un examen bucal a la morena mientras la toquetea. Carraspeo dos veces en sus orejas, pero no me prestan atención, entonces gritó –¡jack! El se desp
Artur Estoy dándome una ducha caliente en el baño de mí habitacion personal, luego de dejar a la mocosa dormida en su cuarto a pesar de sus berrinches y protestas por querer seguir en la fiesta, la cargue a las rastras y la traje dejando a mí paso dos narices rotas, tres caras destrozadas y otro inconsciente. Todo consecuencia del exceso de alcohol de la malcriada, situación que esté imbécil DJ quiso aprovechar sin saber que yo estaba acechando cada uno de sus pasos, cuando la condujo a un baño y trato de propasarse con ella, sin dudarlo lo puse a dormir de un golpe. Sus amiguitos que me esperaban a la salida, quisieron patotearme sin esperarse el estado en que los deje, luchando con los cinco a la vez. Por último cargue a la mocosa en mí hombro, mientras ella pataleaba y gritaba "bruto, bestia, animal que has hecho" y cuando llegamos a su mansión la volví a cargar, para tirarla sin ceremonias en la cama de su cuarto encerrandola, así dormía hasta mañana. Ahora estoy dejando el agua c
Artur La observo dormir en el sillón de la sala principal con su rostro angelical y su semblante relajado denotando paz. Ver a esa escoria morir delante de sus ojos le causo un Shock emocional, aunque esa sanguijuela lo merecía, me hubiera fascinado poder contener mí jodido temperamento, capturarlo, para torturarlo lenta y dolorosamente hasta que confiese, para quien trabajaba, como era mí plan original. Pero, al ver poner sus asquerosas manos sobre la mocosa inocente, me hizo hervir de rabia, termine de explotar, sulfurado, incapaz de controlar mí visión roja con sed de sangre al ver cómo la abofeteo, en menos de dos segundos llegue a ellos y le vole los cesos sin pestañear, inclusive, olvidé de ponerle el silenciador. Igualmente llame a ignacio para que dejara todo limpio sin rastros, como es mí costumbre, el es mí mano derecha y confidente desde niños aunque sea mí subordinado, siempre lo trate como el hermano que nunca tuve, el cubrió mí espalda y yo salve su culo incontables vec
ARTUR Estoy embelesado ante tanta belleza, la mocosa me sonríe traviesa y se acerca a mí intuyendo como me tiene, debido a que cuando avanza detalla mí gran bulto. Cuando está delante de mí, pasa sus delicadas manos por mis pectorales, descendiendo por mí estómago y se detiene en el inicio del elástico de mi boxer para delinear con su dedo, mí verga por arriba de la tela, produciendo con su estímulo que se yerga, aumentando más su tamaño, suspiro alto atrapando sus manos, cuando intenta meter sus dedos por adentro de la tela. La aprisiono contra mí cuerpo levantandola del trasero, para que su boca quede pegada a la mia y le reclamo. –¿Quien te dio permiso para tocarme? si quieres que te folle, te follare duro y fuerte sin importarme tu inocencia.–le advierto dándole la última oportunidad de arrepentirse. –yo solo fórnico, no hago el amor. Ella me atrapa el labio inferior, lo succiona y antes de soltarlo me lo mordisquea. Enreda sus piernas a mí cadera, franeleandose contra mí y sus
SOFÍA Bajo corriendo las escaleras, para recibir a mis papás que están entrando por la sala principal con las valijas. Ellos sonríen al verme de oreja a oreja y me abrazan los dos a la vez murmurandome–hola princesa. Al desprendernos los tres del abrazo, noto a sus espaldas sonriendo a George, el abogado y testaferro de la familia hace diez años. Un hombre de cuarenta años muy agradable y bondadoso. Es uno mas de la casa, recuerdo que jugaba y hacía pijamadas con su hija, Casandra. Cas tiene dos años más que yo. Ahora esta de viaje por Europa y hace más de 5 años que no la veo, solo nos contactamos por las redes sociales. George se acerca a mí y besa mí mejilla por unos segundos, luego me susurra –hola so. Me recorre con un brillo de interés y agrega–¡Que grande y hermosa estás!. Me sonrojo levemente y le respondo–Gracias, georgi. Siempre lo llame asi, por que tenemos confianza y lo considero como un tío, aunque para el, hace un tiempo atrás que su interés platónico cambio y not
ARTUR Llego a la fortaleza de los donatelo que está recondita en una zona montañosa alejada de la civilización. Por lo tanto los vehículos no llegan hasta la entrada, estacionan mucho antes y caminan hasta ahí. Mí padre tiene su propio estacionamiento para el y su gente dentro de la fortaleza. En cambio, yo con mí moto estaciono justo en la entrada, bajo de mí Harley y me encamino a la entrada principal. Veo a Angelo y Patrick que me saludan con una reverencia de cabezas, son hombres que nacieron y se criaron en nuestro entorno, siguiendo el camino de sus padres que trabajaron también para mí abuelo y ahora mí padre, en nuestro negocio de las drogas y poderosas armas químicas letales, que fue pasando de generación en generación al igual que nuestros subordinados. Los grandes casinos y todas propiedas comerciales que manejamos por el mundo son pantallas para nuestro verdadero negocio multimillonario, no cualquiera entra a la guarida e imperio de los donatelo. El que entra no sale y ll