Perspectiva de Sandro.

Antes de salir al trabajo esta mañana le pedí a Jazmín y a mi madre que ayudaran a Lu a decidir que cosas quería mover a la casa y que dejar en la casita, ni quiero que crea que pretendo que se quede ahí para siempre y así pueda regresar ahí cuando Alana no necesite tanto cuidado y ella tanta ayuda. En eso recibo una llamada de mi secretaria.

-Si.

-Señor, tiene una llamada de la señora Casandra Evans. Lo comunico?

-No, dígale que no estoy disponible ni ahora ni nunca y que no vuelva a llamar.

Siento como la rabia recorre todo mi cuerpo no puedo creer que después de tantos años se atreva a llamar. Lanzo unos papeles al piso mientras tocan la puerta y entra Marco.

-Pero que recibimiento, a ni también me alegra verte.

Me dice parado desde el umbral de la puerta, le lanzo una mirada retadora.

-Que te ocurre, es Lu?

-No, Casandra acaba de llamar.

Se acerca al escritorio y se sienta frente a mi.

-Y que quería?

-No lo sé, no tome la llamada.

-Y no tienes cu