Daisie se quedó atónita.

Zephir estaba tan cerca de ella que podía contar sus pestañas. Su dedo se sentía frío sobre su piel y, aunque solo le estaba limpiando la sopa de la comisura de los labios, ella tenía la sensación de que él estaba acariciando a su novia.

Si hubiera sido en el pasado, habría pensado que lo hacía de buena voluntad o que la estaba cuidando como a una hermana. Sin embargo, ahora le parecía extraño.

Tal vez porque su respiración le producía escalofríos en la piel. Daisie le quitó el pañuelo de papel de la mano y puso distancia entre ellos. "Está bien, Zephir. Puedo hacerlo yo misma".

Zephir no dijo nada. Se limitó a sonreír.

Cuando terminaron de comer, salieron del restaurante.

Zephir detuvo el coche delante de ella. Sin embargo, no se marchó ni siquiera cuando ella subió al coche. Mientras se preguntaba qué estaba haciendo Zephir, repentinamente se inclinó hacia ella y se quedó atónita.

Inconscientemente le puso la mano en el hombro para apartarlo y dijo: "Z