—¡Maikel me asustaste hijo! —. Se hecha a reír por mi dramatismo. —Mami exageras demasiado vamos a bañarnos y después vamos a la feria si—. Lo grita con entusiasmo. —Bien vamos a bañarnos, pero primero—. —¡No mami no! —. Lo agarro, lo tiro a la cama y lo empiezo a llenar de besos y hacerle cosquillas. —¡Mami para para ya! —. Dice entre risas. —Vamos que estas muy ansioso—. Nos metemos al baño y nos duchamos, después de duchados, nos vestimos igual, con una camiseta azul con estampado de un lobo y unos vaqueros azules, tenis Nike negros y una gorra negra. Ya vestidos vamos a desayunar. —Hola Diego—. Lo saluda Maikel. —Buenos días—. Saludo también. —Buenos días ya veo que están listos para la diversión—. —¡Sii! —. Grita Maikel. Nos sentamos a desayunar. —Es una lástima que yo no pueda ir—. Dice con lamento. —Te avisé con tiempo para que nos acompañaras—. Le digo. —Si, pero salió esto y no puedo ir—. —Sera después—. —¿Qué les parece si cuando acabo los acompaños? —. —Si por
Narra Emily. —Te vas o quieres quedarte, está muy tarde—. Le digo nerviosa no quiero que mal interprete mis palabras. —¿Quieres que me quede? —. Pregunta. —Si... bueno no se si tú quieres—. Sonrió nerviosa. Hay Emily como te metes en estas cosas. —Claro que quiero quedarme contigo, siempre—. Ruedo los ojos. —Eres tan exasperante—. Le digo. —No hagas que me arrepienta—. Aparezco unos pantalones para que él se cambie. —¿Y eso? —. —Para que te cambies, no pensaras dormir con esa ropa—. —No preguntare como hiciste eso—. —Que bien por qué no sabría cómo explicarte—. Sonrió. —Si te vas a duchar ahí está el baño—. Señalo él cuarto baño. —Me duchare después de ti o podemos ahorrar agua—. Dice divertido, lo fulmino con la mirada. —Okey sera después —. Resoplo. Busco mi pijama y me meto al baño, tomo una ducha rápida, me visto y salgo cediéndole el paso para que se duche. Y ahora la gran pregunta, ¿dónde rayos voy a ponerlo a dormir? —Uff—. Lo único que podría hacer es compartir la
Mi verdadero demonioTodo estos días Daimon me a presionado para que saque mi verdadero demonio, estoy harta no se como decirle que no puedo, y a la vez no quiero, me da miedo convertirme en eso que me dice Daimon y perder mi lado humano y por otro lado él lobo no deja de pedirme que salgamos a cenar creo que es una especie de cita.Tanta presión me tiene al limite y al borde de la locura, ya empecé a buscar un local para montar mi oficina, hoy veré uno, ya eh visto cinco y ninguno llena mis expectativas, o es que yo soy muy exigente, por suerte hoy me acompaña la abuela y Kim.—Les agradezco mucho que me acompañen estoy apunto de pegarme un tiro—. Les digo.—Cariño tu misma te complicas, puedes agarrar cualquier inmueble y hacerlo relucir—. Me dice la abuela.—Eso es c
Empiezo a comer, al terminar voy con Maikel y él lobo, nos vamos al sendero, Maikel aun sigue con sus entrenamientos, hablare con Darían haber si en su manada hay una escuelita para ellos, recuerdo que en la manada luna roja había una donde entrenaban los cachorros como ellos le dicen.—Nos vemos luego—. Le doy un beso a mi niño. —Quiero hablar contigo luego—. Le digo a Darían.—Si mi luna—. Que puedo hacer con este hombre.Me traslado a lo profundo del sendero. —Espero hoy vengas mentalizada para sacar tu verdadero demonio—. Dice Daimon.—Lo intentare aunque no creo que pueda—. Me aterra esta parte.—Tienes que hacerlo para que puedas avanzar con la siguiente enseñanza—.—¡Crees que no lo se, tengo miedo que quieres que haga!—.<
Narra Emily.—Mami...eres tu—. Escuchar esa vocecita su olor y él olor de Darían me trajo de vuelta a la realidad. —Darían esa es mi mami ¿verdad?, ese es su olor pero mi mamá no tiene cuernos y su cabello no es negro—. Quito la espada del cuello de Daimon giro hacia ellos y desciendo.—Si amor soy yo—. Le digo.—¿Que te paso por que estas así?—. Suspiro, a llegado la hora de decirle a mi hijo lo que es realmente su madre.—Amor esto es lo que soy, te acuerdas que te dije que además de los licántropos tambi&eacu
—¿Adrián o tu?—. Pregunto y él sonríe.—Los tres nos emocionaremos mi luna—. Niego, me pone en él suelo. —Sera mejor irnos—. Asiento y empezamos a caminar, él pasa su mano por mi cintura.—Hace días te iba a preguntar algo—. Lo miro.—¿Qué?—.—En tu manada tienen escuelita para niños como Maikel no es así—. Asiente. —Te parece si en la semana me llevas para ver como funciona, creo que Maikel te esta demandando mucho tiempo y tu siendo un alpha debes tener muchas obligaciones—. Le digo.&
—Andando vaquero tenemos una cita—. Le sonrió. —¿Una cita?—. —¡Si vamos la reservación es a las siete!—. —Pero yo no... Pongo mi dedo en su boca. —Y eso que iba salir contigo de todas maneras—. —Te adoro—. Regreso a casa y él a la suya, me doy una ducha, me pongo un vestido azul ajustado de mangas largas y unos tacones blanco. —¿Ya te vas mam?—. —Si mi amor—. —Vas a salir con Darían ¿verdad?—. —Si mi amor, que te parece él—. —Me cae muy bien, quiero que sea mi papá—. Creo que mi corazón dejo de latir. —Ya veremos qué sucede—. —¡Yo se que si va ser mi papá!—. —Okey amor—. —Emily amor ya llegó tu galán—. Me dice la abuela.
Narra Darían.Me sentía feliz al fin la había escuchado decirme te amo, sentir sus besos era lo único que quería, me aterre cuando la vi convertida en un demonio completo, si su primera transformación me provocaba repelús, la segunda era mucho peor, daba miedo ni siquiera Daimon transmitía ese temor como lo hacía ella, como era que una híbrida provocaba tanto temor, aunque no creo que ella se una híbrida para ponerme la piel de gallina debe ser más demonio que humana.Salir a esa cita y conocer más de ella fue un gran avance, estoy tan orgulloso de la mate que me dio la diosa luna, tengo que disfrutar esta nueva oportunidad que me cedió la diosa no la voy a desperdiciar.