- Cuídate Clara

Puse los ojos en blanco.

- Si mamá, no es como si estuvieras conmigo en esta casa grande todo el tiempo.

Al decirle eso pude ver una punzada de culpa en sus ojos, pero tan pronto como logre verlo así de rápido se fue.

- ¿Donde está tu padre?

- Tenía una reunión temprano, así que se marcho antes de lo acostumbrado.

- Entonces me despido. Te amo

- También te amo mamá.

Y ahora que me quedo sola me aburriré hasta la muerte en esta gran casa, ni siquiera puedo llamar a Kiara porque hoy tenía una cita con el médico para la ecografía del bebé.

Ahora lo importante... no se que voy hacer cuando esos dos hombres vengan aquí.

Ayer después de clase, fui a ver a Liam para decirle que quería cancelar la cita pero estaba tan feliz que no tuve agallas para decirle eso, así que me fui. Incluso me dirigí donde estaba Jonah para cancelar nuestra cita pero antes de que pudiera hacerlo él se me adelanto y me dijo que no lo iba hacer e iría a la cita con él me gustara o no.

Ahora estoy confundida, quiero matarlo porque gracias a él, estoy en esta situación tan incomoda.

Repito... ¿Por que nadie me escucha?

XXX

Me puse un top corto con una chaqueta encima y jeans azul oscuro, me arreglé con un poco de maquillaje: rimel, labios gruesos y un poco de rubor. Ahora estoy lista para irme con el idiota desconocido...

Si, decidí hacerle caso a Jonah, no tiene sentido que me niegue cuando el hará todo lo posible para salirse con la suya y no quiero mas conflictos en mi vida de lo que ya tengo y posiblemente tendré que enfrentar por su culpa.

A las 7:00 p.m sonó el timbre y me dirijo hacia abajo, mi doncella María ya había abierto la puerta y entro Liam.

- Hola Clara, te ves hermosa.

- Hola Liam, gracias.

- Ok, vamos.

- Liam, quiero decirte algo.

- Esta bien, dilo.

Se que le hará daño pero tengo que hacerlo... aunque verle así de ilusionado me esta doliendo el corazón, no puedo destruir su ilusión... ¿Por que debería hacerlo? Ni siquiera quiero tener una cita con Jonah, así que encogiendo mis hombros cambio mis planes de inmediato, pero muy en el fondo de mi ser, se que me voy arrepentir de haber hecho esto... 

Por favor, solo esta vez quiero que todo salga bien...

- No es nada, vamos.

Sonrió y me hizo caminar delante de él. Fuimos hacia su auto, me abrió la puerta y entré agradeciéndole su gesto de caballerosidad. 

En nuestro camino pude ver al idiota en su auto yendo  hacia mi casa, donde obtendrá la sorpresa de no encontrarme allí. Me reí entre dientes cuando me imagine su rostro al enterarse de que su "cita" se fue con otro hombre.

- ¿Que es gracioso Clara?

Pobre Liam, obviamente estaba mas que confundido con mi risa.

- Nada- con una sonrisa miré fuera de la ventana.

XXX

Punto de vista de Jonah

Estoy conduciendo hacia la casa de mi niña con una sonrisa. Se que ella aun no es nada mio pero lo será pronto. No se lo que me esta haciendo, siempre que esta conmigo mi corazón late como loco.

Cuando la vi por primera vez me cautivo su belleza. Cuando nuestras miradas coincidieron todo se detuvo a mi alrededor, sentía como si solo fuéramos nosotros solos en aquel salón de fiestas. Pero antes de que pudiera preguntarle mas cosas sobre ella o conocerla más en ese momento, de la nada salió Verónica y echó a perder todo, estoy seguro que ella me odió en ese momento por la idiota esa y se hizo una idea equivocada. Después de eso, busque todo sobre ella y descubrí que es la hija de Damon Kennedy, el rival número uno de mi padre, pero no me importó y trate de encontrar mas información sobre ella. 

Pasaron 2 meses y tuve la oportunidad de encontrarme con ella nuevamente cuando descubrí que uno de los administradores de esa universidad estaba en quiebra. En ese momento no podía pensar en otra cosa que no fuera convertirme en el nuevo administrador de la universidad.

Pensé que estaría cerca de ella, pero cada intento que hacía para lograr su atención era fallido, me ignoraba como si no me recordara, pero ayer logre una cita con ella... se que fue por la fuerza, pero aun así es una cita y se que la disfrutará, estoy seguro de eso porque me encargare de ello.

Me estoy volviendo loco y solo es por pensar en ella en estos últimos meses. No se que esta ocurriendo conmigo, tal vez sea el famoso amor a primera vista. En toda mi vida nunca experimenté ese sentimiento, así que no se como manejar todas estas emociones, tan pronto como reaccioné me di cuenta que estaba frente a su casa.

Toqué el timbre y en cuestión de segundos la puerta se abrió dejando ver a una mujer mayor. Supongo que ella es la señora de servicio.

- ¿Si, que desea joven?

- Estoy aquí para recoger a Clara.

En su cara pude ver la confusión que le generó mi respuesta.

- Ella fue a una cita.

Pero... ¿De que esta hablando?

- ¿Que?

- Ella se fue con su amigo Liam.

Escuchar su nombre de nuevo me hizo hervir la sangre. Le advertí que cancelara su cita con él y aun así se fue sin preocuparse por mis sentimientos.

Sin decirle nada a la señora di la vuelta y me fui.

Mañana le voy a mostrar a Clara quien soy y con una pequeña sonrisa ante este pensamiento me fui a mi apartamento.

XXX

Punto de vista de Clara

- Clara... oye Clara

Parpadeo y lo miro

- ¿Que?

- ¿Escuchaste lo que estaba diciendo?

- Si- respondí con una sonrisa falsa.

Liam me llevo a un restaurante demasiado costoso para nuestra cita. Me quede en blanco porque él estaba contando algo sobre un trato comercial en el que ayudo a su padre y pronto se hará cargo de un negocio importante, no creo que haya notado que estaba muerta de aburrimiento. Ni siquiera tengo ningún interés en el mundo de los negocios pero todos saben, incluido él, que soy la única heredera de la empresa de mi padre y pronto me haré cargo de esto y por eso piensan y creen que me interesa saber cosas relacionadas con este mundo cuando NO es así. 

No quiero hacer negocios, quiero convertirme en diseñadora de modas, traté de convencer a mi padre pero no me escuchó e hizo que tomara un curso por la fuerza sobre el campo laboral de los negocios e inversiones pero... también estoy haciendo un curso de diseñadora de modas sin su conocimiento, si alguno de mis padres lo saben se van a enojar conmigo.

Después de comer y hablar, estábamos listos para irnos. Ya íbamos camino a mi casa cuando de repente me preguntó:

- ¿Disfrutaste nuestra cita?

- Mmmm... si 

Aunque fue más como una charla de negocios y acuerdos comerciales... pero no le diré esto...

- Entonces eso significa otra cita- sonríe.

- Quizás...

Después de dejarme, se fue a su casa. Toque el timbre porque deje mis llaves en mi habitación. Maria abrió la puerta con una sonrisa.

- Hola Maria.

- Hola, ¿Como estuvo tu cita?

Aburrida seria quedarme corta...

- Estuvo bien supongo.

Estaba a punto de ir a mi habitación cuando ella me detuvo.

- ¿Quieres algo Maria?

- Si, quiero decirte una cosa.

- Claro, adelante

- Después de que saliste de la casa vino un joven y preguntó por ti.

- Ok, esta bien, gracias por informarme.

Se que algo va a pasar mañana y no estoy para nada preparada para ello.

XXX

Al día siguiente, ya estaba considerando tomar un permiso y no asistir a la universidad, pero por muy tentadora que era la idea decidí enfrentar mi destino porque no quiero perderme las conferencias ni tener tareas pendientes.

Estoy muy nerviosa de verlo, no se que decirle por no presentarme para nuestra cita, rezo a todas las entidades divinas para no verlo y parece que es mi día de suerte porque hasta ahora no lo he visto en ningún momento.

Con una sonrisa voy a mi primera clase, pero antes de que pueda entrar escuché al Sr. Stewart llamarme a través del intercomunicador.

"Señorita Clara, por favor presentarse a la oficina principal ahora"

¿Ahora que hice? Con un profundo suspiro inicié mi camino hacia la oficina principal, no se porque pero siento que esta a punto de pasar algo y no me va a gustar. Respire hondo y llame a la puerta.

- Adelante- dijo el director.

- ¿Me llamo Sr. Stewart?

- Si, quieren hablar contigo.

Pero si quieren eso pueden acudir directamente a mi en lugar de hacer esta tontería e involucrar al director.

- ¿Quién?

- Encantado de verte de nuevo Rosa.

Mis ojos se abren como platos al reconocer esa voz