Vicente Santoro.

Domingo.

09:02 "Aeropuerto". Francia.

Ya estamos en el aeropuerto porque realmente necesito volver a esa mierda, apenas salí del viaje y la cosa se fue cuesta abajo como en un abrir y cerrar de ojos, lo único que realmente quería en ese momento era estar disfrutando con mi esposa.

"Que tengan un buen viaje, señor y señora Santoro", dice Denis inclinando la cabeza hacia nosotros dos.

"Ocúpate de las cosas por aquí, Denis." Lo dije con rudeza, no estaba de humor para ser amable.

"Sí, mi señor." Me volví hacia mi bella esposa.

"Vámonos a casa, mi amor." La agarré por la cintura y la llevé al jet.

Entramos y no hago caso a las azafatas que contraté hace un rato, luego de colocarla a mi lado me jalé el cinturón de seguridad.

"Puedo hacer esto, Vincenzo." Sonrío un poco y beso sus labios pecaminosos.

''Lo sé, sólo quiero cuidar de mi bella esposa.

Sacudió la cabeza con una pequeña sonrisa.

Ella ya está enamorada de mí, pronto me amará y nunca me dejará.

El avión despegó y n