Él se levanta sin decir nada y se marcha, niego con mi cabeza y comienzo a seguir mi trabajo, debo revisar las historias clínicas de todos los soldados, para saber que procedimientos realizar, sin embargo, me consigo con un paciente que dice confidencial, leo su expediente, así que me levanto.

—Acompáñame Alex, Dr. Mancini quédese a cargado.

Con él nos vamos a donde está el paciente, pero como el lugar es pequeño o que se yo, me consigo al Capitán.

—Dr. ¿En que la podemos ayudar? — Me dice seriamente.

—A este paciente hay que operarlo, hoy mismo— El ríe fríamente.

—No puede venir y decir eso, ya su médico está en camino,

—No seré la responsable cuando su médico llegue y el muera, necesita cirugía en este momento, tienen un aneurisma que puede reventar en cualquier momento, así que dejen hacer mi trabajo, para eso estoy acá ¿No cree Capitán? — Le pregunto seriamente y miro a Ariel.

—Alista y llama a Flavio, dile que me asistirá— Ariel asienta, pero él lo detiene.

—No ira a ningún lado—