TE EXTRAÑE.
DAMIÁN
Ya han pasado 13 días exactos desde la última vez que vi a mi amada.
Y al fin había llegado el día en que la recuperaría hicimos un plan para rescatarla, pero primero tenemos que atacar la Aldea de los vampiros.
Ya nos estábamos preparando para salir, y buscar a la mujer de mi vida.
Ya listos nos transformamos todos en lobos y empezamos a correr en dirección a la aldea de los vampiros.
Llegamos en menos de quince minutos ya que nuestra rapidez es insuperable.
Yo lideraba la manada, y a mi lado izquierdo iba mi beta.
Legamos a la aldea y sin previo aviso empezamos a devorar a cada uno de los vampiros sin importar que sean inocentes o culpable.
Muchos dirán que es injusto, pero para mí no, lo es ya que ellos entraron a mi aldea y hicieron lo mismo asesinaron a muchos niños sin razón alguna.
Llegamos al Palacio del jefe vampiro, y el maldito tiene a mi luna, mi vida entera a un costado mientras la cortaba y lamia las muñecas de sus manos.
Me vuelvo a poner en mi forma humana y le grito.
—Suéltala ya mismo —hablo en tono furioso.
Esta suelta una carcajada.
–Así de fácil no, quiero algo a cambió —vuelve a hablar en un tono burlon.
—Yo sé lo que le podemos dar a cambio —dijo mi lobo.
El quería salir y arrancarle la cabeza.
—¿Que es lo que quieres? —preguntó haciéndome el interesante.
— Quiero cada uno de tus territorios.
—Acepto —digo estrechando su mano —podia ver el terror y la confusión en la cara de mi Reina.
Este la tiró al suelo y la levante, de inmediato se la entrego a mi beta.
—Una cosa más ante de irme quiero prometer algo —Prometo matar a cada uno de los vampiros de tu manada.
—Ataquen —digo después de salir con mi Luna en los brazos, si no la llevaba a un doctor rápido moriría, estaba muy pálida y su peso había disminuido.
—Oye —digo mientras le doy leves golpecitos en su mejilla para que se duerma del todo.
—Me transformaré para que lleguemos más rápido, agárrate lo más fuerte que puedas de mi pelaje.
Ella respondió con un leve sí.
Me trasformé y esta subió a mi espalda y se agarró como le dije.
En siete minutos ya nos encontrábamos en el hospital de la manada. .
Llevaba más de una hora aproximadamente de estar en el hospital sin ninguna noticia de ella.
La necesidad de verla me estaba carcomiendo.
Después de unos minutos salió un doctor.
—Doctor —Ella está estable por ahora alfa, tiene que beber mucho líquido y comer para que recupere masa corporal.
Preste mucha atención a todo lo que me dijo.
Yo solo quería verla.
— Ya se la puede llevar a casa La luna, ela tiene que tener mucho reposo.
Entró a ver a mi luna y se encontraba despierta.
Me acerqué y dejé un beso suave en la comisura de sus labios.
Ya que sentía que si le daba un beso con todas las emociones que sentía, se iba a romper.
—¿Estas mejor? —pregunto con voz suave y cariñosa.
–Si–responde, una leve sonrisa se asoma por sus labios.
—No sabes cuánto te quiero, y todo lo que me dolería perderte.
—Yo también te quiero "Mi amor".
Cuando dijo eso sabía que mis ojos se habían iluminado, las ganas de besarla me volvió, no me detuve, de inmediato la besé con pasión.
Y con esa misma pasión me lo devolvió.
—Te Extrañe —murmura sobre mis labios.
DAMIANYa han pasado tres semanas desde que recupere a mi Luna.Su salud ha mejorado desde entonces ya que recuperó su masa corporal, aparte ha estado más cariñosa, y no hablo del cariño mínimo, ya que su cariño ha aumentado por 100, diría yo.Estoy en mi despacho llenando unos papeles y comprando vuelos en línea, ya que quiero pasar unos días a solas con mi preciosa luna.ASTRID—No se que es lo que me pasa —le digo a Emma.—Siempre quiero estar con él, abrazarlo besarlo, acariciar cada parte de su cuerpo dejar, también quiero que salga de su boca un "
MAL ENTENDIDO.ASTRIDCasi llega el día, el día en que nos vamos de vacaciones.Estoy un poco nerviosa, justo por que a donde vamos es cerca de la ciudad donde vivía.Y yo que estaba tratando de pensar que España es grande y que no justamente tenía que ser ahí, para que Damián me diga que para allá es que vamos.No tengo nada de buena suerte.Quiero estar tranquila, pero tengo un mal presentimiento.Sigo haciendo las maletas ya que nuestro vuelo es mañana en la madrugada.
ASTRIDVamos de camino al aeropuerto. Serán unas pequeñas vacaciones, bueno no tanto por que serán tres semanas, por poco no será un mes.Estoy anhelando que estas sean las mejores vacaciones de mi vida.Con Damián ya las cosas están arregladas. Después del pequeño incidente se ha puesto más cariñoso y sensible, tampoco se ha querido despegar de mi lado.—¿Quién eres y que haz hecho con mi hombre? —pregunto mientras veo a Damián.—Aquí estoy nena —contesta con su voz en un tono pícaro.—Definitivamente ahí está —digo mientras me acerco a besarlo—Te quiero —susurra entre mis labios.Seguimos así hasta que nos subimos al avión.Estábamos actuando como unos críos cursis hasta que el sueño me venció.DAMIÁNSe ve tan preciosa mientras duerme.Gracias que la medicina que utilizamos nosotros es fuerte, sus manos es t
ASTRIDVamos saliendo mientras buscamos con la mirada a nuestro chófer, él que nos llevara al hotel.Mientras busco me encuentro con unos ojos que hace que mi estómago se revuelva.Mi hermano.Este se quedó mirándome con la boca abierta y comienza a caminar en mi dirección.Me agarró de Damián para arrastrarlo, pero no logró que se mueva un centímetro.La pérdida de tiempo hace que mi hermano llegue hasta nosotros.Este me despega del cuerpo de Damián de un solo tirón.—¿Donde mierda h
Llegamos al hotel estaba furiosa, pero no quería que Damián se preocupara por mí.—¿Que vamos a hacer? —pregunto forzando una media sonrisa.—Creo que lo mejor es que descanses, por todo lo que pasó en el aeropuerto —habla en un tono preocupado.—Si eso quieresNo estoy para más discusiones.Me fui a dar una ducha, cuándo salí del baño me puse ropa interior y me metí a la cama.Damián se acerca y en un movimiento rápido se posiciona arriba de mí y comienza a besar mi cuello.Sus besos me excitan, pero lo tengo que deten
¿¡Enserio, me dejarás así!?.Ha pasado más de media hora y Damián no deja de darse vueltas en la cama, como si es que algo le molesta.—Damián.—Sí.—Deja de moverte o dormirás en el suelo.Mi sueño se ha ido por culpa de él.—Es que no lo puedo creer que me vayas a dejar así —habla ya un poco molesto.—¿Así, como? —pregunto haciéndome como que no se nada, estoy a punto de estallar a carcajadas.—Así excitado, con mi amigo necesitado y m
Astrid.No llegue a conciliar el sueño, Damián si que sabe jugar sucio.—Lo necesito —Pienso.Espero que amanezca y me acerco a Damián empiezo a dejar húmedos besos con su pecho y su abdomen marcado.—Astrid —Ronronea.Sigo dando besos mientras quitó la sábana que cubre la parte de abajo.Y me posicionó encima de él.Empiezo a mover mi cadera en círculos para provocarlo.Como veo que este no abre ni siquiera un ojo dejo de moverme y me quitó de encima.
AstridEstoy recogiendo mis cosas ya que nos volvemos a casa, he disfrutado las vacaciones, pero aún Damián sigue enojado.La verdad no se en lo que estaba pensando, pero ahora estoy arrepentida de lo que provoque.Creo que aún no estoy lista.Terminó de recoger mis cosas y me voy directo a la cama ya que salimos temprano.Damián esta de espaldas a mi, así que me acerco y dejo un beso en está seguido de un abrazó.Me acercó y le susurró al oído.—Lo siento por provocarte, pero me he dado cuenta de que aún no estoy lista.