Bárbara Úrsula Medina
Mis amigos y yo nos vamos de antro, necesito despejar mi mente, olvidarme de todo lo que pasa con mi madre, novio, lo del señor Manckenzie.
Llevo puesto un pantalón pegado a mi cuerpo, unos tacones altos negros y una blusa corta del mismo color.
Llegamos al lugar la música resuena a todo volumen. Nos acercamos a la barra y le pedimos al barman unas cervezas bien frías. Tomó el primer trago sin titubear y es cuando he dicho que empieza la noche.
Mi amigo Diego y yo nos movemos al ritmo de la canción, meneo las caderas de una forma sensual. Mi trasero chocando en su miembro, su mano en mi cintura y mis brazos en el aire acompañando a la canción, desde que el Dj la puso nos levantamos a bailar y desde luego no hemos parado.
(...)
Siento que me observan desde lejos, cada paso que doy pero de seguro es por las tantas bebidas que he tomado.
Cristóbal ManckenzieBárbara está completamente dormida en mi cama, se ve tan relajada, un ángel. Pero sin embargo también está Mónica Hutton la rubia que estaba conmigo anoche, tuvo un problema con las llaves de su casa y me rogó que la dejará pasar una noche aquí en mi casa.Bajo a la cocina con sólo un pantalón de pijama, busco jugo de naranja y procedo a tomar de mi bebida.Hoy en la casa hay dos mujeres muy diferentes no sólo en el físico sino también en su forma de ser y pensar. Bárbara es más humilde, dedicada yo creo que por eso tiene organizaciones, ella sabe cómo ser una líder y Mónica se preocupa más por su imagen, su estatus social.Mónica entra a la cocina con una sonrisa de oreja a oreja.--Buenos días, cariño-anuncia llegando hacia mí y besando
Bárbara Úrsula Medina Una mirada penetrante quema, y a la vez da frío.Mi madre regresa hoy de su viaje, aguantar el tormento de Estela. Es obvio que lo primero que va hacer es venir a la empresa y disque supervisar todo. Pero la verdad no sé ni a qué viene ¡Ah sí! A fastidiarme el día.Llevo puesto una falda de tubo por encima de mis muslos, una camisa blanca, unos tacones altos negros y por último mi cabello suelto.Suena el teléfono y procedí a contestar.--Bárbara Medina-contesté esperando respuestas.--Barby, tu madre está en la empresa-anuncia mi secretaria Rosa-. Y no está
Cristóbal ManckenzieEscucho discusiones en la oficina de al lado que es dónde está Bárbara con su madre. Ya saben madre e hija discutiendo.Salgo de mi oficina, necesito saber que tanto hablan pero la puerta de la oficina de Bárbara se abre y sale una Estela furiosa sin mirar a nadie.Enseguida voy hacia Bárbara que está sentada en el mueble con la cabeza en su mano sollozando.--¿Bárbara qué sucedió?-pregunto preocupado.Ella se levanta de inmediato y me da la espalda. Respiro resignado, ya sé, no le gusta que la vean llorar o mejor aún no le gusta que la vean derrotada.--¿Estela te hizo algo? ¿Cuéntame qué pasó? Puedes confiar en mí-le digo caminando hacia ella.Se voltea y me abraza por el cuello, llega su cabeza al hueco entre mi cuello y hombro, y llora.--¿Por qu&ea
Bárbara Úrsula MedinaTodo ha pasado tan rápido pero a la vez intenso. Lo único que necesito ahora es estar sola, no ver a nadie, olvidarme de todas las discusiones con mi madre y novio. En definitiva quiero alejarme de todo lo que me pueda hacer daño.Estoy en una de las organizaciones, eso también me ayuda a despejar la mente y olvidarme por unos minutos todo el tormento de mi madre ¡Eso es lo único que necesito!--Barby ¿Qué tienes hoy?-pregunta una niña muy linda llamada Luz.--Nada pequeña ¿Porque la pregunta?-pregunté con media sonrisa.--Hoy no estás feliz como todas las veces que vienes-reveló llevando su mano a mi mejilla-. ¿Estás enferma? ¿Te hicieron algo?-pregunta.--Estoy bien linda. Gracias a Dios no estoy enferma y... Todavía no me han hecho nada... Sólo estoy
Cristóbal ManckenzieOtro día en la empresa de Bárbara. Llegué temprano pues tengo mucho trabajo que hacer no te raro que Bárbara no estuviera ahí pero no le di mucha importancia.Necesito que ella me firme unos documentos muy importante es sobre un contrato con los hermanos vecinos. En fin voy a su oficina y me encuentro con que la puerta está un poco abierta ¡Es muy raro! Pero decido asomarme un poco y logro ver a Estela junto a Daniel besándose.Están los dos al lado del escritorio él tiene sus manos en la cintura y ella en su cuello.¿Daniel engaña a Bárbara? ¿Con Estela? Lo último que me podría imaginar es... Esto que veo con mis propios ojos. ¡Pero qué patán! Es un hijo de puta. Mira que engañar a mí Bárbara con su madre, su madre. No me puedo imaginar lo q
Bárbara Úrsula Medina¡Gracias a Dios he podido resolver el problema! Es sobre un terreno que acabe de comprar, preferiblemente implante un área de juegos. El caso es que había llegado un rumor que el terreno tenía título de propiedad y bueno necesitaba informarme.¡Hoy es viernes! El apreciado y satisfactorio viernes. No he hablado con Manckenzie, pero lo extraño.Entro a mi oficina, llevo puesto un vestido azul ceñido al cuerpo con unos tacones altas y mi cabellera en una cola de caballo.Estuve hablando con Daniel me propuso viajar, en pareja para que las cosas funcionen como antes, pero mi respuesta es no tengo mucho trabajo como para viajar ahora.Suena el teléfono de la oficina y procedo a contestar.--Si. Rosa-contesté respirando profundo.--¡Bárbara Úrsula Medina!-exclamó por lo bajo-. Aca
Cristóbal ManckenzieFernanda y yo quedamos en un acuerdo, tenemos que esperar el momento perfecto para que Bárbara encuentre a Daniel con Estela. Pero mientras tanto tengo que pedirle a barby que se aleje de su dizque novio por el bien de los tres porque le rompo la boca si trata de acercarse.Espero con minutos impaciente a que llegue de una reunión, he ido como cinco veces a preguntarle a Rosa y me dice lo mismo. Tengo la suerte que es aquí mismo y que no se va ir como la vez anterior.--Señor Manckenzie, la señorita Medina acaba de llegar-informa la secretaría de Bárbara por el teléfono.--Okey. Gracias-respondo y cuelgo el teléfono, me levanto de la silla y voy directo hacia la oficina de Bárbara.Toco la puerta antes de entrar y recibo un adelante como respuesta.--Buenas tardes señorita Medina-digo sentándome
Bárbara Úrsula MedinaTengo puesto un vestido ceñido al cuerpo, negro sin hombros y una abertura en la pierna derecha que llega al final de mi muslo. Estoy muy provocativa ¡Si lo sé! Pero me encanta este vestido, lo acompañe con unos tacones rojos de punta.Daniel pasó por mi casa y ahora mismo estamos en un restaurante muy lindo y delicado.--¿Te gusta cielo?-me pregunta Daniel tomando mi mano por la superficie de la mesa.--Claro que sí-respondí con una sonrisa-. Esta súper lindo. Gracias por invitarme-contesté.--Quiero que todo sea como antes-reveló-. Y esto es una parte de la sorpresa que tengo preparada-comenta.--Okey. Entiendo, estoy ansiosa-digo con una sonrisa en mi rostro.¡Yo si confió que todo va a estar como antes! Pero mis sentimientos me juegan una mala jugada porque sólo pienso en Crist&