Callum De Rufus.En el momento que se fue Ava, salí del despacho a comer algo aunque mi cuerpo me rechazara lo que sea que me metiera a la boca, por más que intento mantener la mente ocupada, todo me recuerda a ella por cada rincón de la mansión por el que paso, hasta en el bosque cuando paso veo una ilusión.— Que milagro de la diosa que hayas salido de su despacho, su alteza — escucho a William, lo miro para luego ignorarlo, salgo al jardín en donde veo el atardecer — ¿Va a cenar? Los gemelos quieren comer con su alteza — respiro el aire fresco y lo miro.— ¿Crees que mi olor no les molestara? — pregunto y mira hacia otro lado, asiente entendiendo y se va entrando a la mansión, me siento en la banca intentando distraer mi mente en algo cuando de pronto siento el olor de Alex acercarse, supongo que viene con el cronograma de la próxima semana, encima de eso, la boda se hace en un mes, eso significa que tengo desde ahora 30 días para casarme.Y todo se adelantó porque a mi padre se le
Helena Ramírez. Me siento exaltada en la cama, mi frente sudada y mi respiración agitada, he vuelto a tener las pesadillas de siempre, toco mi vientre y es lo único que ahora me relaja de una manera tranquilizadora. Me levanto de la cama al mirar la hora de la mesita de noche que da las 8 de la mañana, lo que me indica que tengo que ir al trabajo.Han pasado 2 semanas desde que deje Londres y regrese a esta pequeña ciudad de hermosos bosques de Francia, pero claro, no volví a trabajar con Monic Belle y creo que es lo mejor, ahora teniendo dos bebés en camino, no puedo darme el lujo de estresarme y no descansar por las exigencias que toma uno al ser asistente. Termino por vestirme y salgo del pequeño piso que logre conservar, gracias a William pude obtener un poco de dinero a pesar de que Callum me daría más dinero del cual no pensaba aceptar porque no trabaje en el tiempo en el que estuve en Londres.Llego a la cafetería saludando al personal, la dueña es muy amable conmigo, por algu
Callum De Rufus.Una semana después.Analizo los últimos detalles de la empresa de cervecería antes de ir a la fábrica a revisar el producto, encima de eso, revisar el viñero para dar vino en la boda, no he visto a Ava desde hace unos días, supongo que salió como me había dicho y que volvería un día antes a la ceremonia de la luna llena, no me podría estresar por eso, excepto Alex y Adela que no sabían cómo es que Ava se volvió a escapar cuando creían tenerla vigilada.No es nada raro en una chica de 23 años escaparse, hasta podría decir que tiene la misma manía que Helena y eso que son gemelas. Termino y recibo una llamada, por suerte nadie me controla el teléfono personal.— ¡Hermano! — alejo un poco el teléfono al contestar — Llegare mañana en la tarde, tenemos mucho que hablar, bye — cuelga sin dejarme contestar o algo por estilo, suspiro negando y guardo el móvil, entro al coche y este maneja hacia la fábrica, por suerte todo está hecho y arreglado, tanto la ceremonia como la bod
Ava Gardernes.Bajo del tren a notar que he llegado al pueblo en donde se encuentra Helena, suspiro aliviada de haber logrado escaparme, supongo que no tengo mucho tiempo antes de que sepan mi paradero, tomo mi teléfono y llamo a Callum antes de apagarlo para más seguridad. Miro a todos lados y me acerco a la salida en donde lo llamo.— ¿Dónde estás? — pregunta apenas contesta, como si estuviera esperando mi llamada, claro que llevo días sin aparecerme delante de él, me río un poco nerviosa y sé que debe de darse cuenta ya.— Pues disfrutando mis últimos días de soltera, no te preocupes, no te dejare en el altar... o tal vez si — me río un poco más, lo escucho suspirar molesto, supongo que no puedo hacerles bromas de mal gusto, sigo caminando a ver si encuentro a Romina que me comentó que estaría en este pueblo.— Más te vale que ni se te ocurra dejarme en el altar, no pienso ser el hazmerreír de nadie, Ava — suspiro por su exageración pero tiene razón en eso, no puedo hacerle eso, a
Helena Ramírez. Creo que haberla traído a mi apartamento no fue la mejor opción, sabía que algo raro iba a salir de su boca en el momento que la vi entrar a la cafetería, no debí aceptar hablar con ella.— Estás loca, Ava, no pienso casarme con Callum, tú eres la que estás comprometida con él, no yo — me levanto y me volteo caminando hacia la ventana, siento sus pasos.— Tú eres su luna, la verdadera reina, yo no puedo tomar ese puesto, estuve ahí todo este tiempo siendo tu remplazo, Sophia — me detengo al escucharla, me volteo y la miro, traga saliva, maldice y se tapa el rostro para después sacar un sobre y entregármelo, lo tomo y lo reviso, es una prueba de ADN, la miro y luego vuelvo a leer que ha salido positivo. — Eres mi hermana — trago saliva, me siento en el sillón sintiendo una presión en mi cabeza, solo puedo escuchar mi corazón.— Pero… pero tú eres una lady… — trato de explicarme y suspira acercándose y se sienta frente a mí, toma mis manos haciendo que la mire a los ojo
Ava Gardernes.Salgo del apartamento y bajo las escaleras, sé que no fui lo más amable posible pero tampoco debí haberle dicho las cosas de esa manera tan directa y sin filtro, supongo que al ser criada así es un tanto problemático, también porque Helena tiene otra mentalidad muy diferente y por eso no nos encontramos en el mismo barco y por eso chocamos.Al estar fuera del edificio me quejo, no tengo a donde ir y si regreso a la posada de ese brujo llamado Altaír, dudo que me pueda controlar si me habla otra vez y eso no debe ser, tengo que tener la cabeza fría y pensar en cómo convencer a mi hermana de casarse con su amado, encima de que espera hijos de Callum, si el rubio se entera, haría un escándalo o dudo que lo hiciera, conociéndolo nunca ha sido impulsivo y si le hubiera dicho mi plan, no me hubiera dejado salir de Inglaterra, de eso que no tengo duda alguna.— Hola, lady — me volteo viendo un pequeño coche, de este sale el pelirrojo con una sonrisa en sus labios — ¿Regresas a
Callum De Rufus.No sé si es porque me volveré loco o no pero el olor de mi luna no ha dejado de estar presente desde que empezaron a llegar los invitados a la ceremonia, antiguos lobos de la manada y de las manadas vecinas que no viven entre humanos, poco que sí, siempre en este tipo de boda, los lobos tienen más posibilidad de conocer a su destinado aunque sea un relato super viejo y casi imposible de que suceda pero nadie pierde la esperanza, encima de que también tienen la oportunidad de enamorarte sin estar destinados, ya saben, la atracción existe.De un momento a otro deje de olerla y sí que me estoy volviendo loco ya que no paraba de mirar a todos lados buscándola, mi lobo está loco por tenerla de nuevo pero me controlo solo por la presencia de mi padre que se encuentra sentado en primera fila del novio, muchas personas se le acerca a saludarlo y yo simplemente quiero que todo se acabe de una buena vez.— Lady Ava está cambiándose — es lo primero que dice William, por suerte n
Helena Ramírez.Debo estar loca, cómo es que terminé aceptando este plan tan descabellado de Ava pero después de lo que Luz me reveló, todo tenía un poco más de sentido, aunque yo quisiera ser egoísta por un momento, debía de pensar en los cachorros, encima de que yo puedo hacer la paz entre dos especies y eliminar la monarquía por completo pero eso ya sería hablarlo con Callum. Me miro en el espejo y suspiro para ver a Ava revisar su bolso, luego me mira con preocupación.— No me digas que te estás arrepintiendo — dice nerviosa — No puedes hacerme esto, Helena — nunca hubiera pensado que tuviera una hermana gemela, tampoco que fuera más dramática que yo. — No te preocupes, solo estoy pensando — me siento en un sillón.— Por eso mismo, estás pensando en abandonar el plan, solo cásate, es sencillo — chilla caminando de un lado a otro, río negando por su actitud.— No te preocupes, lo que me preocupa es que Callum pueda olerme — me mira y queda en shock, me levanto y saco un pequeño fr