El escandaloso encuentro nocturno entre Jimena y Alejandro, continuó creciendo en Internet, sin cesar de avivar las llamas de la pasión.

Tanto los Rodríguez, como los Hernández, enviaron equipos de relaciones públicas para manejar el escándalo, pero la situación se encontraba cada vez más grave. No solo había videos y fotos como evidencia, sino que los rumores seguían propagándose en la red.

Cuando Isabella vio las noticias, su teléfono se le cayó de inmediato al suelo, y desafortunadamente, ella misma cayó por las escaleras. Por fortuna, las escaleras eran como una pendiente suave, con solo unos pocos escalones, pero aún así se torció el tobillo y se golpeó la cabeza.

Esta escena asustó en gran manera a Rodrigo, quien inmediatamente llevó a su madre al hospital.

En la habitación del hospital, Isabella se encontraba en la cama con una vía intravenosa, apretando fuertemente la mano de Rodrigo, con lágrimas en sus ojos.

—Rodrigo, ¿qué haremos? ¿Qué haremos? Jimena solo tiene veintidós añ