Capítulo 96
Daniela esquivó su mano y regresó a la habitación.

Sebastián estaba demasiado enfadado como para comer algo.

Tomó su teléfono y decidió que aún tenía que ver a Sofía.

Pero justo cuando estaba a punto de irse, Daniela asomó con picardía la cabeza por la puerta y agitó el acuerdo que tenía en la mano: —Sebastián, no te olvides de nuestro acuerdo.

Sebastián no pudo evitar maldecir en voz alta y regresó rápidamente.

Daniela se asustó y retrocedió al instante, cerrando la puerta con llave y corriendo hacia la cama, acurrucándose bajo las mantas.

Viendo las llaves en la puerta, Sebastián no pudo evitar reírse.

Abrió la puerta de un solo tirón antes de que Daniela pudiera cerrarla de nuevo.

Agarró con fuerza su muñeca, con una mirada muy peligrosa en sus ojos: —Creo que necesitamos agregar un sexto punto. Durante el matrimonio, ambas partes deben cumplir por completo con los deberes matrimoniales.

—Daniela, ¿qué piensas?

La altura imponente de Sebastián, de 1,83 metros, intimidaba en ese mome
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo