No sabía qué más podía hacer excepto ese programa.

Necesitaba el programa para demostrar su valía. Si se rindió, no tendría confianza en sí misma en sus habilidades.

Ella pensó por un momento y dijo: "Christopher, ¿qué más crees que puedo hacer en lugar de ese programa?"

Ella bajó la cabeza. Su corazón se hundió cuando hizo esta pregunta.

Christopher espetó: "No necesitas trabajar".

¿Por qué tendría que trabajar su esposa? "¿Es eso así?"

El corazón de Janice dio un vuelco. Ser ama de casa?

Pero ni siquiera podía cocinar. No tenía habilidades domésticas. No estaba calificada en lo más mínimo para ser ama de casa.

"Christopher, ¿puedes dejarme terminar este programa?"

Ella lo miró con una pizca de súplica en sus ojos.

Al ver sus ojos suplicantes, Christopher solo sintió que su corazón se ablandó. Casi no tenía la capacidad de defenderse.

En el pasado, no importaba lo que fuera, siempre que Janice le suplicara, él definitivamente estaría de acuerdo con ella.

Pero en este asun