FALON

Las palabras de Gray me golpearon como una tonelada de ladrillos, dejándome sin aire.

¡¿Me echó?!

Mis ojos nadan en lágrimas mientras me doy la vuelta y corro desde el comedor de regreso al cuartel, abrumada por la enorme sensación de pérdida que siento. La pérdida de mi sueño de entrar en el escuadrón, la pérdida de Gray. Es demasiado. Tan pronto como llego al cuartel, no puedo contenerme más y comienzo a llorar. Estoy medio cegada por ellas mientras me dirijo a mi litera, agachándome para sacar mi maleta de debajo.

Me duele todo el cuerpo, es como si el dolor desgarrador de las palabras de Gray se manifestara físicamente. Se siente como si hubiera un agujero vacío en mi pecho donde solía residir mi esperanza. Mi cuerpo está sacudido por los sollozos mientras abro la cremallera de mi maleta. Camino con pasos pesados hacia el pequeño armario abierto al final de la litera, me pongo una camiseta y unos pantalones cortos, y empiezo a quitar la ropa de las perchas y a tirarlas