Después de la ostentosa fiesta de matrimonio de Chris y Lorena, deciden irse de luna de miel a Paris,  una luna de miel de ensueños para muchas personas, para ellos era lo más básico debido a sus grandes compromisos, Lorena solo quería compartir momentos a solas con él, antes de contraer matrimonio no habían vivido un solo día juntos, aunque habían consumado su relación muchas veces, jamás amanecieron un del lado del otro y la sola idea a ella la emocionaba, haberse casado con el la hizo sentir que estaba cogiendo el cielo a dos manos, y hubiese tenido razón si para Chris ella significara lo mismo, y no se hubiera casado  bajo la presión de ella, la de su familia  y claro la sociedad.

Durante el vuelo, el estuvo distraído, sus pensamientos lo llevaban a su primer matrimonio, recordó que a Sara solo pudo llevarla a una ciudad cerca de allí, estaba en pleno proceso de recuperación y todo fue tan rápido y sencillo, pero ella era tan noble y humilde, que cualquier