James dejó de besarme y sólo sonrió mientras volvía su vista a su plato que estaba sobre la mesa, mientras yo seguía en trance por su acto, realmente no entiendo por qué hace eso, ¿acaso quiere volverme loca?

-¿Por qué me besaste? - Pregunté tratando de ocultar mi nerviosismo.

-Porque eres mi esposa. - Sonrió.

-No me vuelvas a besar. - Tomé mi bolso y me fui de ahí.

Pero ¿a quieé carajo engaño? El beso me encantó y obvio quería que me besara pero no que sea solo por aparentar si no porque realmente siente deseos de hacerlo pero se que eso no pasará ni en un millón de años.

Iba caminando sola hacia mi oficina hablando sola y maldiciendo al imbécil de James cuando de pronto choqué con Eli.

-¿Ahora también hablas sola? - Dijo riendo.

-¿Dónde estabas? - Intenté evadir su pregunta.

-Tuve que arreglar unos asuntos con mi padre, ¿ya comiste? - No se por qué sentía que estaba evadiendo el tema pero qué más da.

-Si, tú también deberías ir a comer.

-Lo haré. - Me sonrió para luego irse.

Yo fui