Capítulo 62—¿Que quieres decir con que miente? Yo ...El lobo nego con la cabeza al escuchar los pasos de Thomas acercarse, me pidió guardar silencio mientras yo temblaba sin saber que era esto.Thomas sonrió, entro a la habitación dándome una caricia en la mejilla—Quiero pedirte disculpas, actúe impulsivamente, tu cabeza está muy confundida y debe ser eso lo que te hizo decir un nombre desconocido.—¿Estás seguro? ¿Yo no conozco a ningún Robin? —tartamudee El me miró a los ojos, me aseguro que no era así, me beso las manos y subió los besos por mis brazos hasta llegar a mi boca.Lentamente quiso acostarme en la cama, hace unos minutos me hubiera entregado a el, por el desespero de saber quién era yo, Pero ahora no, no quería que me tocara sin saber la verdad.—Thomas... Quiero conocer nuestra historia, hemos hablado y no se porque me desterraste con esta marca.Me aleje como pude, limpie mis labios babosos por sus besos intensos que casi me dejaban sin respirar.—No quería decírte
Capítulo 63Narra Robin Todos los días era el mismo tema, la misma presión, Barbara debía ser mi esposa ante los ojos de todos.No quería, a pesar que debo admitir que también era una buena opción para mí, Pero en medio de la difícil situación con los cachorros con la manada, la idea no parecía tan descabellada.Sin embargo no dejaba de pensar en la loba de la máscara, y es que me había robado el corazón, después de la muerte de Mila pensaba que el amor no existíria de nuevo para mí.Buscaba en una loba un poco de esa escencia que me enamoro, de ese aire de perfección que tanto ame de ella, Pero a pesar de intentar buscarla, no la encontré.—Te amo, Pero no puedo seguir viviendo así, Quiero sentir que me aman, que soy parte de una familia, si no decides casarte conmigo, lo mejor es dejar las cosas así, le pedire a mi hermano que me reciba de regreso.Barbara me estaba poniendo un ultimátum, la loba quería dejarme en claro que no esperaría más mi indecisión.—¿Que pasará con nuestro
Capítulo 64Me acerco y puedo observar aquella maldita marca que siempre lastimo al amor de mi vida, sin duda no puede haber dos lobas idénticas marcadas de esa manera.Es Mila, es ella—¡Eres un maldito! Ella es mi esposa y no voy a permitir que me la quites.—Solo me sujeto a las reglas, Flor ahora es mi esposa, porque Mila ya no existe, creo que deberías ir con tu esposa.Barbara se acerca enojada, está pálida por la impresión de ver a su rival —Por favor Robin, no hagas más escándalo las cosas no se van a resolver de esta manera ¿Lo entiendes?Niego con la cabeza, no voy a entender que me quieren quitar al amor de mi vida, me lanzo contra Thomas, lo golpeo con todas mis fuerzas en el suelo, Pero Thomas no se defiende, tiene una sonrisa burlona.—¡No voy a dejar que me la quites! —grito mientras mis puños golpean incesante la cara del maldito.Me odie, no debí confiar en el, no debi dejar de buscar a Mila, esto es en parte mi culpa.Mila grita enojada, pide ayuda mientras me súpli
Capítulo 65—Mia... Mía por fin Mia —Thomas gruñía en mi oído mientras se movía sobre mi.No me sentía para nada bien, pensé que al ser mi destinado borraría las marcas que dejó en mi piel la mentira de Robin, Pero no fue así.Estaba lejos de sentir placer, lejos de sentir deseo, era una enorme sensación de desacomodo.Thomas me tomo de las mejillas, me miró a los ojos, se veía que estaba esperando este Momento —¿Te gusta? Dímelo—Si, me gusta —menti mientras gemia y fingía para que no se sintiera mal, creo que no estaba bien hacerlo sentir inferior siendo el Alfa.Termino, cayó a mi lado con la sonrisa de felicidad, una expresión que distaba de la mía.—¿Cómo estuvo preciosa?—Bien estuvo bien —tartamudee mientras el seguía besando mi cuello —No sabes lo mucho que desee esto, tenerte desnuda a mi lado, note lo mucho que lo disfrutaste, fuimos uno solo.Solo sonrei incómoda, avergonzada y retraída.Me levanté con unas ganas inmensas de tomar una larga ducha, quería quitarme la pesad
Capítulo 66Mila fue cediendo a mis besos, a mis caricias, ella me empezó a quitar la camisa, podía sentir que ella era la más necesitada de mi afecto, sus ojos estaban llenos de lujuria.Caímos sobre su cama, su cuerpo desnudo era una de las mayores obras de arte que había olvidado ver, delinee con mi dedo cada línea como si se tratara de un lienzo.Lo que vivimos en ese momento fue mágico, pasional, delicioso, toda una mezcla de emociones diferentes.Brincaba sobre mi, me pedía caricias y besos, como su me necesitará más de lo que yo a ella y eso era demasiado.Ella empezó a masajear mi virilidad erecta con sus movimientos circulares de cadera, retrasando un poco el impacto del orgasmo.Agarraba sus senos, los metía en mi boca y eso la volvía loca, gruñía llena de placer.La agarre de la cadera y empecé a subirla y bajarla mucho más rápido, me encantaba ver la belleza de su excitación, era una amazona cabalgando.—Te amo Mila, eres... Eres... mia ——Siii ... Yo ... Yo —Ella levanto
Capítulo 67Narra MilaSentir sus besos, sus caricias, ser suya.Hacer el amor con Robin era la experiencia que me hacía vibrar y se sentía tan diferente a Thomas, por lo que sentí en mi corazón que quizás el podía decirme la verdad.Aún temblaban mis piernas en ese momento, fue un orgasmo tan fuerte y real que suspiré nerviosa cuando escuché la puerta cerrarseSara, la sirvienta me trajo de comer—¿Cómo resuelvo mis dudas? Los dos me dan versiones diferentes de mi vida, para los dos yo soy su esposa —No puedo darte esa respuesta aunque se cuál es la correcta, pero tus sentimientos definen esa verdad.Pasaron un par de días Robin me visitaba a a Diario, entre plática y plática mis sentimientos por el empezaban a crecer y muchas de esas veces hicimos el amor de forma tan espontánea que me sentía tan suya.—Ah! Así ... Se siente ... Bien —gruñia mientras la lengua de Robin recorría mi feminidad.Me acerqué a él, Tome en mis manos su erección y la lami como un caramelo—Metelo en tu bo
Capítulo 68La noche era fría, estaba lloviendo, veía caos a mi alrededor, pensé en mi bebé, en mi cachorro así que agarraba mi pancita buscando protección, pero también en mi sobrino.Había echo ese viaje sola, buscando la manera de unirme a Alexandra, de alejarme del riesgo en el que Robin parecía ponernos.Agarre al bebé de mi hermana y lo subí un poco a pesar que la montaña era resbalosa.Un lobo de acercó, coloco al bebé bajo el techo caído del carruaje, me cargó en sus brazos, no pude ver su rostro, solo me alejo del bebé a pesar que le gritaba que no lo dejara allí, era aún pequeño —El estará bien.Me desmaye, o eso creo pues solo recuerdo la siguiente imagen, una cueva cerca aún árbol, empecé a pujar por los dolores de parto.Estaba sola en ese lugar, puje hasta escuchar el llanto de mi bebé, con las manos temblorosas lo agarre y le di un beso en la frente.Después, ese lobo me cortó el cordón y se llevó a mi bebé, grite, intenté defenderme pero me gano, se llevó lo más impo
Capítulo 69Quería tirarme, acabar con mi vida, sentía la enorme necesidad de no sufrir más, de dejar de pensar en que todo estaría bien, la vida me había demostrado que eso no sería asi, que nunca sería feliz.Diego me jalo de la cintura, evitó que cometiera una locura, me abrazo y me suplico no hacerlo —Yo me iría contigo, no puedo perderte después de recuperarte.Me dio un beso en los labios, estaba en shock, coloque mis manos en su pecho y lo aleje, lo mire a los ojos, lo abrace, necesitaba de su refugio.Me cargó en sus brazos y me llevó a Fénix, Robin estaba angustiado, de acercó a mí intentando abrazarme—¡No te acerques! Por favor aléjate —le pedí con la voz quebrada.Diego me subió a la habitación, me quito los zapatos y me llevó a la cama—Por favor no le digas a nadie lo que estuve a punto de hacer, no quiero darles más preocupaciones.—Solo promete que no lo harás de nuevo, la diosa Luna nos dio de nuevo la oportunidad de tenerte, y perderte sería ... No lo podría soporta