CAPITULO 8-DESAHOGO-

Pienses en sus familias, todos necesitamos este dinero que nos dará está pesca señores.

¿Entonces que deciden vamos adelante a todo riesgo y cruzamos la tormenta? o ¿nos devolvemos a esperar que pase la tormenta y nos regresamos con las manos vacías?

Y en ese momento fue que decidimos cruzar la tormenta. Una ola gigante nos volteo, la última vez que vi a mi padre fue esa, salí del agua con su ayuda lo vi a los ojos y el a los míos y ¡¡BUMMM!! Otra ola nos golpeó y nos separó en medio del océano, dure en el agua solo, deshidratado y sin fuerzas, hasta que en el último momento cuando menos lo esperaba, paso un barco mercante y me rescato, un hombre que conocí en ese barco me habló de este país, estado Unidos.

Cuando regrese a mi hogar mi madre estaba muy desbastada, decaída, sin ánimos de nada se la pasaba llorando todas las noches, ya la escuchaba pero nunca me arme de valor para ir a consolarla, hasta que un día fui a su habitación, me contó que no solo lloraba por mi padre, lloraba
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP