Ella salió de su tienda, su respiración era rápida y se estaba poniendo rosada. Respiró hondo y una sonrisa apareció en su rostro. Todavía podía sentir el toque de sus labios sobre los suyos y el toque de sus suaves y fuertes manos en la parte posterior de su cabeza. Sentía mariposas en el estómago. Corrió hacia su tienda donde Carmen estaba jugando con su teléfono. Se sentó sobre el saco de dormir y luego Oliver, Brat, Vence y Ryan entraron en su tienda.

"¿Dónde diablos estabas?" preguntó Carmen enojada.

“Escuché algo en mi teléfono mientras leía arqueología”, dijo Vence. Ella puso los ojos en blanco.

“Déjame decirte por los demás, mocoso, debes estar durmiendo debajo del árbol, Oliver, debes estar buscando algo en el bosque y para ti Ryan debes tener sexo con una puta”, dijo gritando su última oración. Todos la miraban como si hubiera perdido la cabeza.

"¿Estás bien?" preguntó Mocoso.

"¿Okey? ¿Estoy bien? Estábamos en una guer