No puedo evitar aspirar el aroma de mi luna, es demasiado embriagador, hipnotizante. Hace que mi enojo disminuya. Al entrar a la casa encuentro a mi beta bien recostado en los regazos de su mate, fijo la mirada en el piso donde está dibujado un círculo que abarca gran parte de la sala de estar, en el centro reconozco un pentágono. Lo que no reconozco son los símbolos que están dibujados- «Ahora entiendo, porque Daniel ha podido soportar nuestra lejanía»-Me dicen Elric. - «¡Hechiceras! Para mí esto es brujería» -Le contestó a Elric.- «Vamos Julián, tú solo quieres ver, lo que quieres ver, observa bien los símbolos que están en el piso, es evidente que tratan de ayudarlo»- Solo eso me falta, que este tonto lobo, se ponga del lado de estas brujas - «Lo que me doy cuenta es que eres su aliado ¿Acaso no te has dado cuenta de que tratan de quitarnos a Daniel?»- Trato de hacerlo entrar en razón.-Señor Montenegro tiene visitas, al parecer el señor Rentblod no puede estar sin usted- Dice la
Serene La luz se filtra entre las ramas de los árboles, en mi cuerpo puedo sentir la vibración procedente de unas fuertes pisadas, mis manos están sobre una fuerte armadura, sin embargo, puedo sentir en mi espalda y en mis muslos, el formidable cuerpo que me lleva en brazos. Es como si estuviera en un sueño, por más que trato de enfocar no logró hacerlo. El calor que genera este ser es como un somnífero para mí, siento que no puedo escapar de su encanto. - ¿Te sientes mejor pequeña? – Su voz es tan grave que puedo sentir temblor a través de su armadura. Trato de hablarle, pero no me sale las palabras. La oscuridad llega de inmediato, creo que entramos a una cueva o recinto, luego veo unas luces que se mueven por todo el lugar, dejándome ver rocas y raíces, no sé, por cuanto tiempo camino el Oni conmigo en brazos, pero al final se detiene recostándome en una cama, con pieles aterciopelas, Morfeo de inmediato me abraza, desconectándome del mundo real. Oni Cuando vi los ojos de Solan
Continuación del capítulo anterior -Por aquí corazones, es por aquí- Escuchamos que nos llama Adira Hotblood. Sofía nos deja y corre a su encuentro. Llegando al pozo primero. - «Serene no está con ella»- Me dice lo obvio Elric, sin embargo, puedo sentir su rastro en lo más profundo de mi ser. - ¿Dónde está Serene? – Le pregunta Sofía después de recorrer los alrededores, su voz está cargada de zozobra. Para eso ya nosotros estamos con ellas. -Las ninfas de la noche dicen que el guardián se la llevo en brazos, habla que percibieron la esencia de la gran hechicera, están muy asustadas- Dice algo alarmada. -No puede ser Serene, ella no está bloqueada - Le contesta Lea extrañada. -Hablen ya hechiceras… Las dos mujeres me vuelven a ver -Sofía y nosotros merecemos saber a qué nos enfrentamos y en especial si Serene está en peligro- Esa manera que tiene estas mujeres de estar hablando en clave me tiene loco. -Nosotras mismas, no sabemos qué pasa, lo único que conocemos a ciencia cierta
Volviendo al hogar de los lomos del corazón de la tierra…Patricia me guía hacia la casa de mi tátara abuela, al llegar al lugar noto que es bastante acogedor, todo está en extremo limpio, Patricia me cuenta que ellos han tratado de mantenerlo intacto esperando el retorno de la señora. No puedo evitar mirarla confundida-Se lo que piensas ¿Cómo un hechicera va a durar tantos años? -Veo que suspira como recordando – La señora Solana en el último enfrentamiento contra ese monstruo de Anayikim, quedó gravemente herida, la Diosa Luna apareció frente a ella entregándole un don que a ciencia cierta no sé cuál era, pero hizo que mejorara casi de inmediato, a todos nosotros nos extraños, porque ella no suele cuidarnos. Luego la Diosa tierra intervino, no pudimos escuchar su conversación. Pero en los ojos sin luz de Solana había tristeza, para ese entonces su pequeña hija ya tenía como doce o trece años.- ¿Ojos sin Luz? - «¿A qué se refiere con eso?»- Medito mientras espero su respuesta.- ¡O
DanielSentí que algo me levantó como su fuera una pluma, después del impacto, me giro para buscar a mi mate, me horroriza que pueda estar herida, al voltearme veo que está regresando al piso, sin embargo, nunca lo llega a tocar, algo detiene su caída, poco a poco empieza a mostrarse.En el rostro de Sofia puedo ver el miedo, al notarse suspendida por los aires, por el contrario, nuestra luna se observa tranquila, la creatura coloca a las dos en el piso con cuidado. Sofia de la impresión cae sobre en su propio trasero.Nos colocamos en posición de combate, nunca en toda mi vida había visto algo parecido, estoy completamente seguro, que es todos están igual.El ser que esta entre nosotros y las mujeres mide más de dos metros de altura, sus músculos doblaban los nuestros, tenía tremendas garras semejantes a dagas, le ordena a nuestra Luna regresar a la casa, obedece sin titubear, incluso le hace una señal de respecto.Noto que sus tías están tan sorprendidas como Sofia, nuestra luna tie
Continuación del capítulo anterior…Corremos por unos pocos minutos cuando alcanzamos a tres vampiros altos, puedo reconocer el lugar ¡Por la Diosa Luna! ¿Como llegamos aquí? Los desgraciados andan con unas garabinas negras que parecen pájaros de mal agüero, la creatura tenía razón, estos ¡MϟӜϟ! No tiene olor.Esa horribles brujas ¿Tiene tal poder? ¿A qué Diablos nos enfrentamos? Por fortuna Julián es un gran alfa, si no fuera por él hace mucho hubiéramos muerto. Él siempre de alguna forma sabe qué hacer.- «No hay duda alguna. La creatura tenía razón Daniel, no por nada, es el guardián del bosque Hotblood»- Concuerdo con Kohl en su afirmaciónJulián y Elric no pierden ni un segundo, rápido degollando sin piedad a vampiro que se cruza por su camino, de la nada nos caen cuatro más de los árboles.- ¡No era que el Alfa estaba lejos de la manada! - Dice uno de los vampiros algo angustiado.-Al parecer nos dieron mal la información- Como sombras tratan de huir.-Láncelas a ahora- Da la or
Volviendo a la manada Acrisolada Luna Veo a los centinelas que nos acompañaron a las tierras de la Hotblood rodeando a Sandra, me apresuro alcanzarlos, temo que cometan alguna imprudencia. -Señora Sandra tenemos unas dudas- Le dice el más joven de forma relajada, es evidente que le tiene mucha confianza. -Si Sandra, concordamos que solo usted puede resolverlas- Escucho decir al otro, los muchachos están de frente a Sandra, dándome la espalda aún son jóvenes para percibir mi presencia u olor -Si van a preguntar algo del Alfa, saben que necesita pedir su autorización o Julián los degollará- Les digo acercándome, los dos de inmediato de ponen tenso al escucharme -Señor solo vamos a preguntar algo genérico, no tiene que ver con él alfa- Dice el más joven, me hace sonreír, puedo oler que me está mintiendo. Al igual que el alfa, por ser el beta tengo la capacidad de saber bastante sobre los miembros de la manada. -Bueno entonces no creen que les moleste, que escuche, al igual que usted
Continuación del capítulo anteriorNos encontramos en el límite de las Hotblood y los Rentblod. Daniel está preocupado por mi reacción, siento que un calor dentro de mi crecer y no me deja avanzar de la nada le pregunto a Daniel- ¿Estas tierras también son tuyas por derecho? - El me vuelve a ver extrañado, continúo, asumiendo que su leve silencio es una afirmación- ¿Las compartirías conmigo? - No sé porque le dije eso, nunca en mi vida he sido avariciosa.-Por supuesto mujer, todo lo que tengo y llegue a tener es también tuyo- Al escuchar esas palabras, siento como si un peso se aligera en mi cuerpo y puedo pasar sin dificultad ¿Qué Diablos fue eso? Estoy conmocionada, pero tranquila. En especial al sentir la calidad mano de Daniel guiándome.-Sofía observa estos árboles- Me dice Daniel con un toque de alegría en su voz - Hace muchos años nosotros, Julián y yo sembramos a escondidas, con la fe de que se parecieran a los de ustedes, te confieso que los dos siempre hemos deseado entrar