—Me gusta verlos sonreír —habla don Lupe trayendo consigo nuestros cafés —¿qué les preparo para desayunar? —nos pregunta dejando la carta, dejamos de reír para pedir nuestro desayuno, le decimos lo qué queremos y don Lupe nos deja y volvemos a reír.
—Ya en serio, creo que tú hermana tiene razón, son tan buenos que deberías publicarlos, solo es de buscar un buen editor —le digo llevándome mi taza de café a la boca. —¿Tú crees? —me pregunta y asiento confirmando lo que dije —lo pensaré, mis pinturas se han vendido bien, por cierto el próximo mes hay una exposición, ¿te gustaría acompañarme? —me pregunta y casi me ahogo con el café, son Lupe me salva dando una palmadita en mi espalda en lo que nos ponen nuestros desayunos. —Claro, solo me dices la fecha —le digo limpiándome con la servilleta, no esperaba que ella me pidiera acompañarla. Desayunamos entre plática, risas, me sentí a gusto con ella, no quería que el tiempo corrieCon papá nos hicimos cargo de su funeral, todo fue rápido, no es que no sienta nada, es mi madre lo sé, no se merecía una muerte así también lo sé, no sé que pasó y dónde está el supuesto novio si se supone que iba con ella, bueno eso es cosa que no me interesa saber, le dimos cristiana sepultura en dónde solo mi familia me acompañó y regresamos a casa. En mi habitación me quedé pensando, como fue su vida, que hizo con ella que la haya llevado a derrochar todo el dinero que el abuelo le dejó, como fue que dejó que ese hombre la manipulara porque eso pienso que la manipuló a tal grado de dejarla en la calle, acabar con todo lo que tenía, me di un baño, no baje a cenar estaba tan cansado que me quedé dormido. —¿Dónde estás? No te escondas, sal de ahí, —grito corriendo por la arena y buscando por las rocas que hay en ella, —¡aquí estás, te encontré! —la tomo por la cintura dando vueltas con ella riendo a carcajadas. —Está bien me rindo, bája
—¡Ah! Se me olvidaba, ahí está la ubicación, está todo listo como lo pediste, en cuanto llegues los van a atender como reyes —me dice Zully enviando mensaje de su teléfono y hacer vibrar el mío —no digas nada, después me das las gracias, —dice dándome un beso y subiendo a su habitación, mamá me mira y sonríe también caminando y subiendo las escaleras.Abro el mensaje que me envió Zully, sonrió al ver la ubicación del lugar y sé que a Clarita le va a gustar, cierro el mensaje y abro el contacto de ella.—Hola buenas noches no sé si estás despierta, pero me gustaría invitarte a un paseo mañana ¿puedes? —lo mando y guardo mi celular en el bolsillo de mi pantalón, subo a mi habitación a descansar.Entrando a mi habitación escucho el sonido del teléfono y lo tomo con emoción de saber si es ella la que me contestó, me desilusione al ver que es un mensaje de Tadeo, lo veo cuál me dice que me envió información a mi correo, abro mi laptop inmediatamente para ver lo
—¡Qué hermoso lugar, me encanta! —emocionada me dice y le doy la mano para ayudarla a bajar del auto —¿Allá está la hacienda de tus abuelos, cierto? —me pregunta sorprendida al alcanzar a ver la hacienda de los abuelos.—Así es, Pero no iremos a la hacienda, sí que iremos hasta allá —le señalo la loma a la cual vamos a subir, —¿lista? —le pregunto y le tomo la mano para empezar a caminar.—Estoy lista para caminar —dice con una sonrisa y acomodando su mochila en su hombro —respirar aire puro es lo mejor —vamos platicando por todo el camino, subimos la colina y al llegar corrió dando vueltas, me quedé parado viéndola lo contenta que se veía.—Joven Luciano, todo está listo, su abuela envío unos aperitivos —me habla la señora Soledad señalando la mesa decorada con mucha comida y frutas.—Gracias señora Soledad, es muy amable —le digo y ella se despide antes de retirarse con las otras dos personas que le ayudaron.Fui hacia donde
Estamos en el aeropuerto juntos con mis papás y mis tíos esperando a los Urrutia que venían en camino, Clarita al verme ahí parado se acercó a mí y me abrazo, su papá nos quedó viendo al igual que mi familia.—Si ya estamos todos, vamos subiendo al avión, un viaje nos espera —dice la mamá de Clarita al ver mi incomodidad —hija tú vienes conmigo —le dice tomando su brazo y haciéndola caminar.—Pero, mamá —refuta Clarita y voltea a verme con cara de súplica —está bien —dice resignada al ver que no dije nada.—Buenas tardes, joven Luciano —me dice su papá sacándome de la incomodidad que sentía —espero ayer se hayan divertido, aunque ya me contó mi hija quiero escucharlo de usted mismo —habla y le asiento con la cabeza, mis padres no saben de qué habla y mi tía Sara sonríe y mueve la cabeza.—Porque no subimos y llegando hablamos, —le digo con una sonrisa nerviosa —solo le digo una cosa señor Urrutia que esto no va a hacer que lo que siento cambie —le
ClaritaDesde que Luciano me llevo a ese paseo y me dio una muy bonita sorpresa, el paisaje, la mesa con bocadillos y ver la puesta del sol tomando vino sin alcohol, si era vino sin alcohol porque ninguno de los dos podemos tomar debido a los medicamentos que tomamos, bueno en mi caso hay algunos medicamentos que no me permiten tomar alcohol.Bueno les decía, en ese paseo sorpresa que me dio él me quería decir cosas y no se animaba aunque hablamos y nos contamos cosas para conocernos, yo me imaginaba que quiera pedirme que fuera su novia, Pero como no se animaba, pues tuve que hacerlo yo y fue tan gracioso, que solo de acordarme me río ji, ji, ji, ji.—¿Te gusto? —le pregunto y le dije otras cosas que él me puso su mano para detenerme y seguí hablando —si yo te gusto y tú me gustas ¿quieres ser mi novio? —le pregunté y abrió los ojos —luego me dijo que eso él quería proponérmelo, de sorpresa me acerque a darle un beso chiquito en sus labios y cada que tení
Luciano—¿Así se siente cuando un hombre habla con los papás de la chica que le gusta? —le pregunto a mi papá que está sentado en el sillón del lobby del hotel.—¿Estás nervioso y te sudan las manos? O ¿quieres salir corriendo, pero tus pies están clavados en el piso? Si, así se siente —me dice mientras yo asiento a las preguntas que hizo, —es normal porque todo lo que sientes es por la chica que te gusta y quieres dar todo por ella, pase lo que pase o digan lo que digan tu familia va a estar contigo y te apoyaremos —me dice levantándose y poniendo su mano en mi hombro.—Ya viene mamá y los tíos —le digo señalando cuando se abre el ascensor y salen, atrás de ellos vienen los papás de Clarita junto con ella y mis ojos se iluminan, pero a la vez siento temor.—Buenas noches —saludan los señores Urrutia, Clarita me queda viendo y me sonríe bajando su mirada.—Por acá —les señala papá y toma del brazo a mamá, yo voy detrás de ellos, cuando si
Me desperté con los toques de la puerta, di el pase y era mamá, venía con una sonrisa, me senté en la cama frotando mis ojos para poder despertar bien.—Buenos días mi amorcito, ¿cómo dormiste? —me dice dándome un beso en la frente, —vine a decirte que te arregles, y bajes a desayunar, después iremos a playa Balandra, no tardes ya todos esperan en el restaurante —me dice abriendo la puerta.—Está bien madre, en un momento bajo —le contesto y me levanto para entrar al baño, mamá se va y me deja para que me aliste y baje a desayunar con ellos.Ya listo salgo de mi habitación, encontrándome con Clarita saliendo también de la suya, me detengo a esperarla y bajar juntos, ella llega y nos saludamos con un beso chiquito en los labios.—Buenos días, Luciano —me saluda y entramos al ascensor tomado de las manos.Llegamos al restaurante y saludamos a todos, que ya estaban en sus respectivos lugares esperando por nosotros, pedimos nuestros desayuno
Llegué a la empresa justo a tiempo para la reunión con estos clientes, Zully explicó todo sobre la propuesta y también ellos explicaron lo que nos proponían, a decir verdad nos convenía este contrato, solo que hay algo que me hace ruido y tengo que investigarlo, después de dos largas horas les hice saber que analizaría unos detalles y que luego les tendría una respuesta, nos despedimos de esos clientes y junto a Zully y mi primo entramos a mi oficina.—Hay algo que no me convence de ellos —dice mi primo y me doy cuenta de que no soy el único que se dio cuenta —aparte de como ese idiota veía a Zully comiéndosela con los ojos, su balance no me convence —dice y volteo a ver a Zully quien está callada y luego da un suspiro.—Pense que eran alucinaciones mías, me sentía incómoda con la mirada de ese hombre —menciona Zully y tomo el teléfono, le hago una llamada a Tadeo y le explico, vamos a esperar a que llegue y poder investigar bien a fondo a estos sujetos.—