Llegué a la cafetería y la jefa nos citó a todos para hablar sobre algo importante al final del día. 

Muchos pensaron que nos iba a aumentar el sueldo o que tendríamos vacaciones.

La mayoría pasó la tarde haciendo especulaciones sobre lo que podría pasar, hasta que llegó la hora de reunirnos después del trabajo.

-Chicos, estoy muy agradecida por su duro trabajó, cada uno es una pieza importante en la cafetería y sin ustedes no hubiera funcionado tan bien como hasta ahora.

Todos le agradecimos sus palabras.

La verdad no me gusta el rumbo que estaba llevando está conversación.

-Lamentablemente tendremos que despedirnos- todos estábamos procesando sus palabras- tengo que regresar a mi país de origen y no puedo seguir haciendome cargo de la cafetería desde lejos.

- Y ¿por qué no la traspasa?- le pregunt