Despues de este gran suspenso por parte de Guillermo, este decide comenzar a hablar con ella sobre los inicios de su vida, los cuales comenzaban con el matrimonio de sus padres, dado en el año de 1965, conformado por Catalina Rojas una joven de 20 años en aquel entonces, hija de Politicos iportantes del pais, proveniente de una familia de clase alta, y Abelardo Arango, un hombre que le llevaba unos 10 años de edad, heredero de ¨Arango Company¨, una empresa mexicana fundada a inicios de los años 20.
Este matrimonio en la decada de los 60s era uno de los mas influyentes y pderosos de la nacion, debido al gran poder adquisitivo y social que albergaban de manera nacional e internacional, lo cual, terminaba brindandoles grandes oportunidades a ellos y sus hijos, los cuales fueron el trio de trillizas con nombres de Ramona, Rene y Rosa, tres mujeres nacidas en el año de 1968, contando con un aspecto palido, delgado, cabello rubio y ojos azules, apodadas las tres ovejas blancas frente a la sociedad, quienes le llevaban 5 años de edad a Guillermo, nacido un 23 de Febrero de 1973, el mas amado y esperado por la familia, gracias a que, al nacer varon, seria el que tomaria el cargo de todas las empresas de los Arango Rojas, seria uno de los mas importantes hombres ue figuraria su imagen ante el publico en nombre de la familia.
Esta peculiar familia frente al ojo público era admirada, amada y comentada, quiénes siempre se mostraban unidos y cariñosos, pero en lo más privado de su hogar, se desataban grandes infiernos; Que iban desde discusiones familiares, infidelidades por parte de Abelardo con empleadas domésticas, peleas, y más. Cosas que generaron una personalidad hostil, clasista y celosa en Catalina y sus hijas, quienes en la actualidad, no soportaban mezclarse con Personas de “distinta Clase”, hecho que afectaba mucho a Guillermo, al cual le habían hecho terminar diversas relaciones sentimentales por esta razón socioeconómica.
Así que se podría decir que la vida de Guillermo se desencadenó mal en el ámbito psicológico y emocional, creando traumas desde muy pequeño y una especie de miedo-respetó hacia su madre.
No fue hasta él año de 1993, cuando él tenía 20 años de edad que las discusiones terminaron, debido al fallecimiento de su padre a la edad de 62 años, causada por un infarto al corazón después de haber sido encontrado en la cama con su secretaria. Este hecho marcó un punto en la vida de todos, algo indeseable que lidió la familia, desde ese día Guillermo tomó nombre y poder de todo, dejando a sus hermanas como socias y convirtiendo a su Madre en la que tomaba y autorizaba todo, desde aspectos laborales hasta personales de sus hijos.
La señora Catalina creó un carácter fuerte, déspota y clasista, que emanaba creencias de superioridad y ahuyentaba a cualquier persona que estuviera cerca; Así que, las Trillizas y Guillermo, jamás habían podido casarse por culpa de la oposición de su mamá. Un hecho sumamente lamentable que amargaba sus vidas. En fin, así surgieron los 44 años de vida de Guillermo, quien aún era manejado por su anciana madre y juzgado en cada acto por sus hermanas mayores, quienes también afectaban en cualquier aspecto de su vida.
De esta manera, Él contaba aún más detalles con dolor, tristeza e impotencia donde a Evangelina solo le quedaba escuchar y tratar de comprender su situación, la cual le parecía algo extraña, fuerte y triste.
Pasaron más de 30 minutos de historia sobre la Familia Arango Rojas, hasta que por fin acaba Guillermo, quien toma el resto de vino que había en su copa y se seca una pequeña lágrima que se encontraba en su ojo; Evangelina piensa sobre lo que le dirá al respecto de su vida, y después de unos segundos de analizar su caso, ella se pone de pie, le da un pequeño abrazo reconfortante y le dice:
- No creí que tu vida hubiera sido tan fuerte y difícil, con tantos problemas familiares, no me imagino lo duro que fue… gracias por abrirte conmigo y contarte sobre esto Guillermo, de verdad lo aprecio y comprendo tu situación.
- Gracias a ti por escucharme, siento que me desahogue por completo y me siento un poco tranquilo conmigo mismo, realmente te conté sobre cosas muy personales, espero que guardes estos secretos de mi familia-Decía Guillermo mientras la abrazaba-
- Claro, confía en mi, no te preocupes…
Ellos se abrazan por un minuto más, para después volver a sus lugares, el secar sus pocas lagrimas de sus ojos y ella mirarlo con comprensión, para así, seguir conversando:
- Disculpa que haya caído en el llanto, creo que no es algo que un hombre debería de hacer-Decía apenado Guillermo-
- Es bueno que llores, así logras curar tus penas… cualquier persona puede y tiene el derecho de llorar, no importa si es hombre o mujer, ¿Lo comprendes?
- Claro Evangelina, solo que con todo esto recordé a mi padres, ambos con sus frases sumamente machistas y misóginas… por fortuna ese tipo de pensamientos no se heredaron en mi.
- Me alegro que hayas roto la cadena de tu familia sobre ese pensamiento retro… tengo que decirte Guillermo que eres un ejemplo de superar los golpes de la Vida, te respeto y admiro en lo que te convertiste, un hombre Respetuoso, amable, y atractivo haha-Dice de forma ligera Evangelina, tratando de alegrar y sentir bien a su acompañante-
Él le muestra una sonrisa y le dice:
- No me equivoque con esta cita, sabía que eras una gran chica y mira, me has hecho reír después de sufrir, ¡que bella de verdad!
- Yo feliz de que esta cita se convirtiera en satisfactoria para ambos, estas horas junto a ti las he disfrutado al máximo.
- Yo opino lo mismo y te agradezco demasiado… me encantaría que después de esto, vuelvas a aceptar mi invitación, pero ahora en otro lugar…-Dice contento Guillermo-
Evangelina lo mira felizmente, mientras piensa en su cabeza en que a dado al blanco perfecto, un hombre atractivo, mayor y adinerado fijándose en ella, era un sueño realidad, así que esta decide asentir con la cabeza y responder positivamente a él.
- Si, tendremos muchas citas más si es que Dios nos lo permite.
- Así será, si Dios quiere…
Ambos se sonríen, para después disponerse a salir del lugar, no sin antes que, él pagara la cuenta, ya que este lo hacía en modo de cortesía y caballería, cosa que le agradaba y era bien vista por ella.
Finalmente para las 12:30 am del Domingo, después de pasar una velada magnífica, Guillermo deja a Evangelina en la puerta de su hogar, dándole un fuerte abrazo, beso en el cachete y diciéndole como despedida:
- Me fascinó pasar la noche contigo, gracias por la velada tan linda e inspiradora que me brindaste Evangelina.
- Gracias a ti, por todos estos regalos además que uno de ellos fue tu compañía, la cual es la más valiosa. -Respondía con entusiasmo Evangelina-
- No es nada querida mía, seguiremos en contacto, espero pronto volvernos a ver…-decía esperanzado Guillermo-
- Así será, no lo dudes.
Ellos terminan de despedirse, de una manera muy cercana y cómoda, como si fueran una pareja amorosa; Ella entra a su hogar feliz con una gran sonrisa, se recuesta en la cama y comienza a ver todas las fotos que se tomo con su acompañante esa noche, además de estar feliz con los nuevos regalos que le había dado, que iban desde unos chocolates, flores y las Joyas obviamente.
Mientras que él, regresa a su hogar en su camioneta, de manera ilusionada miraba a la ventana durante el camino e imaginaba el tener una relación al menos amistosa con aquella especial Evangelina, a la cual sintió tan fabulosa que, desde ese día se colocaba como meta el crear algo con ella y ser más cercanos.
Parecía ser que la cita entre estos dos, los había dejado más que satisfechos de forma espiritual y emocional, lo que daría inicio a un gran interés el uno por el otro que aseguraba muchas más citas maravillosas en el futuro.
Pasan los días en la Ciudad de México, exactamente hoy es lunes cuatro de abril, día en el que Evangelina acudirá a su Universidad, la cual es la UNAM, allí hará entrega de su tesis además de ver a sus amigas, y contarles a ellas sobre el hombre nuevo que había entrado en su vida. Esta mañana, ella se vestía con unos jeans azules De mezclilla, un top blanco, unos tenis Nike blancos, Pequeñas cadenas en color dorado, un maquillaje sencillo y natural que consistía en simple rubor, Máscara de pestañas e iluminador. Ella Lucía muy bonita, con su largo cabello suelto, llamando la atención de quien la viera debido a su belleza. Para las 9 am ya se encontraba en el salón de clases, lugar donde estaban sus amigas Antonieta Mendoza, una joven de 23 años de edad, mejor amiga de Evangelina, amable y aprovechada qué provenía de muy buena familia, tenía una belleza un poco exótica debido a sus rasgos asiáticos, que conformaban una apariencia de piel muy blanca, ojos rasgado en color negro, labi
Aquel mismo día por la tarde, se encontraba Guillermo Arango junto con sus tres inseparables amigos y socios llamados, Esteban Benavides, un hombre de 50 años de edad, proveniente de buena familia, su aspecto físico era común, cabello oscuro, piel blanca, ojos grandes y complexión media, el cual era el mejor amigo de Guillermo que compartía los mismos gustos con él , además de ser su fiel confidente; También se encontraba Carlos Montenegro un hombre de 50 años de edad, amigo de la infancia de Guillermo de complexión robusta, estatura de 190cm, poco agraciado que era conocido por sus habilidades en la negociación, y Josué Zepeda, un hombre de 45 años de edad, atractivo, estatura de 185 cm, cabello pelirrojo, piel con su tono rosado, complexión atlética, él era un gran socio de Guillermo que poseía una gran fortuna además de tener una personalidad radiante. Este cuarteto de hombres tenían en común diversas cosas, como el ser solteros, nunca haberse casado, provenir de grandes familias
Pasan los días, hoy es Viernes 07 de abril, día en el que Evangelina y Guillermo vuelven a acordar para salir un rato juntos, la cita hoy sería en una plaza comercial, tenían planeado comprar algunas cosas, comer algo y caminar por el lugar, con el finde platicar un poco más sobre ellos y sus intereses, además de pasar ella tarde de manera cómoda, tranquila y feliz en un lugar familiar. Es así que, para las 03:00 pm, hora en la que se citaron, Guillermo pasaba por Evangelina a la universidad en su lindo auto un Audi en color blanco, descapotado y seminuevo, ya que este solo lo usaba en citas especiales como la de ahora. Al llegar en su auto, todos lo observan, un hombre mayor, adinerado y escoltado(Con una camioneta de color negro con sus guardaespaldas iba detrás de él, siguiéndolo) , llega a la entrada de la universidad, donde Guillermo espera unos minutos con un atuendo ya más casual, que se conformaba por simples pantalones cortos en color marfil, que dejaban ver sus atléticas
De tal manera que al estacionar el auto en el estacionamiento, Guillermo se observa en el espejo retrovisor, se da cuenta del desastre que tiene en el rostro y le dice bromeando a su compañera: - Mira, ¡Como me has dejado! Todo embarrado de dulce en los labios, ahora tendrás que limpiarme haha - Oh, lo siento Guillermo no me percaté de lo sucedido, dime… ¿Te gustaría que lo hiciera con besos o servilletas?- preguntaba coquetamente Evangelina- - Excelentes opciones querida mía, y por mi me gustaría que lo hicieras con tus dulces labios en los míos, para que también probaras la dulzura que has dejado en mi… pero creo que lo más correcto sería con una servilleta. - Pues, yo decidiré eso… -Decia Evangelina mientras lo miraba coquetamente- En ese momento, ella procede a acercarse lentamente hasta su rostro, quedándo frente a frente, a tan solo centímetros de unir sus labios, cosa qué hace sentir el ambiente tenso en el buen sentido, ya que fluía una gran química y atracción en el
Después de mucha diversión, caminando y riendo por los pasillos de aquel lugar, sonó el reloj y vieron que eran las 06:00 pm, hora en la que él, debía regresar a su oficina, acto que entristeció a ambos pero, que tendría una solución, ya que Guillermo le propondría algo a su querida acompañante:: - Supongo que ya es hora de despedirnos, y no me gustaría hacerlo… quisiera encontrarme muchas más horas junto a ti… así que se me ha ocurrido algo querida Evangelina, con el fin de poder seguir pasando aún más tiempo juntos.-Dice con ilusión Guillermo- - Ni a mi me gustaría que acabe esta cita… cuéntame, ¿Qué es lo que se te ha ocurrido?-Pregunta curiosa Evangelina- - Pues tal vez sea algo muy raro pero, quisiera que me acompañes a mi oficina, bueno, a mi empresa, así puedes pasar el resto de la tarde junto a mi, yo te llevaría más noche a tu hogar y ya que estamos allá, te mostraré toda mi compañía, eso puede ayudarte para conocer más de cerca a las empresas, ¿Qué te parece? ¿Aceptas?
Termina Evangelina sentada sobre un taburete disfrutando de una deliciosa Margarita muy ligera que le había preparado el Bartender personal de Guillermo llamado Elvis Castro, un joven de 25 años de edad, complexión delgada, estatura de 175 cm, piel morena, cabello oscuro muy largo rizado, ojos grandes, labios carnosos, nariz pequeña, cejas amplias, y un poco de maquillaje para cubrir el brillo de su piel, además de vestir con un traje formal negro, junto con su mandil que llevaba escrito su oficio(Bartender), junto con su nombre completo. Este hombre era graduado de una gran universidad de Gastronomía con especialidades en Preparación de bebidas, que lo hacían ser un chico muy bueno y apreciado por el mismo Guillermo, quien le tenía una confianza muy grande al punto de, dejar a su acompañante Evangelina junto a él, para que platicaran y se distrajeran mientras que Guillermo arreglaba algunos pendientes que tenía para ese día. Es así como estos dos desconocidos comienzan a entablar un
Finalmente para las 08:00 pm, después de arreglar perfectamente sus pendientes empresariales y personales, Guillermo vuelve al Área de recreación, donde encuentra a Evangelina y Elvis, sentados de manera cómoda el uno junto al otro en uno de los sofás del salón,?cosa que no la ve extraña pero, esté al entrar les dice con voz firme para asustar:- Hola, he vuelto… veo que estás muy cómodo ¿No Elvis? - Hola señor, solamente entretenía a su acompañante, y si me disculpa, procederé retirarme a mi lugar-decía con pena y rapidez Elvis- - Claro, vuelve al mini bar. De esta manera, Elvis se levantaba de su asiento apresurado, esperando que Evangelina no contara ningún chisme o anécdota que le fue revelada aquella noche, yendo rápidamente con nervios a su lugar, que quedaba a 10 metros de los sofás. De esta manera, al ya no encontrarse Elvis junto a Evangelina, Guillermo decide sentarse al lado de ella y preguntarle con interés: - ¿Cómo la has pasado con el Bartender? ¿Fue de tu agrado su c
La acción perpetrada por Guillermo, le resultó desconcertante y satisfactoria a su quería Evangelina, quien recibió con gusto el beso que este le había propinado lentamente, lleno de dulzura y amor; Fue así como, esta pareja de conocidos con demasiada química se unieron en un sutil beso, con los ojos cerrados, llenos de ilusión y gusto en su interior. Los labios de ambos se encontraban suaves y ligeramente húmedos al encontrarse en contacto, se sentía el calor de ambos que hizo que, se situaran algunos leves roces de manos por sus pieles, las cuales jiñan desde pequeñas caricias y toques al área de la cintura de Evangelina, mientras que esta, acariciaba el cabello y rostro de Guillermo. El ambiente se comenzaba a tornar fogoso en los pocos segundos de dulce pasión que duraba el beso, este acto duro unos pocos minutos los cuales disfrutaron, para después separarse de manera suave el uno del otro y así, sonreírse mutuamente, reír de manera dulce y decirse: - Jamás creí que esto fuera