Christian siempre había trabajado diligentemente y realmente no parecía tener ninguna mala intención. Sin embargo, de repente, Carmen recordó las palabras que Ignacio le había dicho en el pasado. Cuando Christian llegó a un acuerdo de cooperación en materia de hierbas medicinales con la familia Castro, Ignacio había afirmado que Christian podría tener ambiciones desmedidas y que podría estar conspirando con la familia Castro para tomar el control de la empresa de la familia López.

¡Esto se alineaba con las preocupaciones de su abuelo y su padre!

Además, en la última reunión en casa de Ernesto, Lucía le había lanzado una mirada desafiante, lo que demostraba que tenía intenciones hostiles hacia ella.

Todo esto demostraba que Christian no era tan simple como parecía superficialmente. Por un momento, se dejó influir por las difamaciones de Ignacio y se volvió más sospechosa de las motivaciones de Christian.

—Christian, aprecio todo lo que has hecho por la empresa en este tiempo, pero ta