Christian pensó al principio que eran enemigos atacando, su corazón se tensó y estaba a punto de prepararse para la defensa, pero pronto reconoció a algunas personas del otro lado.

Luego miró más de cerca y los reconoció inmediatamente. Eran los seis guardaespaldas de Carmen.

—¡Saludos señorita!

—Llegamos tarde, por favor perdona nuestra tardanza...

Los seis guardaespaldas se arrodillaron uno tras otro frente a Carmen, con caras muy feas.

Debido a que Carmen no les permitía acercarse demasiado y el área turística era un lugar público con mucha gente, generalmente no era donde los delincuentes cometían crímenes. Por lo tanto, algunos de ellos estaban relajados y no habían estado demasiado cerca vigilando desde afuera todo el tiempo.

Fue hasta que Christian, Joaquín y otros comenzaron una pelea ruidosa que finalmente llamaron su atención.

Afortunadamente, Christian protegió completamente a Carmen por ellos. De lo contrario, si Carmen hubiera tenido algún problema, probablemente habrían s