—Víctor, concéntrate y sigue la técnica secreta que te enseñé, ¡no te distraigas!— Christian le recordó oportunamente.

—Sí, está bien— Víctor inhaló profundamente, calmó su mente y bajo la guía de Christian, desplegó la técnica que podía despertar el potencial del cuerpo humano, comenzando a absorber la energía de las píldoras de verdadera esencia una por una.

La energía de las píldoras de verdadera esencia era extremadamente pura y se disolvía en su boca, transformándose en tres corrientes cálidas de energía verdadera que fluían hacia el corazón de Víctor.

Al principio, Víctor pudo suprimir a duras penas la energía de las tres píldoras de verdadera esencia mediante la técnica secreta. Sin embargo, a medida que estas tres corrientes de energía verdadera se acumulaban y chocaban, empezó a perder el control y hasta su energía verdadera interna se volvió caótica.

En un momento, su frente estaba cubierta de sudor frío, su expresión se volvía cada vez más dolorosa, y comenzaron a manifestar