—Bueno, ahora todo está muy claro.

—Estas píldoras seguramente son una trampa establecida por Vitalis Farmacéutica en colaboración con la familia Romeo. Todos deberíamos irnos—insistió Genaro.

—Sí, vámonos—Todos los hijos de familias importantes habían venido siguiendo las órdenes de sus familias para investigar la autenticidad del potenciador vital. Ahora que sabían que todo era una verdadera farsa, no tenían motivos para quedarse más tiempo en ese lugar.

Al ver que la gente se preparaba para irse, Lucía y Carmen estaban visiblemente angustiadas, sin saber qué hacer. Finalmente, le lanzaron una mirada de súplica a Christian, quien estaba de guardia en el perímetro.

Christian, que había trabajado duro para organizar el evento y había solicitado la ayuda de la familia Romeo para su exitosa promoción, se sentía frustrado al ver cómo la situación se deterioraba debido a la intervención de Genaro. Aunque estaba bastante molesto, se dio cuenta de que no podía hacer mucho en esta situación.