CELIA:Llego a la empresa de Víctor y mi secretaria Verónica me espera. ¿– Hace a cuánto tiempo salieron?Le pregunto. – Hace menos de una hora señora. Dice pasándome unos auriculares. – Ya te dije que no me llames señora, nos conocemos desde hace años vero.– Lo sé, pero no puedo evitarlo. Dice con una sonrisa. Vero y yo nos conocemos desde que empecé a vivir con Patri, la chica siempre ha sido muy buena en la tecnología y no dudé en ofrecerle trabajo. – Bién vero la inútil de mi hermana se encuentra aquí, así que cualquier cosa me avisas y trata de entretenerla hasta que salga, al igual que Víctor si regresa me lo haces saber de inmediato. – No sé preocupe estaré atenta a cualquier cosa.Dice colocándose unos auriculares igual que los míos. – Perfecto, encargate de las cámaras.Digo para dirigirme a la oficina de Víctor.Media hora después he revisado todo y no encuentro nada que comprometa al idiota de Víctor en negocios ilegales y estoy más que segura que él está metido e
CELIA :Entro a mi despacho y mi pequeño me espera sentado.Me siento a su lado y le cuento todo lo que está pasando y el por qué me tengo que casar.Angel me mira atentamente entendiendo todo lo que le digo... Aveces parece un adulto.– Entonces ¿Está bién con que Máximo se convierta en tu padre? No haré nada que no quieras.Hablo sin dejar de mirarlo.Mi pequeño se coloca de pies y me abraza.– Mami, sé que todo lo que haces es por mi bién y por eso siempre estaré agradecido, la verdad no tengo problema con que Máximo se convierta en mi padre, se que el es una buena persona y te protegerá de todo.Dice sin dejar de abrazarme.Sonrío y le abrazo de vuelta.– Te amo mi pequeño, eres la luz de mi vida.Digo para besar su mejilla y empezar a hacerle cosquillas.– JAJAJA, mami... Ya... JAJAJA.Me detengo cuándo ya es suficiente.– Necesito que busques a Patri, Marcos y Hugo, dile que quiero hablar algo urgente con ellos.Le digo a mi pequeño.Este asiento y se va.Minutos después entran a
CELIA :Máximo conduce sin dejar de sonreír.¿– Que te hace tanta gracia?Le pregunto, y él me mira sonriendo. – Estoy feliz, eso es todo.Dice mirándome de reojo. ¿– Por qué estás tan feliz? Le vuelvo a preguntar intrigada. ¿– No es obvio? Eres mía Celia, mi mujer, mi señora... Señora Cooper... Que lindo se escucha ¿No? Siento mi cara caliente. – Que cursi te has vuelto Máximo. Digo volteando mi cara hacía otro lado para que no vea lo roja que estoy. Escucho su risa. – Se que te encanta cuando me vuelvo cursi... Todo sea por verte feliz. Sonrío mordiendo mis labios, me gané la lotería con este hombre. Máximo me lleva a un lujoso residencial. – Waoo, ¿vives aquí? Pregunto. – Así es, todo este residencial me pertenece... Así que bienvenida a mi humilde hogar. Empiezo a reírme cuándo dice humilde, es la misma palabra que utilice cúando fue a mi mansión. – JAJA, esto de humilde no tiene nada. Digo para colgarme de su brazo y entrar. En el ascensor Máximo marca el último
CELIA :Los días pasaron y mi relación con Máximo iba creciendo cada vez más.En estos momentos me encuentro almorzando en la empresa de Víctor junto a los demás empleados, cuándo Carolina se sienta junto a mí.¿Ésta mujer no se cansa de molestar?– Hola Celia ¿Cómo estás?– Muy bien, gracias por preguntar... ¿Que quieres Carolina?Digo con una sonrisa fingida.Élla me mira mal, luego sonríe.¿– Ya le enseñaste a tu hijo quién es su padre? Creo que merece saber eso... ¿Sabes? Es el futuro heredero de esta empresa.Habla un poco alto haciendo que mi hermana y algunos empleados de la empresa escuchen.Esa m*****a.Le iba a contestar pero soy interrumpida.– Disculpen... ¿Usted es la señora cooper?Habla un señor con pinta de abogado dirigiéndose a mí. – Así es... ¿Que desea?Digo dirigiendo mi atención al señor.– Disculpe por interrumpirla señora Cooper, mi nombre es Andrés White, su esposo me envió para hacerle entrega de algo.Dice con una sonrisa amable. – Claro, venga a mi despach
MÁXIMO :Llego a la mansión de Celia lloviendo a cántaros junto a un ramo de rosas rojas, sé que le van a encantar.Tomo las copias de las llaves que Celia me dió y abro la mansión con una sonrisa. – Cielos, creí que era Celia que había llegado. Dice Patri acercándose a mí con cara de preocupación. Frunzo el ceño ¿– Celia no está aquí? – Fue al super hace unas horas y aún no ha llegado... Es raro ella nunca tarda. Dice suspirando. ¿– Le has marcado? Pregunto. – Si, pero su celular está fuera de servicio.Le entrego el ramo de rosas a unas de las chicas de servicio y marco el celular de Celia. ¿– No suena? – No, al parecer dónde ella se encuentra no hay señal... Digo sintiendo un mal presentimiento de esto. ¿– Crees que le pasó algo? Le dije que contratara guardaespaldas y no me hizo caso. Habla Patricia desesperada. – Tranquila Patricia, Celia es una mujer muy fuerte nada va a pasarle... ¿Dónde está Angel? Le pregunto. – Celia anda con Angel... Eso es lo que más me pr
CELIA :Abro los ojos lentamente sintiendo un fuerte dolor de cabeza.Intento moverme, pero el dolor en la costilla me hace gemir de dolor.– Espera, no puedes hacer movimientos bruscos por ahora.Se aparece Máximo frente a mí.Miro a mi alrededor y me doy cuenta que estoy en un hospital.¿– Dónde está Angel?Pregunto preocupada, con la voz algo ronca.– No te preocupes Angel está bién, está junto a Patricia.Dice acercándose a mí para tomar mi mano y entrelazar nuestros dedos.¿– No le pasó nada? ¿No tiene alguna fractura o un mal golpe?– Está en perfectas condiciones, solo algunos rasguños nada más.Dice besando mis manos con cariño.Suspiro de alivio.¿– Cuántos tiempo llevo aquí?Pregunto.– Solo algunas horas... ¿Sabes? Estaba muy preocupado por tí... Pensé que algo malo te había pasado, y cuándo te encontré desmayada junto a nuestro pequeño... Pensé lo peor... La verdad estaba muy asustado y con miedo de perderte.Dice mirándome de manera profunda y sincera.Tomo sus grandes ma
MÁXIMO :La chica rubia nos mira con la boca abierta y yo miro sorprendido a la señora que acaba de llegar... Es el retrato de Celia versión mayor.La señora mira a Celia y le sonríe.– Tenías tiempo que no venías hija.¿Hija? ¿Pero que está pasando aquí?Mi cerebro empieza a trabajar de una manera rápida.– Tenía muchas cosas que hacer... ¿Cómo estás madre?Dice para acercarse a ella y darle un corto abrazo.¿– De verdad eres su esposo?Me pregunta la chica rubia mirándome de arriba abajo.Yo solo asiento sin prestarle mucha atención.– Madre te presento a mi esposo Máximo Cooper.Habla Celia acercándose a mi y tomando mi mano.La señora me mira con una sonrisa amable.– Es un gusto conocerte muchacho, espero que hagas muy feliz a mi hija.– El gusto es mío señora... Pero ¿Que está pasando?Pregunto algo confundido.¿– Acaso no se lo contaste Celia?Pregunta la señora mirandola y está niega bajando la cabeza.– Entonces ven hijo, te contaremos todo eres su esposo y debes de saber la v
CELIA :Al día siguiente despierto con un fuerte dolor de cabeza y en mis costillas.Carajo, juro que los haré sufrir por hacerme esto.Pienso mientras me tomo los calmantes.Minutos más tarde estoy como nueva y me dirijo al baño para hacer mis necesidades y dejo al bello durmiente dormido.Salgo envuelta en una toalla y encuentro a máximo sentado sobre la cama. ¿– Amaneciste bién? ¿No te duele nada? Me pregunta levantándose para dirigirse hacia mí. – Estoy bién, no te preocupes. Digo con una sonrisa besando sus labios. – Buenos días esposito ¿Dormiste bién? Me sonríe como solo él sabe hacerlo. – De maravilla. Dice para besar mi nariz y me sonrojo. – Te vez hermosa cuándo te sonroja, mi esposita... Solo mía. Dice llenando mi cara de dulces besos. El sonido de mi celular interrumpe nuestro bello momento. – Ve por tu celular, yo iré al baño. Dice dejando un último beso en mi frente. Hago un puchero y me dirijo a mi celular. Veo el número de Patri y con una sonrísa descuel