Mientras que él detective se encontraba en el patio trasero dispuesto a morir a manos de Alessandro, él se encontraba recibiendo a su esposa con una espléndida cena, había jurado disfrutar cada segundo de su vida junto a Sophia le estaba cumpliendo.

—No es nada fácil, pero me acostumbraré a vivir este tipo de detalles de tu parte, te ves sonriente como si todos tus problemas hubiesen terminado —Alessandro levantó la copa y brindo con ella.

—Muy seguramente —espetó dibujando una sonrisa de medio lado.

—Me alegra por ti —Sophia bajó la cabeza—. Aunque las cosas no las veo de la misma manera; el día de hoy los contenedores con mercancía de la empresa fueron allanados no logras imaginar el alboroto que hubo, eso sin hablar de los reporteros que se encontraban en el lugar preparados para tomar fotografías de mercancía ilícita.

»Luego de unas largas y bochornosas horas la policía no logró encontrar nada, pero aún así para muchos la empresa de mi padre se ve vinculada de manera directa a l