Sophia sentía que todo su mundo se venía sobre ella al haber contemplado hablar con Alessandro sobre lo que había tenido que vivir en el pasado. —Habla con toda la tranquilidad, ahora soy un hombre diferente y no voy a permitir que sigas sufriendo a causa de recuerdos que ya no pueden continuar —Sophia apretó sus labios y respiró profundamente. —Una vez que mi padre hizo que Noah apareciera en mi vida todo cambió, yo era aquella clase de mujeres que conservaba y cuida de su cuerpo como una joya más preciada del universo, siempre había soñado con tener una boda espectacular, la mejor del año.»Por supuesto, lo deseaba hacer con un hombre que cumpliera con las expectativas de mis padres, inteligente y de una buena familia, en cuanto a mis gustos lo único que pedía era que fuera decente y muy respetuoso, sin importar que tan guapo fuese.»Pero para mi mala suerte Noah llegó con el consentimiento de mis padres, aparentaba ser decente, respetuoso y bueno no puedo negar que ante mis ojos
Debido a los grados de alcohol en su cabeza Sophia en poco tiempo se quedó profundamente dormida, mientras que Alessandro se encontraba más despierto que nunca antes en toda su vida; se levantó cuidadosamente de la cama y salió de la habitación.Alessandro fue directo a la entrada principal, Daniele al instante se acercó a su jefe sin comprender lo que estaba sucediendo. —Saldremos ahora mismo, alista unos cuantos hombres porque no hay tiempo para perder —ordenó Alessandro.Alessandro subió a uno de los autos, del otro costado se ubicó su hombre de confianza, más atrás en otros autos se encontraba sus hombres. —¿A dónde vamos jefe? —preguntó Daniele fijando la mirada en él.—Vamos a divertirnos un poco —respondió Alessandro acomodando su traje. Unos cuantos minutos más tarde los autos se detuvieron frente de un reconocido casino, Alessandro junto con sus hombres descendieron e ingresaron.—Hemos venido por Noah, atrápalo y llévenlo a la parte de atrás, si no se encuentra perdiendo
Sophia despertó con un fuerte dolor de cabeza, sentía que todo a su alrededor giraba a toda velocidad, al observar cuidadosamente se dio cuenta que se encontraba en la habitación de Alessandro, de inmediato levantó las sábanas y se dio cuenta que su ropa se encontraba en el mismo lugar. Giró la cabeza y fijó la mirada en la mesa de noche, allí se encontraba una bandeja con un saludable desayuno y un buen vaso con jugo de naranja, dos pastillas y una nota. “Buen día cariño, tomate el día para que descanses, las pastillas son eficientes para aquel malestar; disfruta del desayuno que yo me haré cargo de los negocios de la empresa” Sophia exhalo con fuerza, acostó su cuerpo nuevamente en la cama, cerró los ojos y dibujó una leve sonrisa en su rostro. —Si no hubieses acabado con la vida de mis padres serías el hombre perfecto, te esfuerzas en quedar como una buena persona, pero ya no lograras conseguir que te pueda ver de otra manera, te amo y al mismo tiempo te odio, te juro que no sé
Mientras que Sophia, sonreía felizmente al lado de James como si fueran una pareja de enamorados, Alessandro sentía como todo a su alrededor le estorbaba para ir directo hasta el hombre que pretendía enamorar a su esposa y con sus propias manos encargarse de desaparecerlo.Alessandro sin pensarlo dos veces y por inercia su cuerpo fue directo hacia ellos.—El día de hoy estás demasiado hermosa, tus ojos brillan y tu sonrisa sería capaz de reanimar a cientos de niños que se encuentren tristes en la cama enfermos —James no podía disimular que su mirada recorría el cuerpo de Sophia. James era consciente de que mientras se aprovechaba de ella, bien podía divertirse con todo lo que tenía frente a él. Alessandro estiró el brazo y tomó la mano de Sophia deteniendo su marcha, giró su cuerpo y conectó la mirada con la suya, todo a su alrededor se detuvo una vez que ella lo miró. —Necesitamos hablar ahora mismo —pidió Alessandro. —En el momento no puedo, tengo asuntos que atender en mi ofici
Luego de aquel rechazo por parte de Sophia, James rápidamente se levantó de la silla y se acercó a ella, estiró el brazo y tomó de su mano. —No te estoy presionando para que dejes a tu esposo, lo único que quiero es poder compartir contigo, eres una buena persona y desde que hemos iniciado a trabajar juntos me has hecho sentir cómodo en este lugar.»Solo quería hacerte saber que así como yo hay muchos más hombres que morirían por estar a tu lado, por favor no vuelvas a insinuar que vas a dejar de trabajar conmigo, porque eso sería una calamidad, para remediar el error que he cometido te invito a almorzar —James le brindó una sonrisa buscando la manera de recuperar la poca confianza que Sophoa tenía en él.—No quiero que las cosas se malinterpreten entre los dos, además de una amistad no podrás encontrar nada más en mí, mi mente y mi corazón le pertenecen solo a Alessandro y por nada del mundo lo llegaré a engañar con otro hombre —recalcó Sophia.—¡Trato hecho! —exclamó James mostrand
Al llegar al restaurante todo allí se encontraba preparado para recibir a Alessandro junto con su esposa, flores por doquier y en una enorme mesa habían postres de todo tipo. «Wao, todo esto lo ha hecho únicamente por mí, es un hombre demasiado exclusivo, ha logrado reservar todo el restaurante más fino únicamente para los dos, fuera de ello ha pedido que decoren el lugar con mis cosas favoritas, es inevitable, lo amo con todas mis fuerzas», pensó Sophia mientras que observaba todo el lugar. —No tenías porque hacer esto, se suponía que solo era una cena, pero tus actos van aún más allá de lo que se cree posible —Alessandro la tomó de las manos y conectó la mirada con la suya. —Me he enamorado perdidamente de ti, eres la primer mujer que se metió a mi corazón y por nada del mundo te pienso perder, quiero que me ames de la misma manera en que yo lo hago, quiero que solo seas mía y no tengas ojos para nadie más —comentó Alessandro acercándose a ella dejándole claro que le pertenecía ú
Alessandro no podía creer las palabras que habían salido de la boca de Sophia, según él estaba haciendo lo mejor para que ella se sintiera bien, le estaba dando lo que necesitaba, pero en aquella noche comprendió que el amor no estaba hecho para él. —Siempre he buscado la manera de hacer que te sientas bien, he tenido que llevar una vida difícil y por más que lo desee en intentar dejar de un lado lo que fui, nunca podré renunciar al negocio familiar —Alessandro tomó una copa de licor y la bebió de un solo sorbo. »Fuera de ello ya sabías la clase de hombre que era, ahora no puedes fingir que hasta ahora estás abriendo los ojos, lo que creo es que James se ha encargado de manipular tu cabeza, pasas demasiado tiempo junto a ese desgraciado y con sus palabras se ha encargado de dañar mi imagen y lo peor es que ha puesto en duda lo que sientes por mí. »Por favor Sophia no permitas que aquel bonito sentimiento que hay entre los dos desaparezca, te juro que te amo con todas mis fuerzas y
Sophia mientras se encontraba en el interior del baño lavó su cara con abundante agua fría, ella sabía lo que se iba a venir y aún no estaba preparada, la venganza que buscaba en contra de Alessandro no podía esperar más. Luego de tomarse unos cuantos minutos salió del baño meneando su trasero, una vez que llevó la mirada directo a la cama detuvo su marcha, Alessandro esperaba recostado en la cama sin camisa dejando la vista su fuerte y tatuado cuerpo, aquel que ella no se podía resistir. Alessandro se levantó y se acercó a su cuerpo, levantó los brazos y colocó las manos sobre sus mejillas, luego fue acercando su rostro al suyo estrellando sus labios contra los carnosos de ella, le brindó un apasionado beso el cual fue correspondido. Alessandro no podía ocultar que moría de ganas por tener a Sophia entre sus brazos y besarle hasta su sombra, ella correspondió a sus caricias, Alessandro beso su cuello dejando caer su rostro hasta llegar a sus redondos pechos, lamio y succiono de el