Mientras que Alessandro trataba de sobrevivir en prisión, Sophia estaba en las manos de un hombre bastante peligroso, James al estar siendo presionado por Paolo debía moverse más rápido de lo que pretendía hacerlo.—Amor, baja que la cena ya está lista —dijo James y al instante Sophia bajó.James quedó sorprendida al anotar la ridícula manera en la que ella se encontraba vestida, trato de disimular para no burlarse frente a ella. —Por favor cariño acércate y toma asiento —pidió James con un tono de voz dulce y una mirada tierna. Sophia se acercó a la mesa y él acomodó la silla, le ayudó a sentarse como todo un caballero, Sophia se encontraba sorprendida, había flores, velas aromatizadas, una estupenda cena y por supuesto vino. James acomodó los platos y luego sirvió, Sophia sonreía, estaba que no cabía de la dicha.«Si no sentía nada por James con estos detalles dentro de poco tiempo terminaré enamorándome de él, a pesar de todo es un buen hombre, desde el primer momento ha demostr
Las manos de Sophia se encontraban sudorosas, un cosquilleo recorrió por su cuerpo causando que todo fuera más difícil de lo que ella imaginó.«Pero, ¿qué sucede contigo Sophia, se supone que él es el hombre con el que has estado, por qué no puedo corresponderle como lo merece o como se supone que debería hacerlo?», se cuestionaba a sí misma Sophia en silencio. —Por favor sigue y ponte cómoda, te aseguro que la vas a pasar muy bien —aseguró James causando en Sophia que su respiración se acelerará.Ella tragó saliva, su frente se tornó sudorosa, James justo la puerta causando aquel golpe que ella diera un pequeño salto; él se acercó dando pasos cortos, estiró los brazos y la tomó por la cintura ubicándose en la parte de atrás, con esfuerzo y sacrificio se dispuso a tomar su cuerpo. James lentamente acercó sus labios recostandolos sobre su cuello, causando que su piel se colocará de punticos.—Solo déjate llevar, tú lo vas a disfrutar al igual que yo —susurro cerca de su oído y luego
Sophia antes de colocar la firma en los documentos llegó a su cabeza un nuevo recuerdo donde habían varios documentos, los cuales causaban gran preocupación en ella, su mano se abrió soltando el bolígrafo al piso.—Quiero conocer la empresa, me gustaría saber de que se tratan los negocios, y ¿qué papel desempeñé mientras estaba en mi lucidez?, seguramente al estar nuevamente allí podre recordar mejor sobre mi vida pasada —James tensó la mandíbula sintiendo fuerte coraje ante el nuevo desplante por parte de Sophia.—No estás en condiciones para encargarte de los negocios de la empresa, ya deja de ser terca y acepta mis consejos, ¿acaso quieres sufrir un accidente o llegar a perderte y que nunca más te puede encontrar? —reclamó James alzando el tono de su voz dejando ver una faceta que a ella no le agrado.—Te pido que por favor no me hables de esa manera, si intentas ayudarme entonces ten un poco más de paciencia, antes de colocar mi firma quiero conocer los negocios, no estoy diciendo
Alessandro ha logrado ocupar el puesto máximo el interior de la prisión, Snake se ha convertido en su mano derecha, ha puesto toda su confianza en él ya que es la persona encargada de ponerlo afuera de la prisión, se siente tranquilo porque ha logrado hacer que Paolo piense que está muerto y eso es un punto a su favor.Los guardias rinden pleitesía a Alessandro, se han convertido en la ficha clave para mover mercancía en el interior de la prisión, a su vez lo hacen para que él pueda manejar los negocios en el exterior. Snake ingresó a la nueva celda donde se encontraba instalado Alessandro, apretó los labios y luego bajó la cabeza.—¿Qué sucede, acaso nos han descubierto y el plan de fuga se ha ido al carajo? —preguntó Alessandro bastante preocupado ya que cada minuto que transcurría sentía que Sophia la estaba pasando muy mal.—He averiguado lo que me has pedido; Daniele tu hombre de confianza ha muerto, y los hombres que trabajaban para ti ahora lo hacen para tu primo Paolo —Alessa
Alessandro se sentía nuevamente feliz, había logrado conseguir escapar y lo único que deseaba era poder estar al lado de Sophia, abrazarla, sentir su aroma y susurrar a su oído aquellas palabras que hacían que se humedeciera sus bragas. Hacerle el amor una y otra vez en distintas posiciones hasta lograr saciar aquellos deseos locos de sentir que eran uno solo, el dolor que había en su cuerpo era calmado ante el simple hecho de sentirse libre. Luego de que condujo por largas horas Alessandro fue a una de sus guaridas, llevó a Snake dentro y lo ayudó a recostar sobre el sofá, mientras que él iba por el botiquín; hizo curación a sus heridas y bebió agua.—Gracias mi hermano —murmuró Snake luego de recuperar la conciencia. —Estamos libres y eso es lo que importa, hemos logrado escapar, dentro de poco tiempo nuevamente estaré a su lado y a la brevedad saldremos de este país antes de que las autoridades me vuelvan a atrapar —aseguró Alessandro dibujando una leve sonrisa en su rostro mien
Mientras que Alessandro de manera sigilosa perseguía a Sophia y a aquel hombre con el cual demostraba tener algún tipo de relación, James le daba un recorrido a Sophia por su propia empresa.—Ya has visto suficiente, no importa cuanto tiempo te quedes en este lugar o cuantas veces lo hagas, nunca vas a poder recordar quien fuiste o lo que hacías, mejor firma ahora mismo los documentos antes de que las cosas se salgan de control y la empresa de tu padre sea perdida —hablo James mientras se ubicó frente a Sophia conectando su mirada con la suya. —Tienes toda la razón, aún sigo sin recordar ni siquiera un pequeño fragmento de lo que fui, me siento demasiado agotada, me podrías llevar a un lugar para poder respirar con tranquilidad y poder tomar un poco de agua, me ha dolido demasiado la cabeza ante el esfuerzo de recordar —James tenso con fuerza la mandíbula al sentir impotencia ante la manera de actuar por parte de Sophia.—No prefieres que vayamos a casa, allí te vas a sentir más cómo
Alessandro conectó la mirada con la de su esposa, la felicidad y emoción de tenerla nuevamente frente a él no le permitió comprender lo que estaba sucediendo, tan solo quería que ella llegara hasta sus brazos, fundirse en un caluroso beso y sentir que nuevamente eran uno solo.—¡Quiero el divorcio!, ya no quiero estar unida a usted de ninguna manera, hablaré con mi esposo y le pediré que se haga cargo de recuperar mi libertad —Alessandro se dio golpe contra la realidad.—Pero ¿qué has dicho?, no logro comprender lo que está sucediendo, tiempo atrás vivías y morías por estar junto a mí y ahora lo único que pides es que nos separemos, ¿de que te has enterado? —Alessandro se acercó a ella, pero al notar el temor que causaba su acercamiento decidió darle espacio.»No importa lo que te hayan dicho o de lo que te hayas enterado, me arrepiento y te juro que cambiaré, por favor no me alejes de ti, eres el único motivo por el cual permanezco de pie, eres mi vida, mi reina, mi mayor alegría y f
Sophia luego de haber logrado deshacerse de Alessandro se dio vuelta y fijó la mirada en el enorme ventanal; su pecho sentía una sensación extraña, y al mismo tiempo demasiada tranquilidad, finalmente había logrado conseguir recuperar su libertad y había puesto a salvo la empresa y todos sus bienes. La puerta se abrió, ella giró la cabeza rápidamente sintiendo temor que se tratara nuevamente de Alessandro, pero quien había ingresado era James, en su mano sostenía una pequeña bandeja con unas cuantas golosinas. Ajustó la puerta y lanzó la bandeja sobre el escritorio mostrando su molestia. —Come pronto, porque necesito que firmes los documentos —habló James alzando el tono de su voz. Sophia apretó los labios y asintió levemente con su cabeza, a pesar de que ya no tenía memoria aún sentía demasiado temor cuando le hablaban de aquella manera; Sophia se sentó y comió unos cuantos pastelillos. Mientras lo hacía recordaba las palabras que salieron de la boca de Alessandro, luego dibujó