Ella sabe que todo eso de que me quede aquí para poder practicar más con mi equipo es pura basura. Ella sabe que Alfa Reagan es la única razón por la que quiero estar aquí.

"Está bien cariño. Si tú lo dices. Pero recuerda que estoy a una llamada de distancia. No dudes en llamarme si te pasa algo. Prométeme que no te guardarás las cosas para ti y que lucharás sola".

"Prometo no hacer eso, mamá".

Digo, ¿por qué lo haría cuando tengo a Alfa Reagan para quejarme?

"Bien. Me tengo que ir. Cuídate, cariño, y dile a tu hermano que conteste mis llamadas".

"Lo haré, mamá. Buenas noches. Te amo".

"Yo te amo más, cariño". Tres pitidos y la línea se corta. Exhalo pesadamente mientras me giro hacia la escalera. Mi ritmo cardíaco sube y doy un salto hacia atrás asustada mientras un pequeño grito sale volando de mis labios cuando veo a Ryan parado como una estatua en la escalera.

"¡Ryan!", llamo, agarrándome el pecho con la mano libre y respirando con dificultad.

Dios, ¡me asustó!

"¿Por qué