DOS AÑOS DESPUÉS.

PUNTO DE VISTA DE ASHANTI

"Mamá, lo siento, pero el maquillaje te estaba tomando demasiado tiempo, así que Ryan y yo tuvimos que irnos primero". Lloro por teléfono y mi madre resopla burlona al otro lado.

"¡Ustedes chiquillos nunca me darán un respiro!".

"Nos vemos en la sala de conferencias, mamá. Adiós". Cuelgo el teléfono, lo meto en el bolso y suspiro.

A medida que envejece, su amor por el maquillaje se hace más fuerte y eso frustra a todos en casa, incluido mi padrastro, Michael.

Miro por la ventana y me doy cuenta de que acabamos de llegar a las instalaciones del edificio. El conductor se dirige hacia la entrada principal del edificio y, en cuanto estaciona, un guardia vestido con un traje negro me abre la puerta del coche y yo salgo elegantemente con el bolso en la mano izquierda. Mi mirada recorre el alto edificio que se alza ante mí y una sonrisa se dibuja en mi rostro.

Lo he conseguido.

Hace dos años, mi madre me preguntó qué me gustaría hacer ya qu